Las mujeres españolas son egoístas, avariciosas, vagas, maleducadas, mentirosas, traidoras, incultas, avinagradas, violentas y maltratadoras (entre otros adjetivos calificativos que omito).
De toda la vida se han puesto furiosas cuando ven, como estúpidas que son, que los hombres podemos mantener relaciones sexuales pagando cuando queremos, y con la ramera que queremos. La españolas siempre han querido tener el control al 100% de sus maridos y novios, su dinero, sus bienes y ahora... sus pollas.
Esta ley es lógica en un mundo de diputados y senadores del PSOE-PP-PODEMOS más podridos que el cadáver de un cerdo a la intemperie. Os recuerdo que hace cosa de 10-15 años, el congreso de diputados mongólicos que tenemos, prohibió bajo severas multas que los canales de TV locales emitieran películas porno bajo amenaza de fuertes multas.
Fue el principio de una ola de gilipollismo progre y castrante que traía malos augurios para los amantes del hedonismo.
Fijaos que el el lobby de políticos miserables que tenemos pone anuncios promocionando la homosexualidad, el ecologismo de pandereta y la ingesta de gusanos o hierbajos y quiere prohibir todo lo que tenga que ver con la heterosexualidad.
Es que me río mucho, porque prohibir la prostitución es como prohibir los asesinatos, prohibir la droga o prohibir los tirones de bolsos a las abuelas a la salida de misa.
Una prostituta es una señorita que ama el dinero y por mucha prohibición, seguirá ejerciendo el oficio. Nada va a impedir, porque es de nacimiento que las mujeres sigan siendo egoístas, avariciosas, vagas, mentirosas y traidoras. Nada va a impedir que vengan extranjeras que desconozcan las leyes españolas, nada va a impedir que haya toxicómanas. Nada va a impedir la avaricia que tienen metida en los genes.
La ley seguro que sale adelante, lo único que va a cambiar será el disfraz. Pronto veremos un aumento de señoritas que se anuncian como "masajistas", "fisioterapeutas" a domicilio o señoritas para "cenar" que hablan "francés, inglés y griego".
Por otra parte me río de la tercería locativa. Una pareja que alquile la habitación de un hotel o una señorita que tenga un apartamento para hacer "masajes" está amparada por la ley porque es un domicilio donde no se puede entrar sin una orden judicial.
Estad tranquilos son leyes, pero algunas leyes son para incumplirlas, sobre todo si las hacen gays, corruptos, vividores, secesionistas, batasuneros y demás basura hedionda y perfectamente prescindible.