Como se te ocurra quedar con ella y presentarte con un algo envuelto en papel de regalo, merecerás morir lenta y dolorosamente.
Lo más factible es que ella no te haya comprado nada. Y ya has hecho el ridíaculo de inicio, pero luego querrá ir al cine, a cenar, a ver no se qué exposición o que la acompañes a comprar lo último de ECDL, y cuándo te quieras dar cuenta pasarás los sábados por la noche sentado en la mesa de un bar al que jamás irías, rodeado de SUS amigas y sus lobotomizados novios correspondientes.
Disfruta mientras dure la fiesta de follar sin dar nada a cambio.