Tuzaro
Freak
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Bueno chumachos, una tierna historia de verano, de amores furtivos a la par que fugaces, de inocencia, juventud y cariño cómo está que os he ido narrando, no podía tener un epílogo mejor. Aquí me hallaba yo en el gimnatzio cuando de repente he comenzado a oir sonrisas que me eran familiares y al volver la vista atrás, allí estaba ella, entrenando bíceps...junto a...bueno, junto a un maromo de su edad, haciendo ostensibles gestos de cariño y de complicidad. Un hijueputa con pinta de niñato y con el mismo peinado que el Foden del City. Un cani politatuado con un cuerpoescombro de tres pares. Y ahí estaba ella, abrazándolo por su espalda, frotando esos turgentes pechos con la espalda de un cretino salido de programas como lo de las Tentaciones. Se ve que eso las atrae, eso yes. Jodida niñata con menos sesos que un búcaro. A mamarla. Sólo espero no verla ni a ella ni por supuesto a ese gañan del todo a euro con mis zapas porque si no, se lía. Intentaré fotoninja del jodido enclenque este. Lamento haberos creado tantas ilusiones pero más me hice yo, y además he sido yo el que palmó los trucutrucus. Que asco de teens y que asco de todo, coño.
"Ella no es de esas, no es como las otras niñatas de su edad, muy y mucha madurez blablabla..."

Recordando como la respetabas en la primera cuasifollacita en la pizzería.

Podría ser peor onvre, igual un día te lo presenta... y al salir del gimlasio vais a tomar algo los tres juntos.


