Vida, muerte y anti-lol

Esto se cura leyendo cinco minutos el Mancuernas.

Así de sencillo es todo.
 
Todo el mundo teme a la muerte, pero casi nadie le teme al sueño.

Y sin embargo... ¿a dónde voy mientras mi cuerpo duerme? No soy, no existo, no soy consciente, ni del instante mismo en el que mis sentidos se apagan y se enciende el mundo arcano y espeluznante de lo desconocido. No soy consciente de estar viviendo otra vida, de que mis días y mis noches son como los raíles de un ferrocarril, corriendo en paralelo al infinito sin cruzarse nunca. No soy consciente de que quizá, sólo quizá, jamás despierte y me quede para siempre como aquel Buendía, atrapado en un laberinto de espejos viviendo en un reflejo equivocado. ¿Por qué no tememos al sueño y tememos tanto a la muerte? ¿No despertaremos algún día? ¿Qué es eternidad si no hay consciencia? ¿Acaso no nos parece el tiempo entre los sueños un suspiro? ¿No es asi la eternidad, un sueño interminable? Puede que vivamos una existencia diferente, sin saber que soñamos, sin saber que en otro tiempo, en otro mundo, en otra vida, nuestros días son las noches de un yo desconocido. Como incansables hormigas en una cinta de Moebius, caminamos y caminamos y caminamos y no nos encontramos nunca.

Porque respóndanme una pregunta. ¿Quién es más feliz, el mendigo que sueña cada noche con que es rey, o el rey que sueña cada noche que es mendigo?
 
Ruizma rebuznó:
...Es decir, se debe alargar todo proceso que no te importe dejar a medias para retomar con gusto en otro momento y que carezca de conclusión o se busque su dilación.

Normalmente retengo la cagada contra natura un buen rato antes de darle escape libre. Me resulta placentero e incluso ha habido veces que el agrado ha sido mayor que el de muchas pajas. ¿Hago bien o estoy en pecado?

ignaciofdez rebuznó:
...Tiempo atrás fue mi deseo dejar de hablar gñé....

¿Quieres ser mi amigo?

ruben_clv rebuznó:
Esto se cura leyendo cinco minutos el Mancuernas.
Así de sencillo es todo.

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a partir del 2 : 00 para los impacientes. Por cierto, piniculón de esos que te deja con una buena sonrisa en los créditos del final.
 
Me gustaría mucho saber si el forero Víctor I lee a los clásicos. ¿Es un hombre del renacimiento?
 
Died & Risen rebuznó:
Normalmente retengo la cagada contra natura un buen rato antes de darle escape libre. Me resulta placentero e incluso ha habido veces que el agrado ha sido mayor que el de muchas pajas. ¿Hago bien o estoy en pecado?



Hace usted muy bien. Únicamente le sugiero que pruebe con un dildo, podrá dilatar mucho más la experiencia.
 
Trisómico rebuznó:
Me gustaría mucho saber si el forero Víctor I lee a los clásicos. ¿Es un hombre del renacimiento?


El forero Victor I lee a los clásicos menos de los que debería, con demasiada ligereza y con varía década de retraso. Este mismo forero hace suya por temporadas aquella frase de Montesquieu según la cual hasta no haber leído a todos los autores clásicos no había razón para dedicarse a los modernos. También firmaría aquella otra que afirmaba que no importa lo que escribas o pienses, porque algún romano o algún griego ya lo habrá pensado antes que tu hace 2.000 años. Pero sobre todo, en medio de estos azogues y angustias, el forero Victor I recurre al siempre reconfortante abrigo de los clásicos y se consuela con el famoso mantra de Epicuro, tras el que todos nos parapetamos cuando una perspectiva poco alentadora y cada vez mas precisa va tomando cuerpo...

"Así pues, el más estremecedor de los males, la muerte, no es nada para nosotros, ya que mientras nosotros somos, la muerte no está presente y cuando la muerte está presente, entonces nosotros no somos. No existe, pues, ni para los vivos ni para los muertos, pues para aquéllos todavía no es, y éstos ya no son."


 
Sekhmet rebuznó:
Hay que reconciliarse con la muerte.

Hay que reconciliarse con la vida. Nos preguntamos tantas veces cosas como "oh, que habrá al otro lado", "qué significado tendrá toda esta miseria y polvo tras la muerte y la consciencia" que nos olvidamos qué sentido tiene para nosotros. Cúal es el sentido de tu vida o de mi vida. Cúal es el sentido de alguien en particular.

