Rastrer0 rebuznó:
Si uno actua como realmente es, sin falsos artificicios ni estrategias premeditadas para conquistar a una tia y te deja, no hay que torturarse joder, simplemente no era la tuya, quedate con los polvos echados, los buenos momentos y sobre todo ni guardes rencor, ni odio, ni nada, eso es darle demasiada importancia a una tia que siendo tu honesto desde el principio se desencanto, pero la culpa no es tuya, es suya por creerse cosas que tu no eras.
¿De que te sirve sumirte en la melancolia de vasos perfumados de alcohol unicamente rellenos por un par de hielos semi derretidos, un cenicero lleno de cigarros y de fondo el sonido de alguna cancion donde acompaña el sentir de retozarnos en el barro?
El rencor, el dolor, la rabia por el tiempo que nunca, por muy rico que seas, podrás comprar de nuevo.
La impotencia por el esfuerzo malgastado, la certeza cada vez más insultante de que el amor es una mentira, una trampa con la que tu cerebro cada vez se cansa más de intentar engañarte y el supino coñazo de primeras conversaciones con gente que muestra tanto sus cartas que pierde el poco interés que tenía.
Repasar en tu cabeza los posibles errores, comprender que, efectivamente, eres subnormal, como todo el mundo.
Todo esto regado de etanol u otras drogas al gusto, no por decadencia, sino por experimentar obligando a tu cerebro a ver las cosas de otra manera aunque sea tapándole los oídos.
Abrazar el dolor, jamás escapar de él, hacer de ese sabor tan amargo tu taza de té diaria. Hasta que ya no sepa a nada. Hasta que eres inmune al veneno, cuando tu umbral de sufrimiento sube esos nuevos peldaños eres un hombre más fuerte.
¿Nunca os ha dicho una mujer "Eres demasiado joven"?
Con lo maduro que eres y has sido siempre, con lo sensato y sagaz que te consideras, te parece increíble lo que escuchas y no te paras a traducirlo porque no entiendes que es en otro idioma en lo que te hablan.
Lo que quieren decirte, además de que tu sueldo no es lo bastante alto, es que has sufrido demasiado poco, que no estás lo bastante dañado y por eso te ven ajeno, te ven con algo que ellas perdieron y reconocerlo en ti es como nombrar la soga en casa del ahorcado.
Ilusión, felicidad, pasión, ganas de vivir y de experimentar. Rasgos de la juventud que no son incompatibles con la superviviencia ni con un modo de vida adulto. Pero por alguna razón nos quieren hacer creer que estamos equivocados, que ese dolor al que nunca supieron enfrentarse es una manera de la naturaleza de enseñarnos que ser joven es un error.
Mientras hay gente que aprende a sobrellevar el dolor, otros aprenden a ser uno con él, interiorizar cada ápice de sufrimiento y hacer alquimia de ello hasta ser un ser de luz. O morir en el intento.
Si hay algo que aprendí de mi padre cuando aún estaba casado con mi madre es que las mujeres son máquinas de hacer sufrir y
su combustible es tu vida.
Cada vez que te engañes, cada vez que pienses que "esta no", alégrate, porque aún tienes una nueva lección que aprender.
Y después de las lecciones viene el ron.
Manda huevos que una mujer lo haya entendido mejor que algunos:
Lisabeth rebuznó:
El problema de la mayoría de la gente y no distingo entre sexos porque lo veo por igual, es que huyen del dolor, pero el dolor no se va, aparece como ansiedad, frustración, estrés, tocs, fobias, manías, enfermedades de todo tipo...no se va porque es parte de la vida, entonces llega un momento en que lo asumes y lo vives como cualquier otra emoción, o lo pagas por otro lado.
Black Adder lo tiene más interiorizado, está claro. Yo estoy pensando convertirme a la
iglesia de Charles Bronson.