Ayer noche, en una calle de cuyo nombre no quiero acordarme, había un grupo de tres tios con dos tias (todos iban juntos) de estos rollo alternativos-modernillos que cuando se han tomado un par de copas confunden muchas cosas y suelen equivocarse haciendo comentarios al primero que pasa por su lado sin conocerlo, con risitas "jujujaja", porque no entienden que el morado que llevan deben disfrutarlo entre ellos y que los demás ni son sus amigos ni comparten ese mismo momento de euforia.
Entonces a su lado pasa en moto un tio de perfil macho alfa con una tia, su novia, de paquete. En ese momento una de las tias del grupo de los alternativos les hace un comentario en plan incordio, así, sin conocerlos de una mierda, en el plan que os decía, para ipso facto mirarse cómplicemente con jajaja dedicado a los amigos.
Sin bajarse de la moto el tipo les llama la atención sin ser agresivo físicamente pero sí de manera seria, firme, y rotunda sin ser maleducado. Toda esta conversación prácticamente a menos de medio metro de los cinco titiriteros estos.
Al tipo se le veía en plan chulillo, aparte de estar físicamente fuerte, bastante más en forma que los tres tipos que iban con las otras dos zorras, que eran físicamente unos mierdas.
Total, que en un momento dado uno de los tios alternativos suelta un "que te den por culo".
Ahí es cuando el de la moto sacó a la bestia que llevaba dentro. Apagó el motor y se bajó de la moto raudo y veloz. En ese momento en el ambiente y entre los espectadores ya palpábamos como el cagómetro de esos tres tipos indicaba que sus anos iban a expulsar caca a la de ya.
Gritos, empujones, "te voy a reventar", todo dirigido al tipo que lo mandó a tomar por culo. Total, que la reacción de los mindundis estos fue, giñados del miedo, casi arrodillarse ante él: "pero ¿por qué si no hemos hecho nada", "oye que no, que no pasa nada", y blao blao blao, pero que muy triste su reacción porque eran tres contra uno y estaban temblando de terror, porque el tio era un animal de estos que ya ves que tiene que repartir ostias como panes.
A todo esto, por cierto, la novia del macho alfa este callada, con una cara de estar mojando sus bragas que te cagas.
Total, que la tia del grupo de los mongólicos esos, la que desencadenó todo el conflicto al principio de toda la historia riéndose del motero-Rambo sin que nadie se lo mandara, se pone vacilona, pero como dos veces más vacilona que aquel al que quería reventar, y entonces el motero es cuando suelta una PAGAFANTADA monumental y le dice:
- Tú estás muy chulita, claro. Él, que me lo diga él. Que lo reviento, que es que me bajo y lo reviento. A ti no. A ti no.
Bueno, pues al final el tipo y su novia se suben a la moto y se piran quedándose así la cosa, y cuando ya se han ido la tipa esta a la que no le metió de ostias por ser mujer empezaba a sacar pecho, a presumir.
Se sentía fuerte. Se sentía reforzada. Se sentía poderosa. Se sentía legítimada para cualquier cosa. Se sentía invulnerable. SE SENTÍA VENCEDORA. Creédme que se sentía así. Su cara, su expresión, sus gestos y sus palabras lo decían, ella mismo por boca lo dejaba claro, bien orgullosa.
Ascazo sentí.
Por el motero pagafantas primero, porque es que hace daño pagafantear tanto. No creo que sea positivo hacerle creer a todas las tias que pueden hacer lo que les salga del coño. Es una mentalidad que tarde o temprano nos pasará factura en esta sociedad. Al tiempo.