Sin embargo la formulación "¿cúal es el sentido de la vida?" así en abstracto, es una pregunta capciosa e impropia pues nos obliga a dar una respuesta falsa. El sentido de la vida es la vida misma. Además es que es gracioso porque ya la pregunta de marras parece indicar que existe un ente más allá de nosotros, un agente sobrenatural desde luego o algo así, que es el que tiene que determinar ese próposito y nosotros deberíamos gastar nuestra vida en tratar de descubrir ese sentido oculto, tipo peli de terror. Creo que hallar la felicidad en la propia vida es una respuesta satisfactoria a dicha pregunta.
 
Victor I citando a Epicuro rebuznó:
"Así pues, el más estremecedor de los males, la muerte, no es nada para nosotros, ya que mientras nosotros somos, la muerte no está presente y cuando la muerte está presente, entonces nosotros no somos. No existe, pues, ni para los vivos ni para los muertos, pues para aquéllos todavía no es, y éstos ya no son."




Si duda la postura más racional, práctica y realista ante la muerte. A partir de ahí, cualquier planteamiento que podamos elucubrar son pajas mentales.
 
Britpop rebuznó:
Si duda la postura más racional, práctica y realista ante la muerte. A partir de ahí, cualquier planteamiento que podamos elucubrar son pajas mentales.

sigo replanteando la cuestion de que ocurre en el cerebro cuando mueres, como es esa nada inconcedible

y le dedico este tema a ese gran señor que una vez en aras de la ciencia se introdujo un cable de alta tension por el recto del culo humano

https://www.youtube.com/watch?v=eUDcTLaWJuo
 
general bastardo rebuznó:
como es esa nada inconcedible

La cosa es bien sencilla, cuando te mueres pueden pasar dos cosas:
1- Que tu mente, espíritu o lo que cojones sea, habite en algún lugar. El dónde es otro tema.
2- Que tu mente, espíritu o lo que cojones sea, muera junto con el cuerpo.

Me centraré en la segunda.

Tendría yo unos doce años cuando me encontraba junto a mi padre y dos amigos limpiando la piscina de la residencia de verano de mi familia. Haciendo el moñas me resbalé y me di un fuerte golpe en la cabeza perdiendo completamente el sentido. Me desperté con gente alrededor que aún me secaba el pelo húmedo y echando pestes para que me dejaran en paz. Tenía sueño, muchísimo sueño, me hubiera dormido en el puto palo de un puto gallinero, pero no me dejaban dormir. Fui al médico y no tenía nada. Estuve vomitando lo que tragaba durante varios días. Eso es en resumidas cuentas la anécdota, un puto golpe y nada más.

Lo que me marcó de aquello es que aquellos minutos en los que perdí el sentido yo no era NADA, no era NADIE, NO EXISTÍA. No es como cuando te despiertas por la mañana y has soñado o aunque no te acuerdes sabes que has estado durmiendo, no. Ese espacio de tiempo fue para mi como estar muerto, como cuando te ponen anestesia general para una intervención quirúrgica. Pero te das cuenta de la inmensidad de la nada cuando vuelves a la vida, si no despiertas ahí te quedas y ni te enteras. Si no, ¿Dónde estábamos antes de nacer? En esa nada que describo.


¿Habéis entendido algo?
 
Victor I rebuznó:
El forero Victor I lee a los clásicos menos de los que debería, con demasiada ligereza y con varía década de retraso. Este mismo forero hace suya por temporadas aquella frase de Montesquieu según la cual hasta no haber leído a todos los autores clásicos no había razón para dedicarse a los modernos.

Claro que hay que volver a los clásicos. Sobre todo a un estoico, Marco Aurelio. Emperador, general y sabio, no puede sino sorprendernos su clarividencia. De sus Meditaciones (Libro 2, 12)

"¡Cómo en un instante desaparece todo: en el mundo, los cuerpos mismos, y en el tiempo, su memoria! ¡Cómo es todo lo sensible, y especialmente lo que nos seduce por placer o nos asusta por dolor o lo que nos hace gritar por orgullo; cómo todo es vil, despreciable, sucio, fácilmente destructible y cadáver! ¡Eso debe considerar la facultad de la inteligencia! ¿Qué son esos, cuyas opiniones y palabras procuran buena fama ¿Qué es la muerte? Porque si se la mira a ella exclusivamente y se abstraen, por división de su concepto, los fantasmas que la recubren, ya no sugerirá otra cosa sino que es obra de la naturaleza. Y si alguien teme la acción de la naturaleza, es un chiquillo. Pero no sólo es la muerte acción de la naturaleza, sino también acción útil a la naturaleza. Cómo el hombre entra en contacto con Dios y por qué parte de sí mismo, y, en suma, cómo está dispuesta esa pequeña parte del hombre."
 
