A ver, yo en todo caso puedo hacer una composición de teorías existentes (y eso son,
teorías). Haré uso indiscrimando de nombres y autores, para que puedas gozarla en tus noches blancas mirando arriba y abajo en la wikipedia.
Vamos pues.
Hay que partir de unas premisas iniciales, que daremos por válidas, o aquí no se mueve ni el tato.
#1. Los refuerzos
negativos son más intensos que los positivos (
aprendizaje instrumental, Edward Lee Thorndike, el gato en la caja): "una respuesta conduce a la satisfacción o la evitación de la molestia".
Pero de siempre, el ser humano está programado para con preferencia evitar lo lesivo a apostar por la recompensa. Simplemente, porque el coste de un error puede ser la vida, que no deja de ser el bien más valioso.
Por poner un ejemplo apropiado para el foro, el coste de ser rechazado por la joven y hermosa Fulanita de Tal, reina de las fiestas del año pasado de San Rafael, es mayor que la recompensa de acabar dándose el lotazo con ella detrás del puestecito de los churros.
#2. La mente humana
no puede tolerar las incertidumbres (
teoría de la Gestalt, Max Wertheimer, Wolfgang Köhler, Kurt Koffka y Kurt Lewin).
Uno de sus principios,
la ley del cierre, se explica con el siguiente diagrama.
Cualquier mente sana respondería, presentado al dibujo, que ve un círculo y un rectángulo. La mente humana está diseñada para que "el todo sea mayor que las partes". Es por naturaleza - atención, tecnicismo snob al canto -
holística.
De nuevo, por poner un ejemplo práctico, nunca se sufre tanto que ante la duda: ¿Le gusto a Fulanita de Tal, reina de las fiestas del año pasado de San Rafael, o por el contrario me desprecia como a un perro sin amo?
Es ante la imposibilidad de ver de forma natural el total que nuestra mente elabora complicadas teorías para dar una respuesta: "Fulanita de Tal me ha mirado de reojo, le gusto, fijo".
De aquí nacen la mayoría de obsesiones emocionales que conocemos. Claro que en ocasiones, nosotros mismos, voluntariamente, borramos parte del círculo para poder justificar esos desvaríos (como le pasaba al protagonista de Memento, gran peli, por cierto).
#3. Ahora que ya tenemos estas dos herramientas, podríamos sugerir lo siguiente.
Ante un encuentro nuevo, lo primero y esencial es catalogar al individuo de hóstil/no hóstil. Y de forma rápida, aquí no hay segundos premios. Y puesto que no nos vamos a dar por satisfechos hasta que tengamos una visión en conjunto de esta otra persona, cogeremos lo primero que tengamos a mano para extenderlo al total de la misma (cerraremos el círculo).
Y finalmente, ya que por motivos evidentes, el sentido de la vista es aquél que tenemos más desarrollado, nos fijaremos en su apariencia física.
Y a tirar del hilo.
Espero que estés contenta ahora chiquilla, ya tienes chicha para perpetuar tu fama de gafapasta en tu círculo social para los restos.