Los cojones.
A ver si os enteráis ya de que prohíban lo que prohíban, lo que sea, la ciudadanía lo acatará sin rechistar. A lo que se nos haga por ley diremos que sí. Sea lo que sea. Esto de "el día que prohíban tal saldrá la gente a protestar" lo oí cuando empezaron a cobrar por aparcar, cuando prohibieron fumar en los bares (imagina, no poder fumar en un bar, el acabose) o cuando, sin ir más lejos, TE PROHIBIERON SALIR A LA CALLE y no sólo se cumplía sino que la gente vigila que el que se mueva sea convenientemente reportado.
A ver si dejáis ya está mierda de "El día que prohíban tal" porque la única verdad que la experiencia nos enseña es que el día que prohíban tal, prohibido queda y la gente lo acepta y lo asume sea lo que sea.
No, ha sido sin querer. Uy, que hemos redactado una ley prohibiendo la prostitución y con sus castigos y todo y la hemos tramitado y votado sin querer, joder, qué despiste más tonto.
Me parece que no te has enterado de la vaina. ¿No va también la ley de la violencia de género en contra de la mitad de tus propios votantes? ¿No pone en la picota a todos los hombres? Yo diría que sí, y en mayor medida que esta de las putas, que sólo afecta a los puteros. ¿Entonces? Pues es que la estrategia es que como vale lo mismo el voto de los hombres que el de las mujeres y hay mitad y mitad, a poco que nos aseguremos los de las mujeres ya nos suda la polla a quiénes voten los hombres, que habremos ganado, puesto que por defecto muchos nos seguirán votando. Así pues, enfoquemos todo a que nos voten ellas, y ganaremos. Esa es la estrategia de los partidos de la izquierda: captar todo el voto femenino posible. Esta estrategia es completamente a favor de sus votantes objetivo: ellas.