CardenaldelaPolla rebuznó:
¿Habéis entendido algo?

Yo todo.

Tienes razón. Es una analogía perfecta de qué es la muerte, sin embargo no es conocer la naturaleza de esta lo que nos inquieta. Lo mismo nos daría que fuera eso o el paraíso prometido en según qué libros. Lo que nos inquieta es pensar en no estar aquí más cuando estamos aquí.
 
No pasa nada de nada, te mueres y punto. Ninguna parte de tu ser trasciende a ninguna parte. Porque no existe tal cosa en tu mente que pueda permanecer tras la muerte de tu cuerpo. Si hubiera algo más o ese salto a la muerte generara una supernova mental que te trasladara al infinitor o algo, ya nos habríamos dao cuenta o habría indicios.

Si tengo alma y ese alma es mía y tiene una existencia trascendental, no podría dejar de tener la capacidad de ser consciente de mi propia alma durante el tiempo que estoy en un cuerpo vivo para volver a ponerse en marcha cuando muero. Sería consciente de esa realidat independientemente de mi corporeidad o no.
 
Cuando vi que Ultimatum dejaba el foro me estremeci. Me parecio ver una muerte anunciada. Segui el devenir de las cosas, esa luz que se fue apagando. Ya nadie se acuerda de el, ni nadie lo hara de mi aunque dedicara las proximas 3 decadas al foro. Solo importa el presente porque en algun momeno aquello que es presente hoy sera pasado y nadie ni nada lo recordaran en el futuro.

Alejandro Magno pidio cuando se moria que lo enterrar con las palmas abiertas sus ultimas reflexiones de este conquistador y cientifico es que tras haber dirigido un imperio se iba de este mundo con las manos vacias. Todo lo que hacemos no sirve para nada. Todo toca a su fin.
Peso a este sin sentido la vida tiene cosas por las que luchar asi que lo mejor que podemos hacer es vivirla lo mejor que sepamos o podamos.

Saca al tarado muy bonito tu gesto hacia a tu amigo. Seguro que si pudiera leerte estaria orgulloso de ti.
 
la gente a la que se le va la pinza, los alzheimer y todos esos, ¿dónde se va su yo sano?, es una puta falacia que nos creamos para ir tirando, el yo, el alma, es todo una elaboración del celebro, una vez que el celebro deja de funcionar correctamente la función del pensamiento se va a la mierda y con ella la construcción artificial de nuestra identidad.

Eso es asi. Somos lo que el celebro dice que seamos. Igual que el estado de tu aparato digestivo determina la salud de tus deposiciones, la salud de tu celebro determina la salud de tu pensamiento.
 
ruben_clv rebuznó:
Esto se cura leyendo cinco minutos el Mancuernas.

Así de sencillo es todo.

La fuerza es templanza y sensibilidad. Es entender que tu potencia es tanto física como emocional. Que proviene del cuerpo pero sobre todo (en realidad había puesto sobre todo junto porque soy un subnormal) de la mente, y del alma.

Creo que fue Yukio Mishima quien dijo una vez que no podía entender la idea de pasión, si esta no era fuerte. La pasión es un sentimiento extremadamente intenso y saturador, y un cuerpo débil no puede sostenerla durante demasiado tiempo. Sabes cómo es la vida actualmente, es un milagro si no estás alienado por una existencia que corre distinta a nivel físico que en el plano espiritual. La gente vive con la conciencia separada de sus cuerpos, ya no son una unidad. Puedes verlos de lunes a viernes echando cabezadas en el transporte público y saliendo a quemar las naves en el poco tiempo libre que tienen disponible en el fin de semana. Los ves irritables, estresados, pierden sueño, comen mal, y se comportan alimentando el fuego perpetuo de su infelicidad. Sus egos les juegan malas pasadas, y sólo les motivan cosas que eventualmente pueden llevarlos de cabeza a un infarto prematuro. No tienen la perspectiva de la fuerza.

