Llevo un tiempo pensando en escribir un post como éste, a raíz de tantas y tantas opiniones que veo en el foro sobre las mujeres.
Quiero dejar de antemano dicho que cada mujer es un mundo, y que evidentemente no todas buscamos el mismo perfil de hombre, ni tampoco tenemos los mismos objetivos en la vida. Ni todas tenemos como meta de realización personal el tener una casita llena de hijos. También decir, antes de nada, que no pretendo crear un hilo "hombres contra mujeres", ni que acabe en la misma discusión de siempre. Sólo me gustaría que fuera un hilo para hablar abiertamente sobre el tema, e intentar comprendernos mejor los unos a los otros.
Me gustaría dar mi visión personal sobre las mujeres en general, aunque sé también que generalizar nunca es bueno.
No obstante, pienso que es un tópico casi-universalmente aceptado el decir cosas como que a las mujeres "nos va la marcha" o que siempre acabamos con los cabrones.
Para empezar, no dudo que a ningún ser humano, y por tanto a ninguna mujer, le guste que le maltraten, ya sea física o psicológicamente. Y en eso, quitando casos excepcionales, sí creo que estoy en lo cierto.
Sin embargo, también es cierto que hay muchas mujeres que aguantan "putadas" de sus parejas. Me imagino que visto desde fuera da la impresión de que ellas eligen con quién estar y si esa persona las trata mal es porque ellas quieren.
Quedarse en esa conclusión, me parece poco acertado. Creo que la forma de entender esto es indagar más allá de lo que se ve, y eso es lo que quiero hacer en este hilo.
De primeras, está el tema de la educación. Bien es cierto que cada vez la educación de los niños es más parecida a la de las niñas, pero ciertos roles se mantienen. El ejemplo más claro es el de los cuentos infantiles. Estos cuentos perduran a pesar de que los tiempos han cambiado, y los más exitosos son los clásicos: Blancanieves, La Bella Durmiente, La Bella y la Bestia... Creo que todo empieza ahí, desde la infancia, en el que el rol que se nos muestra como modelo a seguir es el de la chica sacrificada a los demás, buena, bondadosa, y cuya mayor virtud es la belleza. Fijáos que, en los tres ejemplos que he puesto, la protagonista no elige a "su príncipe", sino que es el príncipe el que la elige a ella. El motivo para elegirla? La belleza. Creo que este punto es muy importante, aunque parezca una tontería.
Así pues, desde la infancia nos bombardean con información de este tipo, y consciente o inconscientemente vamos aceptando una "escala de valores" diferente a la de los hombres. Da igual que hayamos avanzado "socialmente", porque nuestro rol como mujer sigue sujeto a la "esclavitud" con respecto al sexo opuesto. Antes, nuestro objetivo era mostrarnos como perfectas madres y amas de casa, ahora la imagen de la mujer exitosa que nos muestra la TV, es la de una mujer culta, con un buen trabajo, pero que sigue siendo esclava de su físico con el único objetivo de seducir al hombre. Creo que esto en realidad, no es más que una "falsa liberalización de la mujer".
Estoy hablando en todo caso de mujeres jóvenes que todavía no han tenido tiempo de forjar su verdadera visión del mundo y cuyas referencias son sus madres, sus amigas, y los medios de comunicación.
Normalmente, cuando una mujer se enamora por primera vez lo da todo. En cierta forma, nos han mostrado el amor como algo idealizado, de ahí que muchas tengan en mente el pensamiento del matrimonio como objetivo primordial.
Cuando una mujer da con el perfil de "tío cabrón", no es porque ésta lo busque. Suele darse la coincidencia de que este perfil de hombre suele ser a su vez una persona que se muestra cara a la sociedad como alguien seguro, amable y exitoso. No hay más que ver por ejemplo, en los casos de violencia de género cuando los vecinos dicen "quién iba a pensar que mataría a su mujer, con lo amable y educado que era...". No pretendo generalizar, porque también es cierto que hay muchos hombres buenos y con esas cualidades, pero creo que lo que he dicho antes se da mucho. Digamos que, en un primer contacto, la personalidad del tío cabrón suele resultar mucho más atractiva.
Otra forma de que una mujer de con un tío cabrón suele ser cuando el tío se muestra como una persona desprotegida e incomprendida. Normalmente, suelen ser personas con problemas, que engañan fácilmente a sus "víctimas", aprovechándose del instinto maternal de éstas, que se auto-convencen de que estos "elementos" las necesitan y de que pueden rescatarles de las más profundas de las miserias.
Sea como sea, cuando la mujer se topa con el "individuo cabrón" y se enamora, es como si se tratara de un pez que cae en la trampa del cebo. El nivel de "cabronazo" no se ve a primera vista, sino que se va incrementando con el tiempo. Digamos que, cuando una persona está enamorada, casi siempre ve las cosas de un distinto color, y por lo general perdona cosas que en un estado "normal" no perdonaría. Normalmente, después de cada cabronada el tío cabrón llega totalmente arrepentido confesándole su amor eterno y vendiéndole de nuevo el cuento de hadas. Por lo general, si la tía es poco experimentada, se lo cree, perdona al igual que perdonaríamos a cualquier ser amado, hasta la siguiente cabronada.
No obstante, con cada cabronada el autoestima de la "víctima" se debilita poco a poco, se pierde la referencia de lo que es "normal" y a veces se siente tan mal conmigo misma, que su vergüenza le impide confesarlo a sus amistades o familia.
Creo que es aquí cuando hay un punto de "no retorno" y me explico: pueden darse dos cosas cuando el tío sigue puteando a la chica y no cambia, que la mujer "estalle" y que mande al individuo a tomar por culo o cambiar los roles de la relación, o bien que decida seguir como hasta ahora. En este último caso, se expone a sufrir maltrato por parte de su pareja. No digo que el "tío cabrón" sea el equivalente de maltratador, pero creo que es un maltratador en potencia.
He pensado mucho sobre la violencia de género, y creo que un factor determinante es la edad que tenga la tía cuando llega al "punto de no retorno" y de su madurez para determinar en qué sentido va a seguir su vida a partir de ese punto. También es muy importante el nivel de autoestima de la persona, pues si es una persona con poca autoestima, o que ha recibido poco cariño, aceptará como si fuera un regalo el falso amor que le profesa su pareja, y aguantará todas las putadas que ésta le quiera hacer. También la sociedad juega un papel importante, porque adiestra a la mujer a aguantar, ya sea de una forma u otra.
Una vez se llega al matrato (físico o psicológico) poco se puede hacer, porque el autoestima de la mujer está absolutamente destruida, y el miedo la impide abandonar a su pareja.
Bueno, dejo abierto el tema a opiniones, pero me gustaría que fuera un debate constructivo y no que se cayese en el insulto, como tantas otras veces.
PD: Perdonad por el tocho, y gracias por leerlo
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