Mi padre era empresario de éxito y mi madre una señorita de la alta aristocracia, se conocieron en la universidad, se casaron por la iglesia y tuvieron siete hijos, todos con carrera (yo dos carreras y cinco másteres), jamás una palabra más alta que la otra, jamás un reproche, siempre juntos en la riqueza y en la salud. Ayer fui a visitarlos a una de sus segundas residencias en la sierra y les pillé besándose mientras arreglaban el jardín, jejeje, todos tenemos nuestros pecadillos.