No voy a deciros que nunca me masturbé. Sería un poco hipócrita. Alguna pajilla (ji, ji) habré echado, pero tampoco es una cosa que me obsesione. Yo quiero ser mayor y estar alrededor de una mesa con mi mujer y mis hijos, y mis nietos. Me gusta la familia unida, grande y completa.
A la chica de mis sueños le daré todo el amor del mundo. Me reservo para ella, que me está esperando en algún lugar del mundo.
No creeré en mi vejez, ante el espejo,
mientras la juventud tu edad comparta;
sólo cuando los surcos te señalen
pensaré que la muerte se aproxima.
Si toda la hermosura que te cubre
es el ropaje de mi corazón,
que vive en ti, com en mí vive el tuyo,
¿cómo puedo ser yo mayor que tú?
Grandes versos del genial Shakespeare