Hijos de la LOGSE, los adornos navideños no son ni mucho menos un invento yankee.
La tradición se remonta a los lejanos tiempos en que en Europa todavía se adoraba a los dioses paganos. Los celtas, en el tiempo que los cristianos denominan "adviento" (del 27 de noviembre al 24 de diciembre), se empleaban en adornar con velas y frutos el árbol en que cada familia creía que moraba el espíritu de la Naturaleza que les protegía. Se mantenian esos adornos hasta la fecha en la que se celebraba el solsticio de invierno, entre los dias 20 y 23 de diciembre.