Slk
Extremadamente Imbécil
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Va, ahora que Sekhmet lo dijo, y la verdad es que es raro en mi no haberlo compartido, es como...
Vamos allá.
El 20 de diciembre de 2014. Me acordaré siempre que era ese día.
Básicamente, para los que no sois catalanes, el acento de Girona viene a ser pues como el acento canario o venezolano, en el sentido de que el catalán barcelonés suena como neutro, rancio y sin forma, y lo otro suena con matices, con dulzura y esas cosas que hacen que me ponga cachondo ese acento.
Básicamente eso pesó bastante a la hora de que, a las puertas de una conocida discoteca muy punk de Barcelona, conociera a esta chica que tenía ese acento.
Yo estaba solo, y a ella la estaba dejando sola su amiga, más delgada que ella. Había conocido a un tío, y le dijo que adiós, que allí se quedaba tirada a las cinco de la noche porque ella se iba a follar con un tío.
Entonces yo me acerqué al ver que la había dejado sola, y bueno, el resto ya es Historia.
Su acento me ponía. Ella era gordeta pero no en plan asqueroso. Y majeta de cara. Pero es más ese acento que no sé, me pone, y bueno, la acompañe a su casa, nos fuimos andando hasta el Hospital Clinic. Subí a su casa, bueno, lo obvio. Toda la noche. Se que la goma se rompió y que algo le cayó y ni idea si ella esto lo vio. Ella estaba toda la noche mosca porque vivía con dos primos suyos y no quería delatarse.
Después de follar MUCHO y darle MUCHO, dormimos un poco.
Al despertarme, ella no actuó como la niña dulce y tontona que se le presuponía. Me dijo amablemente que me pirara, y recuerdo que fue abrir ella la puerta y decirme "el ascensor está a la izquierda, te acuerdas, no?".
No vaciló en nada. Ni en preguntarse cuando volver a verme, ni fingir pedirme el teléfono sin ganas ni interés de tenerlo... así, el final fue así.
Al cabo de más o menos un año, la vi, que es la primera y última vez que la vi en mi vida. Iba con un bebé pues que realmente por las pocas semanas cuadraba. Cuadraban total las fechas. Yo me piré rápido. Desapareci. Ella no me vio. Yo me puso rojo y esta reacción que te da el cuerpo de tierra trágame cuando una sorpresa que te compromete te está asaltando.
Y nada. Recuerdo que ya en ese día ni siquiera recuerdo el piso ni la calle donde ocurrió todo, el polvo en su casa y tal. Creo que era la calle Rosellon, pero no lo recuerdo.
Entonces, cual es mi sensación? Pues muy extraña. Porque no tengo ninguna certeza de que sí. Pero sí existe la certeza de que es bastante posible que si. Intento no pensar, pero muy de vez en cuando me viene todo eso a la cabeza, y mis defensas corporales contestan más o menos algo así como que no, que eso son tus ollas, que aquí no hay prueba de nada, que tú no tienes hijos y, bueno, es un poco ese tema.
Nunca se lo he dicho a nadie esto. Ni a mí familia ni a nadie de mi entorno.
Vamos allá.
El 20 de diciembre de 2014. Me acordaré siempre que era ese día.
Básicamente, para los que no sois catalanes, el acento de Girona viene a ser pues como el acento canario o venezolano, en el sentido de que el catalán barcelonés suena como neutro, rancio y sin forma, y lo otro suena con matices, con dulzura y esas cosas que hacen que me ponga cachondo ese acento.
Básicamente eso pesó bastante a la hora de que, a las puertas de una conocida discoteca muy punk de Barcelona, conociera a esta chica que tenía ese acento.
Yo estaba solo, y a ella la estaba dejando sola su amiga, más delgada que ella. Había conocido a un tío, y le dijo que adiós, que allí se quedaba tirada a las cinco de la noche porque ella se iba a follar con un tío.
Entonces yo me acerqué al ver que la había dejado sola, y bueno, el resto ya es Historia.
Su acento me ponía. Ella era gordeta pero no en plan asqueroso. Y majeta de cara. Pero es más ese acento que no sé, me pone, y bueno, la acompañe a su casa, nos fuimos andando hasta el Hospital Clinic. Subí a su casa, bueno, lo obvio. Toda la noche. Se que la goma se rompió y que algo le cayó y ni idea si ella esto lo vio. Ella estaba toda la noche mosca porque vivía con dos primos suyos y no quería delatarse.
Después de follar MUCHO y darle MUCHO, dormimos un poco.
Al despertarme, ella no actuó como la niña dulce y tontona que se le presuponía. Me dijo amablemente que me pirara, y recuerdo que fue abrir ella la puerta y decirme "el ascensor está a la izquierda, te acuerdas, no?".
No vaciló en nada. Ni en preguntarse cuando volver a verme, ni fingir pedirme el teléfono sin ganas ni interés de tenerlo... así, el final fue así.
Al cabo de más o menos un año, la vi, que es la primera y última vez que la vi en mi vida. Iba con un bebé pues que realmente por las pocas semanas cuadraba. Cuadraban total las fechas. Yo me piré rápido. Desapareci. Ella no me vio. Yo me puso rojo y esta reacción que te da el cuerpo de tierra trágame cuando una sorpresa que te compromete te está asaltando.
Y nada. Recuerdo que ya en ese día ni siquiera recuerdo el piso ni la calle donde ocurrió todo, el polvo en su casa y tal. Creo que era la calle Rosellon, pero no lo recuerdo.
Entonces, cual es mi sensación? Pues muy extraña. Porque no tengo ninguna certeza de que sí. Pero sí existe la certeza de que es bastante posible que si. Intento no pensar, pero muy de vez en cuando me viene todo eso a la cabeza, y mis defensas corporales contestan más o menos algo así como que no, que eso son tus ollas, que aquí no hay prueba de nada, que tú no tienes hijos y, bueno, es un poco ese tema.
Nunca se lo he dicho a nadie esto. Ni a mí familia ni a nadie de mi entorno.
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