Yo os tengo que contar una cosa de hoy que iba a contarlo en el fracachac pero como cierran muy pronto pues lo pongo aquí porque algo tiene que ver con el calor.
Me para a eso de las 5 de la madrugada una mujer de unos 35. Una tía bastante normal, más bien tirando a guapa. Vamos a Vicálvaro. Bueno, al poco de montarse me empieza a venir un fortísimo olor a coño. En mi vida he percibido tan nítidamente que alguien vestido oliese de semejante forma a coño. No sé si vendría de follar, de estar magreándose y estar como un bebedero de patos o que simplemente no se había dado un agua en semanas, pero el olor era intensísimo, como digo.
Algo tienen esos olores, amigos, que nos despierta el animal porque yo he empezado a ponerme como una moto, joder, que si llega a ser por mí es que no la cobro un duro por la carrera con tal de que me hubiese dejado asomarme a ese coño oloroso.
Cada vez que se movía en su asiento me venía una oleada y yo creo que la hija de puta se daba cuenta porque si miraba por el retrovisor allí que se encontraban nuestros ojos.
Lástima no ser un Alpha y haberla dicho de quedarnos a follar en un parque porque ese olor de hoy, ese coño sudado que ella tenía me ha transportado a mi adolescencia y mis primeros coños.
Gracias ola de calor por este momento.