En el pueblo de mi viejo una vez hicieron reina de las fiestas a la hija del de la farmacia. Fea como un ñu del revés. No es que hubiera mucho para elegir, pero está tenía perras y en los pueblos no se da puntada sin hilo.
Como la gente de los pueblos se aburre mucho y tiene malas ideas a la infeliz a la que aparecía le decían guapa!, Hermosa!, Lozana. Era tanta la efusividad que se pispó (o alguien le fue con el cuento) y no quiso agotar el mandato. A matar el toro ya no fue a presidir, oficialmente por andar indispuesta. Se ahorró una escabechina gorda, hubiese matado aquel carnicero a la res a espadazos antes que a estocazos.
Aquí es gente que ha pagado por escuchar algo tan irritante como la voz de Dani Martín, así que nos deja la duda, pero supongo que más de uno lo hace con propósitos insinceros.
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