Traumas infantiles

Violador por eso? Váyase a cagar anda
No es ningún violador, era una broma. Lo que si es, es un señor con gran sentido del humor, y que sabe hacer bromas con un gusto refinado, ya quisieran estos humoristas de ahora tener la mitad de saber estar, e inteligencia para hacer bromas así. No dejo de troncharme desde que te lei, cuentanos más, ese hombre es oro.
 
No es ningún violador, era una broma. Lo que si es, es un señor con gran sentido del humor, y que sabe hacer bromas con un gusto refinado, ya quisieran estos humoristas de ahora tener la mitad de saber estar, e inteligencia para hacer bromas así. No dejo de troncharme desde que te lei, cuentanos más, ese hombre es oro.
Curiosidad nunca se fue de campamento? La broma de la bolsita de té nunca la vio hacer?
 
Está muy estropeada tu madre? Creo que me estoy enamorando de ella.

Respecto a la ropa, no sé si los culpables fueron las madres y su, digamos, disparatado gusto, o que a nostros como niños todo se nos hacía un mundo.
Yo también era de los que se vestían con la ropa de su primo tercero el que vive en Babilonia, al que jamás has visto, y que debían vestir como a los hijos de los reyes católicos, porque vaya ropa de subnormal profundo tenía para las bodas y ese tipo de eventos. Tengo una foto que toda la vida he pensado que ese día me vistieron así para descojonarse. El próximo día que vaya a casa de mi puta madre intentaré acordarme de hacer retrato para masunearla. El caso que el vestuario de ese día consistía en unos calcetines de encaje subidos hasta las rodillas y una especie de peto de mecánico en su versión pantalón corto, todo ello aderezado con una camisa, o algo así, que claramente es de niña. Alguna vez he cuestonado a mi madre sobre si ese día habían bebido algún tipo de brebaje lisérgico y ella siempre me dice que "es lo que se llevaba".
Respecto a los chándals yo también los llevaba llenos de pegatinas para tapar bujeros y rodilleras a tal punto que algunos me hacían parecer un piloto de Fórmula uno de tanto parche en el mono, pero a mí esto me gustaba ya que me solían dejar elegir los parches y ahí estaba yo, plagado de movidas de las tortugas ninja, escudos del Madrid y hasta uno tenía que simulaba ser una cajetilla de Camel.
Un día que me tocaba gimnasia y que debían estar las deportivas lavándose me hizo ir con chándal y zapatos, tal y como le pasó a @Torquemada2.0 y esto es lo más cercano a trauma a este respecto pues tuve que aguantar risas de mis compañeros e interpelaciones acusadoras de mis profesores.
Pero trauma como tal, si lo pienso ahora, si hablamos de lo que deja huella en la infancia, eran las discusiones que tenían mis padres que a mí hermano y a mí nos horrorizaban. Especialmente las que se daban en el coche. Mi madre se volvía completamente loca y chillaba como tal. Ponía caras de endemoniada y un par de veces paró en el arcén y nos sugirió que bajásemos del coche porque lo iba a estrellar para matarse.
En casa recuerdo ponerme los auriculares a toda hostia para no oírles y esperar con miedo el silencio entre canciones o estar escuchando algo y notar como la pared ha retumbado por un portazo.
Aparte del miedo a que se divorciasen, cosa que es algo que a los niños les suele dar pánico, yo tenía miedo real a que uno de los dos se suicidase allí mismo o matase al otro. Era algo que yo notaba que podía pasar en cualquier momento y creo que no andaba muy desencaminado
Las discusiones maritales en el coche, un clásico.

Yo recuerdo con lol más bien las de mis padres después de una comunión, bautizo o boda de un pariente. A mi progenitor se le calentaba el hocico y al final se liaba a pagar pelotazos de Chivas a gorronacos que no habían visto ese whisky ni en fotos.
Al final mi madre cual superguerrero estallaba en el coche.


"Tú primo Pedro siempre se va al baño a la hora de pagar o su cartera da más vueltas que un marica en una feria sin abrir" gritaba no sin toda la razón a mi padre, que estoicamente aguantaba el chaparrón con el puntillo (o puntazo más bien) que llevaba, mientras conducía de vuelta con el Winston en la boca.

Después se iba a dormir y entonces mi madre seguía con el rotor de la ira a full poder cuando hacía las cuentas entre lo soltado como regalo y la sablada de las copas.
 
Última edición:
Yo mi mayor gñe era con la casa. Nosotros vivíamos hacinados, compartiendo cuarto y cagando uno detrás de otro. Nunca podía invitar a otro porque no había intimidad. No podía llamar a chorbas desde el fijo porque no había intimidad. No te podías pajear agusto porque no había intimidad.
Quizá por eso soy tan callejero.
 
