Tocha rebuznó:
O sea, la ciudadania catalana tiene impuestos casi hasta por respirar, de peajes ni hablemos, una deuda... en fin.
Y me comenta, que teniendo que añadir al coste economico autonomico ordinario, las competencias que tendria que asumir tras la independencia, al dejar de ser costeadas por la perfida españa, que les ira de puta madre.
Y claro, las grandes multinacionales y mercados se fiaran por completo de un nuevo estado por que Artur lo dice, y con eso, ya vale.
Claro, claro.
No lo tienen tan guay como nosotros (los vascos) pero es cierto que con un PIB que supera a cualquier otra autonomía (más que la centralista - y pese a las ventajas que ello conlleva - Madriz, más que Andalulzia - que posee un millón más de habitantes, tocándose el nardo claro - más que la corrupta, rancia, conservadora, gominalieber Valencia . a la que supera en habitantes en un 50% pero su PIB vuela por encima del 100%)...
Son todo números, está claro que ahora sale de Cataluña más pasta de la que entra. Y no solo. Sale MUCHA más de la que entra.
Haz el siguiente ejercicio; piensa en España como en un equipo de fútbol. De primera división, si, pero siempre de mitad de tabla para abajo, nunca jugando uefa ni champions. Los jugadores mediocres matan por jugar en ese equipo, pero los buenos buscan mejorar, salir.
Es cierto que luego lo puedes aderezar con txapelas, txalapartas, sardanas y castellers - o toritos, flamencos y ole mis cojones castizos repletos de testiculina mesetaria - pero la pela es la que manda en un sistema capistalista, y cada región busca que los suyos vivan mejor.
No creo que esta vez podáis parar las aspiraciones catalanas, que como poco, es un concierto catalan similar al vasco, que por cierto ya se les ofreció en la transición, y rechazaron por el riesgo que implicaba. Al final los que se tocan los huevos (valencianos, andaluces, extremeños, griegos) tienen los días de subvención contados. A nadie le gusta tirar del carro mientras arrastras a huevones que lo único que hacen es enarbolar una bandera y costumbres que encima consideras ajenas.
De perogrullo, que diría aquel.