En cambio cuando el cuerpo es fuerte, la mente desprende pensamientos fuertes. Una mente que no es fuerte es una mente degenerada y que se regodea en su propia autocompasión. La fuerza es el mejor antidepresivo que hay, y una vez el cuerpo y la mente han logrado su máximo potencial es imposible volver atrás. Tengo la suficiente perspectiva filosófica como para intuir que nuestra existencia no tiene ningún sentido desde el punto de vista biológico, somos un cúmulo de casualidades azarosas y de entre todos los posibles candidatos el espermatozoide premiado finalmente llevaba la semilla de un forero. Pero squatting >200 kg no es ninguna casualidad, es realidad construída desde los mismos cimientos, es una verdad tangible. Es referencia axiomática.
 
Britpop rebuznó:
Si duda la postura más racional, práctica y realista ante la muerte. A partir de ahí, cualquier planteamiento que podamos elucubrar son pajas mentales.

Es racional pero es inquietante a la vez, porque el gran filósofo griego lo resuelve con un terrible y sentencioso: ya NO SOMOS. Y ahí esta el problema, en no ser, en domesticar ese instinto, ese Élan vital. Todo lo que existe quiere perdurar.

romerinigolfus rebuznó:
Claro que hay que volver a los clásicos. Sobre todo a un estoico, Marco Aurelio. Emperador, general y sabio, no puede sino sorprendernos su clarividencia. De sus Meditaciones (Libro 2, 12)

"¡Cómo en un instante desaparece todo: en el mundo, los cuerpos mismos, y en el tiempo, su memoria! ¡Cómo es todo lo sensible, y especialmente lo que nos seduce por placer o nos asusta por dolor o lo que nos hace gritar por orgullo; cómo todo es vil, despreciable, sucio, fácilmente destructible y cadáver! ¡Eso debe considerar la facultad de la inteligencia! ¿Qué son esos, cuyas opiniones y palabras procuran buena fama ¿Qué es la muerte? Porque si se la mira a ella exclusivamente y se abstraen, por división de su concepto, los fantasmas que la recubren, ya no sugerirá otra cosa sino que es obra de la naturaleza. Y si alguien teme la acción de la naturaleza, es un chiquillo. Pero no sólo es la muerte acción de la naturaleza, sino también acción útil a la naturaleza. Cómo el hombre entra en contacto con Dios y por qué parte de sí mismo, y, en suma, cómo está dispuesta esa pequeña parte del hombre."

¡Que gran dinastía la Antonina, como se nota su acervo hispano! Sin duda una referencia, un toque de atención para los mortales de a pie el leer a uno de los emperadores más poderosos de la Historia despreciando y poniendo en su justa medida las riquezas, acentuando sus irrelevancia, ponderando el valor real de un imperio que no le serviría de nada al fenecer . Sus constantes referencias a la muerte, nuestro papel colectivo son oro puro para los hombres de "carne mortal y rosa"

ilovegintonic rebuznó:
Yo todo.

Tienes razón. Es una analogía perfecta de qué es la muerte, sin embargo no es conocer la naturaleza de esta lo que nos inquieta. Lo mismo nos daría que fuera eso o el paraíso prometido en según qué libros. Lo que nos inquieta es pensar en no estar aquí más cuando estamos aquí.

Esta es la clave. El problema no es la muerte, el problema es morirnos...y saberlo, y no poderlo evitar.

sandokan begins rebuznó:
la gente a la que se le va la pinza, los alzheimer y todos esos, ¿dónde se va su yo sano?, es una puta falacia que nos creamos para ir tirando, el yo, el alma, es todo una elaboración del celebro, una vez que el celebro deja de funcionar correctamente la función del pensamiento se va a la mierda y con ella la construcción artificial de nuestra identidad.

Eso es asi. Somos lo que el celebro dice que seamos. Igual que el estado de tu aparato digestivo determina la salud de tus deposiciones, la salud de tu celebro determina la salud de tu pensamiento.

