Fracachat de Hallosantos y de todosween.

Estado
Cerrado para nuevas respuestas.
Se ha quedao una noche estupenda pa ver el Don Juan Tenorio comiendo castañas asadas edelwey´s style.
 
Tú, de comer castañas poco.
Screenshot_183.webp
 
El otro día me estaba cambiando en los vestuarios cuando de repente vi aparecer a la mismísima reencarnación de Muhammad Ali, de primeras pensé que me habían pasado una hierba demasiado buena. Su foto tiene cero retoque.

Un muy buen tipo que me lo ha complicado bastante en un sparring al cuerpo con su guardia Philly Shell.

1000067838.webp


1000067839.webp
 
Editado cobardemente:
El otro día me estaba cambiando en los vestuarios cuando de repente vi aparecer a la minimísima reencarnación de Muhammad Ali, de primeras pensé que me habían pasado una hierba demasiado buena. Su foto tiene cero retoque.

Un muy buen tipo que me lo ha complicado bastante en un sparring al cuerpo con su guardia Philly Shell.

Ver el archivos adjunto 202599
Muy bien lo de ponerse guantes pa tocar a un negro...nunca sabes lo que traen en el cuerpo.
 
Yo iré el domingo a visitar a mi abuela, sendos nichos de los bisabuelos, al buenazo de mi Tío Manolo, que cascó este verano con solamente 67 años, y a Paco, el amigo de la cuadrilla que se mató haciendo el cabra con trece años.
Le repasaré los eventos del año, especialmente los videojuegos del nuevo milenio que nunca pudo conocer, y le dejaré un botellín de cerveza, como siempre que voy.
¡VIVA EL PACO, JODER!

¿Soy el único al que se le murió un amigo a esas edades?
 
Una historia, de las pocas reales que he escuchado porque sabes cuando te cuentan si es verdad o puede serlo, o es una engañifa, y esta historia me dejó mal cuerpo.
Un matrimonio bien, una señora valenciana y su marido francés, familia mía ella, iban en su coche nuevecito al pueblo de él cerca de París. A él le gustan mucho los coches y se había comprado ese nuevo, no me acuerdo de la marca, pero estaba feliz. Iba como un niño con zapatos nuevos con su carruaje. Hicieron un viaje largo, 7 horas por lo menos y notaron los dos lo mismo, como si alguien desde los asientos de atrás les empujaran con las piernas y les dieran patadas. Lo notó él, el francés y lo notó ella, la valenciana. Y callaron los dos, ninguno le dijo nada al otro hasta que fue exagerado. Él, que conducía, ya sentía auténticos patadones en la espalda y le dijo a su mujer si estaba bien y ella ya habló y le dijo que notaba como si hubiera alguien en el asiento de atrás empujando. Él palideció. Llegaron a su destino. Se guardaron cada uno su miedo frente al otro todo el camino, para no asustar, hasta el final, tan tiernos los dos... Y
ya allí, en el pueblo ese, cenando, al hablar al respecto, pensaron que algo le pasaba al coche, que no podía ser aquello y lo llevaron a un taller al día siguiente y les dijeron que todo estaba bien.
 
Estado
Cerrado para nuevas respuestas.
Atrás
Arriba Pie