Coño, pues que venda uno para pagar las sucesiones y le siguen quedando cuatro. Cuatro pisos para él solito, la vida por delante y viene aquí a inundarnos el hombro con sus lloros.
Mire, si es usted Butifárrez siento lo de su hermano (y si no lo es también). Pero no puede perder más tiempo refocilándose en injusticias ajadas de hace 20 años. Póngase el puto cuchillo entre los dientes, hipermotívese y búsquese tres cosas: un trabajo digno, un par de aficiones que le llenen la vida y una zorrupia aceptable, que con su edad aún es posible. Deje de refocilarse en la negatividad, está a tiempo de ahorrar y formarse en informática o en lo que quiera. No es una historia con final cerrado, se puede cambiar. Llevo más de un cuarto de siglo currando y mi patrimonio no se acerca al que tendrá usted. Mírelo así: se ha ahorrado malos rollos y sinsabores laborales para tener mucho más que la mayoría. Usted no es Verruga: carne de sumision feudal, cutrerío, soledad y derrota.
Le daba una patada en los cojones que le quitaba la tontería en un segundo.