Cuanto cuesta?
Explicar cómo va eso. La cuota es mensual, anual... A que se tiene derecho en la feria por esa cuota??
La titularidad de las casetas privadas pertenece a asociaciones (que ha de estar debidamente inscritas en la Junta de Andalucía) o personas físicas, que figuran como tales en un registro del Ayuntamiento de Sevilla. No es algo que esté abierto a todos, por cuestiones de espacio. Si existen nuevos titulares de casetas es porque hay quien la pierde (por no solicitarla en tiempo y forma, no pagar la tasa, o porque ha sido sancionado con su pérdida), ya que hace tiempo que el recinto de la feria no se amplía. Se entra a ser titular por antigüedad de años solicitándola, y el más antiguo por entrar puede llevar unos 23 o 24 años de solicitud.
Pues bien, para pertenecer a una caseta y ser socio de la misma hay que abonar el precio o las cuotas que la propia caseta establece, de modo que no hay un precio ni una cuota común, depende de cada caseta y de unos estatutos que regulan la admisión de nuevos socios. Normalmente, la entrada de nuevos socios a una caseta se produce cuando alguno de los habituales se da de baja y deja hueco, o porque alguno pierde la condición de socio según dispongan los estatutos, teniendo en cuenta que los derechos de un socio de una caseta pueden heredarse de padres a hijos. Litigios a este respecto en Tribunales no faltan en Sevilla, son habituales.
Generalmente, la entrada de un nuevo socio en una caseta conlleva hacer frente a una cantidad en concepto de ingreso, más otra cantidad anual (como todos los demás socios), que se pueden pagar de una vez o en diversas mensualidades. La cuota de ingreso suele rondar entre 1500 y 3000 euros. Y la cuota anual entre los 400 y los 800 euros. Dinero que se destina a pagar el mantenimiento de lonas, pañoletas y mobiliario, así como el montaje de la estructura, guardas de seguridad, certificados técnicos, seguros, actuaciones y tasas municipales por la concesión administrativa de la caseta.
Y ser socio de una caseta te da acceso a la misma y poder invitar a conocidos, así como participar en la conocida como cena del «pescaíto» con la que arranca la feria la noche del “alumbrao”. Supone tener un espacio, y los socios cuentan con talonarios de tickets con los que hacen frente a lo que piden y que pueden adquirir con un descuento (las hay en que se puede pagar también con dinero), aunque por otro lado te metan el puyazo desde luego. También las hay (las menos>) en que se pagan los tickets al término de la feria, lo que suele ser motivos de conflicto obviamente.
Eso es lo normal, y luego está lo excepcional de ciertas casetas en las que se paga al año entre 9.000 y 12.000 euros, e incluyen todos los gastos de consumiciones de los socios, que no abonan nada en la barra.