Cannabis rebuznó:
Lo de eyaculación precoz....es un mundo que desconozco. Vamos, es que soy incapaz de correrme en menos de media hora, por no decir una entera. No es vacile, es que soy muy lento con estas cosas. Con muchas quedas como un campeón, la mayoría me ha comentado que hay mucho precoz por ahí y se quedan a medias, pero alguna me ha soltado "tío, acabas ya o qué?", y eso jode que no veas.
En fin.
A mí me pasa igual. Si premiaran el aguante tendría la estantería del salón como Rafa Nadal, pero no siempre es bueno. Más de una vez ha acabado alguna bien jodida por el roce. Y ya con condón es un no acabar.
Es una cosa que me hace bastante gracia. El 99% de las tías suspira por un tío que aguante tela, en conversaciones de café, luego en la vida real les supone más putada que otra cosa.
En cuanto a los gatillazos, una cosa curiosa que me pasaba con una chica.
Hace unos años y a través de unos colegas se nos juntaron unas cuantas, una de las cuales era una teen gótica que cada vez que hablabamos me ponía más y más berraco. Una auténtica salida, sin pelos en la lengua y que sabía cómo calentar a un tío en menos de un minuto.
Con el tiempo y las confianzas, empezamos enrollándonos y ya una noche ciegos perdidos acabamos yaciendo. Empecé con sexo oral y se corrió e inmediatamente me devolvió el favor, me corrí y de su boca nada salió. A dormir.
A partir de ahí, y en secreto tanto para su grupo como el mío, cada vez que nos juntábamos en algún pub estabamos pendientes uno del otro para encontrarnos en el servicio, pajas, dedos y mamadas, y rapidito. La situación era morbosa.
Pero fuimos aprovechando otros momentos y ya acababa en su piso, mucho petting, mucho sexo oral, pero cuando llegaba el momento de ponerme el condón se desinflaba cosa mala. Y ya los nervios, la presión, no querer quedar mal hacía que aquello no se levantara. Ella la levantaba con el arte que tenía en la boca rápidamente, pero era ponerme el condón y nada.
Quedé varias veces así, y nunca podré decir que lo hicimos, es curioso, y una de las tías que más me ha puesto en mi vida. Y nunca sabré por qué. Los condones eran los de siempre y los que sigo llevando en la cartera y sólo con esta tía me ha pasado esto.