Qué triste y qué ridículo que muchos se sientan traumatizados por haber sido vestidos de cierta forma o no haber recibido objetos de cualquier tipo cuando los deseaban. Ya hay que ser blandengue para traumatizarse por algo así, vaya panda de niños malcriados y lloricas.
A mí no me traumatizó nada, ni siquiera la muerte de mi padre cuando yo tenía 13 años. Algo haría...
 

A la ducha con los padres.

Para ver este contenido, necesitaremos su consentimiento para configurar cookies de terceros.
Para obtener información más detallada, consulte nuestra página de cookies.




Hombre, eso lo hacían mis tios con mis primas, se ve que era moda ahí por mediados de los 80.
Claro que las niñas no desarrollan envidia/complejo por ver un pene grande.

Cosa de consolas.

Para ver este contenido, necesitaremos su consentimiento para configurar cookies de terceros.
Para obtener información más detallada, consulte nuestra página de cookies.



El niño pera ahí con su atari. Yo jugaba al pacman en casa de los demás. O en la calle, pero el dinero para jugar lo tenía que conseguir en la calle.

Tu padre y tu tío, menudo tandem ¿de qué murió tu tío?

El atari llenó tu vida de ilusion y esperanza?:lol: Qué culebroneros que sois.
You are granny's bitch

Para ver este contenido, necesitaremos su consentimiento para configurar cookies de terceros.
Para obtener información más detallada, consulte nuestra página de cookies.



WTF?:niños:

¿Pero te hacían pajas, te empalmabas, te corrías?


Las discusiones maritales en el coche, un clásico.

Yo recuerdo con lol más bien las de mis padres después de una comunión, bautizo o boda de un pariente. A mi progenitor se le calentaba el hocico y al final se liaba a pagar pelotazos de Chivas a gorronacos que no habían visto ese whisky ni en fotos.
Al final mi madre cual superguerrero estallaba en el coche.


"Tú primo Pedro siempre se va al baño a la hora de pagar o su cartera da más vueltas que un marica en una feria sin abrir" gritaba no sin toda la razón a mi padre, que estoicamente aguantaba el chaparrón con el puntillo (o puntazo más bien) que llevaba, mientras conducía de vuelta con el Winston en la boca.

Después se iba a dormir y entonces mi madre seguía con el rotor de la ira a full poder cuando hacía las cuentas entre lo soltado como regalo y la sablada de las copas.
Los míos tambien, y se metian con la familia del otro. Mi madre en momentos de paroxismo se daba puñetazos en la cabeza
Yo mi mayor gñe era con la casa. Nosotros vivíamos hacinados, compartiendo cuarto y cagando uno detrás de otro. Nunca podía invitar a otro porque no había intimidad. No podía llamar a chorbas desde el fijo porque no había intimidad. No te podías pajear agusto porque no había intimidad.
Quizá por eso soy tan callejero.

Yo no podía invitar a nadie a mi habitación porque no tenía habitación, de los 7 a los 14 dormía en la sala, el sofá era una especie de baúl revestido con una colchoneta por arriba, por las mañanas guardaba la ropa de cama y sacaba los cojines respaldo del sofá, en realidad era una mierda de mueble, en una ocasión estaban todos sentados en él, menos yo, y lo hundieron, desde entonces, de vez en cuando, a media noche se caía la esquina dentro del arcón despertándome con gran sobresalto.
 
Última edición:
Mi progenitor para sacarse unas perras extra tenía colmenas.
El caso es que todos los veranos me hacía ir a trabajar en uno de los peores trabajos que se pueden tener.
Por la mañana se iba al colmenar a "castrar las colmenas" que era ir a sacar los panales llenos de miel y sustituirlos por panales vacíos. Usando un ahumador para poder sacarlos sin que estuvieran llenos de abejas y guardarlos en el coche.
Mientras se hacía esto en pleno verano a 30 grados y con varias capas de ropa y guantes para que no te picaran las abejas. El caso es que siempre te picaba alguna, recuerdo mirar con pánico los guantes de cuero acartonado con decenas de aguijones clavados y que de vez en cuando atravesaba alguna abeja.
Pero no solo tenías miedo a que atravesaran los guantes, no sabéis lo que es que se te mueva un poco la careta y te entre una abeja dispuesta a picarte en los ojos , o dos o tres, y tú no poder hacer nada, ya que si te la quitabas todavía era peor, o empezar a correr por el monte presa del pánico mientras tu padre te echa encima la bronca por no seguir trabajando.
Y luego que se te bajara algún calcetín que te ponías por encima del mono y que entraran por el pantalón, pura diversión. Siempre iba aterrado, nunca recé tanto como aquellas largas horas a pleno sol sin poder si quiera beber un poco mientras el ruido ensordecedor de esos insectos apenas me permitía escuchar las órdenes de mi padre.
Algún verano conseguí librarme gracias a que me apuntara mi madre a natación u otras mierdas, pero ahí no acaba la cosa.
Según mi padre si andabas por entre las colmenas los meses que no se les quitaba la miel a las abejas no pasaba nada porque no picaban, (tenía razón, nunca me picaron en esas épocas) pero da igual el cabrón me mandaba tareas que me obligaban a recorrerme el colmenar de punta a punta caminando entre decenas de colmenas ,con los cojones de corbata.
La otra ocurrencia que tuvo para que le quitara el miedo a las abejas que el mismo me había metido en el cuerpo, fue durante las tareas de la tarde.
Si por la mañana se iba a por los panales, por la tarde tocaba usar el desoperculador que era una máquina infernal a la que tenía que estar dando a su manivela durante 5 o 6 horas seguidas.
Una cosa así pero sin motor y a manivela. Ya que los de motor eran muy caros:

extractor-12-cuadros-universal-reversible.webp


extractor-12-cuadros-universal-reversible.webp

Y si fuera solo por el trabajo monótono de mantener la vista fija en un punto durante toda la tarde mientras movía aquello, pues ni tan mal. El problema es que para meter los panales en el cacharro había que sacarlos de las colmenas "vacías" en las que los habíamos metido por la mañana.
Bueno pues como os podéis imaginar siempre quedaban abejas, aunque pocas, 1 o 2 por cuadro era perfectamente factible.
En cuanto cogía uno las abejas empezaban a volar por allí y se iban o bien a las ventanas, o te andaban al rededor. Para ponerle huevos al asunto, mi padre me hacía trabajar sin camiseta ni pantalones, solamente en calzoncillos, porque según él así les iba a quitar el miedo ya que dentro de casa y si no se las molestaba, no picaban (Otra verdad) , pero daba igual.
Imaginaros de críos estar en calzoncillos con abejas que te subían por los pies y te trepaban por las piernas, o corrían por tu espalda, se te enredaban en el pelo... mientras seguía con la vista fija en un punto rezando para que no tomaran ninguno de mis movimientos como una amenaza. Más miedo les cogí aún. Y aunque cumpliera con las tareas el pánico seguía ahí.
Por último nunca olvidaré las broncas como me viera pisar o matar alguna abeja, ya que son "ganado" y había que cuidarlas.
Lo mejor que me pasó fue llegar a la adolescencia y que una picadura me diera una reacción alérgica del copón y que el médico le dijera que no me podía seguir llevando a las colmenas porque me podía morir. Doy gracias a Dios por concederme esa alergia desde entonces.
A día de hoy no le tengo miedo a nada, excepto a escuchar el zumbido característico de una abeja a menos de 2 metros. Entonces empiezo a correr como una niña haciendo aspavientos y la gente que tengo al rededor me pierde todo el respeto.
 
Más que trauma en mi caso lo considero entrenamiento para estar más curtido en la vida.
De más pequeño, en la fiesta de Reyes de la empresa donde trabajaba mi padre organizaban un sarao con tres fulanos disfrazados de Magos y allí se repartían los regalos. Los regalos no los ponía la empresa, cada padre compraba el regalo de su hijo y ahí venia el espectáculo. Coches teledirigidos, cosas chulas, regalos de puta madre casi todos y a mí un puto ajedrez de viaje pequeño, con las piezas con imanes.
Siendo más mayor ya, 14 a 16 años,nunca tuve propina o paga, en mi casa me daban lo necesario, comida y ropa pero ni un duro más. Ropa, digna pero sin marcas, cuando quise unas Converse, o Nike, a hacer trabajillos para ganar unos duros, ahorrarlos y comprarlos. Todo tenía un precio y un valor. Si quería algo me lo tenía que ganar.
Cumplidos los 18 ahí empecé a compaginar los estudios con mil trabajos para poder pagarme mis gastos. En cada, comida, ropa y matrícula y libros. Para todo lo demás, si quería tener mil duros en el bolso, a currar
 
Cosa de consolas.

Para ver este contenido, necesitaremos su consentimiento para configurar cookies de terceros.
Para obtener información más detallada, consulte nuestra página de cookies.

Por cierto ¿os habeis dado cuenta de que dice “cónsola” en vez de consola una y otra vez? ¿Por qué? ¿Eres tú solo, o es común ahí?
 
Última edición:
Por cierto ¿os habeis dado cuenta de que dice “cónsola” en vez de consola una y otra vez? ¿Por qué? ¿Eres tú solo, o es común ahí?