El alzheimer...eso es magia. El hijo, el esposo, el enfermo que se encarga del paciente conoce el infierno en vida. Tu padre, tu abuelo o tu tía ya no existen, sólo el cuerpo poseído por un espíritu cruel y estúpido. El enfermo,en cambio, se muere blandamente, de forma pediátrica, infantil, como un recién nacido que regresa al primigenio esperma que le engendró. La conciencia se desvanece lentamente, las angustias se apaciguan, la razón aminora sus inquietudes. Te mueres sin saber que te vas morir, te vuelves puro instinto, regresas a un estado de despreocupada inconsciencia. Una pastilla para tener un alzheimer de un día sería el suicidio perfecto. Por la mañana eres quien crees que eres y por la noche te has convertido en un lactante sesteando para toda la Eternidad.
 
El alma, el karma, la luz interior, como se quiera llamar, todo es producto del cerebro; que es un conjunto de neuronas, que es a su vez un conjunto de moléculas, las cuales son un cúmulo enorme de átomos, todos ellos unidos de una sóla manera de entre un número de 10 elevado a mucho, de maneras de unirse.
Mucha aleatoriedad:
"El tiempo es sólo una ilusión" (Iñaqui Fernández)
" El orden del universo precisa de un Ordenador " (S. Tomás de Aquino; una de sus 5 razones por las que existe Diox )

Dudas.
Me admira que tengan ustedes esa seguridad total, la certeza absoluta de la no-transcendencia.
Al igual que me admira la total seguridad de los comulgan en domingo y esperan casi ansiosos su merecida recompensa tras la muerte.

DE momento siguo limpiando mi karma en su totalidad: el físico y el espiritual.
Y doy fe de ello, con el entreno cuasi iniciático de la maraton: Un estado físico bueno aumenta la luz interior, o cómo queramos llamarlo.
 
Black Adder rebuznó:
una vez el cuerpo y la mente han logrado su máximo potencial es imposible volver atrás

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saca-al-tarado rebuznó:
Será el otoño, pero ayer tarde acudo a un cementerio a rendir homenaje a un viejo amigo y hoy topo con este hilo.

No era el aniversario de su muerte, no se trataba tampoco de plegarse a los rituales de difuntos pero la melancolía otoñal, el recuerdo y una tarde libre de trabajo y otras ocupaciones hicieron que decidiese emplear un par de horas de coche para visitar una tumba ubicada en un pueblo perdido en el que apenas quedan ya vecinos, pero era su lugar de origen y donde reposa el resto de los suyos.

Él era mejor que yo en todos o al menos en la mayoría de aspectos. A pesar de mi aversión o cuanto menos de mi escepticismo hacia compromisos y familia él tuvo el cuajo de fundar una y de - creo- mantener un decentemente sólido entramado de entrega a su esposa y dos hijos y fue inevitable que lo admirase por ello.

La muerte, la gran democratizadora y al tiempo caprichosa sin medida, se llevó a esta persona antes de lo que marcaban estadística y sobre todo oportunidad, privó sin quererlo a sus hijos de una referencia necesaria a una edad demasiado temprana y dejó un vacío difícil de llenar para quienes fuimos sus amigos.

Ahora que venga por aquí algún botarate diciendo que la amistad está sobrevalorada o haciendo gracietas acerca de mariconeos o sobre herencias yacentes porque me gustaría romperle la boca. Asumir lo inevitable de mi muerte es algo que ocurrió hace mucho tiempo y no me molesta ni preocupa en absoluto; sin embargo me jode y me rebela que vaya haciendo criba entre quienes probablemente merezcan y deseen vivir con más fundamento y energía que yo, eso es lo que sencillamente no puedo soportar de su noción.

Fantástico.

No hay que tener miedo a la muerte, por que el verdadero sufrimiento viene con la ausencia. Quizás algunos lo entiendan.
 
Victor I rebuznó:
El alzheimer...eso es magia. El hijo, el esposo, el enfermo que se encarga del paciente conoce el infierno en vida. Tu padre, tu abuelo o tu tía ya no existen, sólo el cuerpo poseído por un espíritu cruel y estúpido. El enfermo,en cambio, se muere blandamente, de forma pediátrica, infantil, como un recién nacido que regresa al primigenio esperma que le engendró. La conciencia se desvanece lentamente, las angustias se apaciguan, la razón aminora sus inquietudes. Te mueres sin saber que te vas morir, te vuelves puro instinto, regresas a un estado de despreocupada inconsciencia. Una pastilla para tener un alzheimer de un día sería el suicidio perfecto. Por la mañana eres quien crees que eres y por la noche te has convertido en un lactante sesteando para toda la Eternidad.

