Siempre he rehuido querer meter la polla donde tenia la olla.
Evidentemente,erecciones mil he tenido con las compañeras,pero bueno,una paja al llegar a casa vale mas que la carta de despido.
Pero eso si,lamidas escrotales al encargado de turno en el trabajo,varias he presenciado,y la verdad,algo asqueroso es.
Tanto que hablan la mujer en el trabajo,igualdad,pero en cuanto pueden,acarician y babosean el cimbel del encargado para conseguir mejores puestos,no cansarse mucho,y joder a su rival.
Es harto curioso como se pintan,maquillan,incluso vestiditos para ir a currar en turno de noche a una fabrica del metal,en fin,ley de la selva y competicion con las demas feminas,a los hombres,nos da un poco igual esto.
Como experiencia durante año y cuatro meses como "servicios auxiliares" en un edificio de oficinas,los loles han sido muchos.
Niñas teleoperadoras creyendose que se yo siendo una teleoperadora de mierda,y unas insuflas que se derruian Hinderburg Style cuando llegaba la carta de despido entre rabieta y rabieta.
Las reuniones entre directiv@s de varias sucursales,eran una oda a la hipocresia,vestidos de vertigo,carcajadas hipermegaexageradas cuando luego no se pueden ni ver y despues se ponen a parir,perfume para atufar por los siglos de los siglos amen,y aparentar seriedad cuando estan deseando irse de juerga y puterio al estar en otra ciudad.
Las entrevistas de trabajo parecian un lupanar de alto lujo,y desde mi situacion privilegiada,un espectaculo de canalillos que rianse del de suez.
Si,alguna vez me he insinuado,entre jiji jaja y demas,pero vamos,aprecio mas mi puesto trabajo que un lio.