"En la ida hicimos un gran partido para ganar y hoy hemos hecho el partido que podíamos hacer. Es normal que el Barcelona tuviera más el balón. Yo no quería perder las posiciones en el campo. Yo quería jugar el partido siempre con una línea de cuatro o de cinco atrás. No quería que perdiésemos la posición. Por eso regalamos la pelota al Barcelona. No queríamos la posesión, por eso es normal que el Barcelona tuviera más el balón. Y nosotros, a defender".
"¿Un adjetivo para la noche? Épico está bien. Si tuviera que definir a mis jugadores... pues que dentro de 40 años todavía se hablará de ellos", señaló Mourinho. Respecto a su encontronazo con Valdés, señaló que fue un mal entendido: "El entendió que yo hacia un gesto feo a la grada, pero yo estaba celebrando con los aficionados del Inter. No hay problemas al respecto", agregó.
"Sería estúpido que no quisiera entrenar al Barcelona. Y yo no soy estúpido. Respetaré al Barcelona, pero se ha creado en torno a mí algo que creo que es imposible de transformar en algo positivo. Por eso no creo que acabe como entrenador del Barcelona. Hay odios que no acaban en amor".