No es así.

El enfermo de Alzheimer llega a tener momentos de lucidez, y es cuando más sufre. Porque es consciente de su demencia y como le va deteriorando.

Imagina a un conductor en mitad de la M30, que se le acaba de averiar el coche y está atascando la circulación. Gira el volante hacia la derecha pero tuerce a la izquierda. El freno acelera y el acelerador frena. Y además está atrapado dentro porque las puertas no se abren y no puede (o es muy difícil) explicar al resto de vehículos que no consigue reparar el problema. A los demás no les importa, están demasiado ocupados cagándose en sus muertos.

Eso es el Alzheimer. El alma, (o la mente) atrapada en un cerebro que no responde a las órdenes que se le envían, un FreeBSD de 64 bits que intenta correr en un Pentium-II. Un dolor angustiante que sólo termina con la muerte.
 
ilovegintonic rebuznó:
Lo que nos inquieta es pensar en no estar aquí más cuando estamos aquí.

Pero si te das cuenta, eso que dices no se trata de un problema metafísico sino de índole psicológica. Es decir, el problema no es la muerte en si, sino la abstracción psicológica que haces de pensar en "la nada". Y claro está, la nada es angustiosa para cualquier hombre que se la plantee, pero curiosamente con la diferencia de que un creyente no sufre esa inquietud, sino que es una angustia que sufre habitualmente el hombre ateo.


Victor I rebuznó:
Es racional pero es inquietante a la vez, porque el gran filósofo griego lo resuelve con un terrible y sentencioso: ya NO SOMOS. Y ahí esta el problema, en no ser, en domesticar ese instinto, ese Élan vital. Todo lo que existe quiere perdurar.

No somos, pero no podemos ser conscientes de no ser. Por mucho que te imagines como podría ser el "no ser" la interpretación que hagas va a ser siempre psicológica, por lo tanto SUBJETIVA, lo que quiere decir que la conclusión que saques y las emociones que sientas no son válidas.

La no existencia es un estado de no consciencia. Podría decirse desde la perspectiva del yo, del ego, que sólo se puede ser "ser". Ningún antepasado nuestro es consciente de que está muerto.
 
Britpop rebuznó:
No somos, pero no podemos ser conscientes de no ser. Por mucho que te imagines como podría ser el "no ser" la interpretación que hagas va a ser siempre psicológica, por lo tanto SUBJETIVA, lo que quiere decir que la conclusión que saques y las emociones que sientas no son válidas.

No hace falta imaginarselo, todos nosotros "no hemos sido" durante los millones de años que precedieron a nuestro nacimiento, así que la muerte será una vuelta a la normalidad.
 
ignaciofdez rebuznó:
Me admira que tengan ustedes esa seguridad total, la certeza absoluta de la no-transcendencia.

Yo no tengo la certeza de la no-trascendencia. Tampoco de la trascendencia. Yo simplemente, si tuviera que apostar mi último dólar, apostaría a la no-trascendencia, porque la única experiencia que tengo al respecto vivida en primera persona es lo que más arriba menciona Yeims: el no haber sido de antes de mi nacimiento. Nada fui antes de ello, me parece que lo más normal sería volver a no ser, la vuelta a la normalidad, y que este hiato en el mundo es lo anómico, lo anormal, la excepción, y yo me cago en su puta madre un rato.

No sé, chico. Se han muerto muchos seres humanos desde que el mundo es mundo. Miles de miles de millones, desde las cavernas hasta ahora mismo. Justo ahora, se han muerto varios. Escribo "ya" y varios más caen. Y de ninguno hemos vuelto a tener noticias. Ya podía haber uno solo de ellos, UNO, haber venido a contarnos si es que sí o si es que no, si hay o no hay trascendencia. Y no me valen esos fantasmas aparecidos a fulano por la noche, o esa sombra que se ve en la casa maldita del pueblo. No. Que no me sean mariquitas, y que no me hagan como la Virgen, que siempre que se aparece se aparece en un olivar ante un niño o en medio de la nada ante una persona, que vete tú a saber. Que se aparezcan DE VERDAD, que en mitad de la Gran Vía, Trafalgar Square, Times Square o en mitad del Bernabéu en un Madrid Barça o en el descanso de la final del Mundial, vengan y nos lo declaren, que ya está uno hasta los cojones de secretitos.
 
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