Si se me pregunta de forma directa sobre la cuestión de autonomías y el centralismo en Portugal, creo que hay que tener en cuenta varios aspectos.
- Como ya se ha dicho, hay movimientos separatistas en todas partes, hasta en Portugal, con lo pequeñajo que es. Pero en el caso lusitano no creo que se deba tanto a razones políticas, sino más bien a aspectos de carácter histórico-cultural, como sucede en España. Las líneas más fuertes de separatismo proceden de zonas en las que pervive (más bien agoniza) una forma dialectal del portugués o de zonas que tienen en su historia periodos de pertenencia a otros reinos. Así, o bien la lengua o bien el territorio sirven de base independentista.
- "Norte y Sur". La verdadera rivalidad o tendencia separatista, auque oculta, existe entre el norte y el sur de Portugal. Lisboa es la capital, sobre todo por aspectos turísticos y culturales, mientras que la riqueza industrial reside en Oporto. Esta tendencia es la que de verdad saca de sus casillas a los portugueses, lo demás no pasa de ñoñerías históricas para ellos. En Portugal es frecuente escuchar la frase "fuera de Lisboa, todo es campo" y da lugar a encontronazos, pues la riqueza industrial del norte ya la quisiera para sí el sur. Esta tendencia hace que las ideas iberistas sean completamente diferentes en el norte y sur de Portugal.
- Miranda, Barrancos y Azores, casos especiales. Echando un vistazo al listado de movimientos separatistas que ha propuesto sven-seven, en seguida me vienen a la mente justificaciones completamente distintas para cada caso. Sí, es cierto que esos movimientos existen, no lo voy a negar, pero eso no quiere decir que dichos movimientos deseen la anexión con España ni mucho menos. Esos movimientos, cada uno con su causa particular, pretenden la separación del estado central portugués mediante constitución de Comunidad Autónoma. Azores, al igual que Madeira, ya lo tiene, y es un caso singular de Portugal. El presidente de las Azores es una especie de Gil y Gil que hace de su gobierno un feudo, y a menudo se pasa por el arco del trinfo las leyes. Ese tipo de separatismo no gusta nada en Portugal.
- La cuestión autonómica y el referendum de 1998. En el año 1998 se llevó a cabo en Portugal un referendum para la constitución de Comunidades Autónomas. Viendo el caso español, y teniendo en cuenta que las ayudas de la Unión Europea sería así mayores, se decidió dejar la decisión en las urnas. El resultado fue de un 63,51% para el NO y un 51,7% para el SÍ. Justito, pero en "No" ganó. ¿Las razones? Pues hubo quien dijo que el detonante de la negativa sería el beneficio económico de la zona de Lisboa frente al empobrecimiento del Norte. A mi parecer el NO ganó por la idea que los portugueses tienen de su propia nación: un bloque caracterizado por algunas diferencias regionales, pero orientado hacia un mismo fin.
- El verdadero separatismo. ¿Y cuál es ese fin? El único y persistente fin del país es su verdadero separatismo: el de la escisión con España. Y no hay más. Portugal es uno para dejar de ser España. Es verdad que hoy día las voces iberistas son mayores, pero no son más que un grito desesperado por salir de la ruina económica.
Resumiendo el tochaco: los movimientos separatistas existentes en Portugal sólo pretenden el reconocimiento de algunas zonas, bien por su territorio, su lengua o sus costumbres. A lo máximo que aspiran estas gentes es a la creación de comunidades autónomas que les concedan algo de autonomía en determinados aspectos que el gobierno central ignora.
P.D. Joder, joder, joder... me había prometido dejar de dar el coñazo.