No lloré ni en le entierro de mi madre voy a llorar en la ducha por algo que sólo está en tu cabeza y que es percepción tuya.
¿Te averguenza llorar?
Joder, eres el pack completo del hombre español de 1975.

Seguro que tampoco te ducharás en el gimnasio por miedo a que algún maricón tenga una erección al verte y tengas que partirle la cara.