No solo esa palabra, los pachamangueros le ponen el acento mal a muchas palabras, así como poner S donde es C y viceversa, yo creo que lo hacen por joder. No obstante uno de mis traumas infantiles era tener que ver dibujos animados con doblaje panchito. Saparmeeeeeeeeemmm saparmmmommmmm sapormmmomm sssssspaaidormonngui

Yo no tuve cónsola de esas que dice, aunque creo que se refiere mas bien a la pc, ojo, la pc. Y no tuvo ningún trauma con eso, no me puedo quejar en el aspecto regalos, tengo mentalidad de pobre y siempre me pareció que cualquier mierda que me regalasen no lo merecía. De ahí mi falta de ambición y por consiguiente de evolución
 
Última edición:
Hombre, eso lo hacían mis tios con mis primas, se ve que era moda ahí por mediados de los 80.
Claro que las niñas no desarrollan envidia/complejo por ver un pene grande.
Pues pero da un poco de juju. Es raro eso de bañarse desnudo con tu hijo. Te deja recuerdos de mierda que no son muy buenos.
El niño pera ahí con su atari. Yo jugaba al pacman en casa de los demás. O en la calle, pero el dinero para jugar lo tenía que conseguir en la calle.

Tu padre y tu tío, menudo tandem ¿de qué murió tu tío?

El atari llenó tu vida de ilusion y esperanza?:lol: Qué culebroneros que sois.

La verdad es que sí un Atari 2600 era la predilección del crío gordo por naturaleza.

Si bueno eran un par de gañanes hijos de puta. El tío murió en extrañas circunstancias lo que supe fue que mi prima le encontró tieso en su habitación, al parecer un infarto o algo similar.

Venga tío era mi escape de esa realidad de mierda. Era tomar el mando y salir volando a destruir barcos y aviones o tanques de guerra con el puto Chopper Comand o defender mi ciudad con el Missile Comand.
WTF?:niños:

¿Pero te hacían pajas, te empalmabas, te corrías?
Que era un crío, mi única satisfacción era la de obtener el dinero que se iba a traducir en chucherías. Y creo que ellas solo sentían la alegría de humillar un hombre, esto último lo tengo ya casi seguro.
 
Última edición:
Por cierto ¿os habeis dado cuenta de que dice “cónsola” en vez de consola una y otra vez? ¿Por qué? ¿Eres tú solo, o es común ahí?
Respecto a esa palabra es un lugar común por estás tierras.

La uve es la ve pequeña. El Vídeo es el video. Y asín
 
Última edición:
Para ver este contenido, necesitaremos su consentimiento para configurar cookies de terceros.
Para obtener información más detallada, consulte nuestra página de cookies.

Chile, hermoso país hoy en día está hasta el culo de venezolanos.

Siempre he querido beber Pizco. Bueno también coger con La Bolocco en su etapa veinteañera pero eso ya es más jodido.
 
Última edición:
Chile, hermoso país hoy en día está hasta el culo de venezolanos.

Siempre he querido beber Pizco. Bueno también coger con La Bolocco en su etapa veinteañera pero eso ya es más jodido.

Estará cantando en chile, pero ni él ni yo somos chilenos. Yo nunca he estado en chile. Es el único pais del continente americano en el que nunca he estado. De hecho debería estar allí ahora, he tenido que cancelar mi vuelo a chile por segunda vez.
 
Estará cantando en chile, pero ni él ni yo somos chilenos. Yo nunca he estado en chile. Es el único pais del continente americano en el que nunca he estado. De hecho debería estar allí ahora, he tenido que cancelar mi vuelo a chile por segunda vez.
Sí me he dejado llevar por la banderita. Pero Facundo es argentino.

Argentina también hasta el culo de venezolanos.

En fin ¿de dónde coño eres?
 
Venga que es vuestro tío.

Para ver este contenido, necesitaremos su consentimiento para configurar cookies de terceros.
Para obtener información más detallada, consulte nuestra página de cookies.


Mi último aporte a este hilo en el hablo de un personaje tan particular que por si mismo resultaba un trauma.
 
Venga que es vuestro tío.

Para ver este contenido, necesitaremos su consentimiento para configurar cookies de terceros.
Para obtener información más detallada, consulte nuestra página de cookies.


Mi último aporte a este hilo en el hablo de un personaje tan particular que por si mismo resultaba un trauma.

¿Qué mierda es esta de grabar audios para el foro? Luego que los putos sudacas tienen fama de vagos e iletrados, me cago en su puta madre.

La puta pila lo que da de sí.
 
Esto es más bien un trauma retroactivo, o algo así:

De pequeño, paseando por el monte con unos primos, nos encontramos un perro ahorcado en un árbol. No se me olvida que era un chusco ratonero marrón, con la boca abierta como en un ladrido, en un pinar. Me quedé mirándolo un buen rato, pero sin conmoción ni trauma, sólo curiosidad. Nos fuimos y lo dejamos ahí sin más.

Si eso me ocurriese hoy en día, después de secarme las lágrimas cortaría la cuerda, enterraría al pobre animal y trataría de averiguar quién fue el hijo de puta.
 
Atrás
Arriba Pie