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LOLansky rebuznó:Saliéndome del tema, creo que no puedo hacer otra cosa que alabar el post de iskariote. Eso es una manera de discurrir y argumentar desde la distancia, tomando perspectiva desde la visión personal hasta un realismo digno del mejor filósofo. Posts así son necesarios y no me quedo corto si te digo que para mí serías el moderador ideal para este subforo por tus puntos de vista. Yo puedo moderar, organizar y promover, pero nunca seré capaz de debatir argumentos con otros foreros tal y como lo haces tú.
Queda dicho.
Yo no soy un moderador. Me gustaría, admiro y aprecio el orden y la pulcritud, pero hay que conocerse a uno mismo y he de aceptar que soy más bien un agitador.
Pero gracias de todas formas, es gratificante saber que hay alguien al otro lado y a nadie le escuece que le rebañen el escroto.
Enemas_de_fabada rebuznó:Oye pues desde cierto punto de vista no te digo que no. Pero las relaciones sociales/personales guiadas exclusivamente por la razón serian una mierda de proporciones jurasicpareskas. Para eso mejor construimos IAS y robots y nos hacemos a un lado.
Si fuera Victor I escribiría un ladrillazo de tres parrafos ensalzando la maravillosa e impulsiva insensatez de Eros y la terrible belleza del lado Dionesiaco de la vida. Pero como soy yo pues tendrás que conformarte con esta mierda.
No he dicho que reniegue de las decisiones irracionales. Las acato como el que más. Y se disfrutan con incomparable placer cuando se olvida uno de buscarle 3 pies al gato y acepta que es un puerco revolcándose en el barro. Así como se apechuga mucho mejor con las consecuencias si se acepta antes del naufragio que se están replegando las velas para navegar a la deriva.
Lo que intentaba advertir es que esa pantomima, ese baile de máscaras al que jugamos con nosotros mismos cuando nos inventamos razones para actos irracionales, nos lleva siempre a sitios indeseados.
Esperamos cosas mejores de la gente bella. Somos así. Por muy consciente que sea de ello y por muy vehemente que parezca mi razonamiento, soy una víctima más. Lo erróneo es idealizar y proyectar ese espejismo en el futuro, esperando conductas que se ajusten a nuestra fantasía o que unos ojos grises lleven de la mano una piscina privada.
El amor a primera vista es un escote o un culo, unos ojos enormes o una dentadura inmaculada. Y, como todo tipo de amor, es un muy mal consejero.