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Me enganchan estos vídeos de gordos haciendo mukbangs:
Me produce placer morboso verles y oírles comer, pero a la vez me da miedo exponerme a este tipo de material.
Me enganchan estos vídeos de gordos haciendo mukbangs:
Me produce placer morboso verles y oírles comer, pero a la vez me da miedo exponerme a este tipo de material.
Ayuno de vídeos. Desde ya
También se han hecho movies y documentales del fenómeno.Al parecer el fenómeno de obtener placer indirectamente al ver mukbangs, e incluso usarlos para satisfacer el deseo sin llegar realmente a comer, está estudiado:
The Psychology of Mukbang Watching: A Scoping Review of the Academic and Non-academic Literature - International Journal of Mental Health and Addiction
Internet technology has facilitated the use of a wide variety of different activities and applications in online contexts. Despite a large amount of research regarding these activities including online social networking, online gaming, online shopping, online sex, and online gambling, very...link.springer.com
Eating Use
One of the key compensations provided by mukbang watching was vicarious eating. Hakimey and Yazdanifard (2015) emphasized that individuals watched mukbang to have the experience of eating vicariously through mukbangers because they were on diets. (...) Choe (2019) further asserted that mukbangers helped satisfy food cravings of the viewers by giving them a vicarious pleasure of eating.
As a result of her analyses, Donnar (2017) argued that (...) mukbang was akin to ‘food porn’ rather than food images or food-related television shows. Donnar claimed that interactions between mukbangers and fans (e.g., responding to fan requests as they eat, talking while eating) were making mukbang similar to webcam porn. Some dieting female viewers watched mukbang as a satisfaction of their fetishistic desires for vicarious consumption while avoiding actual eating.
Gillespie (2019) argued that magical eating fantasy (i.e., the idea of eating as much as desired without suffering the consequences) was one of the most important motivations that drove individuals to watch mukbang. Some viewers used mukbangers as a proxy for eating by creating a reality where they were becoming the mukbangers by proxy as a way of fulfilling their fantasies of eating (Gillespie 2019).
Furthermore, Bruno and Chung (2017) concluded that some viewers did not care about the mukbangers and saw them as prostitutes who eat/consume whatever viewers demand in exchange for money. They theorized that the main beneficiaries of vicarious pleasures provided by mukbang were individuals who were on a diet. (...) Making loud sounds while eating and showing the food in an appetizing way on camera attracted the viewers, especially the ones who were on a diet. Most of these viewers watched to see the food not to see mukbanger’s face. Viewers wanted the mukbanger to eat it with hearty and keen enjoyment to satisfy themselves.
In an American study on how mukbang could affect viewers, Tu and Fishbach (2017) conducted several experiments that examined the vicarious satiation phenomenon by observing how watching others consume specific foods affected viewers’ desires towards those particular foods. The first experiment indicated that viewers who watched someone else eat a pizza desired less pizza than before watching the video. The second experiment demonstrated that viewers who watched someone eat M&Ms (a brand of candy) postponed consumption of M&Ms and chose to eat another product after watching the video.
Abre hilo @Cenobita, joder, esas papadas tienen recorrido
Mira este mantecas que anaconda de panceta se trinca
Me enganchan estos vídeos de gordos haciendo mukbangs:
Me produce placer morboso verles y oírles comer, pero a la vez me da miedo exponerme a este tipo de material.
Me enganchan estos vídeos de gordos haciendo mukbangs:
Pocas cosas ejemplifican más la decadencia de occidente para mí que los videos de putos gordos comiendo igual que animales. Si dices, bueno, es un enfermo que hace eso en su casa como otros se pajean sin control, pues bueno. Pero colgarlo en internet para obtener dinero por las visitas o subscripciones... me encantaría reventarles la cara a puñetazos mientras se intentan defender inútilmente con sus bracitos y se revuelven tratando de ponerse en pie tirándose pedos sin parar. Realmente lo único que me pasa por la cabeza al ver semejantes desechos humanos es que les daría de ostias hasta matarlos.
Me vienen a la mente estos gordos de los videos, la introducción de forma descontrolada de moros en países del primer mundo, los obesos que conducen los motocarros en EEUU, los maricas con demasiada pluma como Aless Gibaja, el neolenguaje de género... De todo eso yo creo que todo lo que tenga que ver con gente muy gorda es lo más penoso de este mundo que hemos construido.
No va por tí @Cenobita. Tú has elegido el camino de la dignidad.
Pero deja que la evolución haga su trabajo. ¿Qué prisa tienes?Me cago en mi vida, todos estos obesos repugnantes no solo no se avergüenzan de su degeneración, sino que la sacan a pasear con orgullo y ejemplaridad. Son la señal más clara de la proximidad del apocalipsis. ¿Anticristo, guerras, hambrunas? No, masas de sebo hinchándose de carbohidratos y grasa con el sonido de fondo del rechupeteo y los gemidos propios de un animal de granja, sin otra finalidad que colapsar el sistema sanitario. Paredón y al hoyo.
Ver el archivos adjunto 58433
Pocos intelectuales de verdad hay que aporten con argumentes su postura.
Me cago en mi vida, todos estos obesos repugnantes no solo no se avergüenzan de su degeneración, sino que la sacan a pasear con orgullo y ejemplaridad. Son la señal más clara de la proximidad del apocalipsis. ¿Anticristo, guerras, hambrunas? No, masas de sebo hinchándose de carbohidratos y grasa con el sonido de fondo del rechupeteo y los gemidos propios de un animal de granja, sin otra finalidad que colapsar el sistema sanitario. Paredón y al hoyo.
En general me da asco ver y oír a la gente comer, con sus babas, sus perdigonazos porque no pueden solo comer sino que quieren hablar a la vez, sus formas de tragar, sus hocicos llenos de grasa, su sorber de sopa.
Yo tampoco soy ningún angelito. Como rapidísimo y esto molesta a mucha gente, al parecer.
Bueno, pues que si ya de por sí me repugnante la gente comiendo, que esa gente sean gordos infectos y encima de propina que sea una negra me parece que está al nivel de ver a gitanos comiéndose los mocos.
Asco en mi interior
Una vez vi a García-Trevijano comer unas migas en Capileira, tras unas sesiones para el colectivo ese que se montó. Fue placentero verlo engullir a esa edad tan generoso plato.
¿Evolución? Esos gordacos no se mueren en dos meses, sino que van arrastrando enfermedades sistémicas y achaques crónicos durante décadas, desde lesiones articulares hasta diabetes, pasando por apneas del sueño, accidentes cardiovasculares y cáncer, sin olvidar trastornos psicológicos como ansiedad y depresión. El gasto de la sanidad en estos infraseres ya hace años que supera al del tabaquismo en los países desarrollados, y va a más.Pero deja que la evolución haga su trabajo. ¿Qué prisa tienes?
Era un chiste. También me dan asco. Incluso la chinita (comiendo al menos). Pero bueno cada cual se mata o se arruina la vida como le da la gana. Yo no veo ningún problema en que sea tragando como si no hubiera Dios.¿Evolución? Esos gordacos no se mueren en dos meses, sino que van arrastrando enfermedades sistémicas y achaques crónicos durante décadas, desde lesiones articulares hasta diabetes, pasando por apneas del sueño, accidentes cardiovasculares y cáncer, sin olvidar trastornos psicológicos como ansiedad y depresión. El gasto de la sanidad en estos infraseres ya hace años que supera al del tabaquismo en los países desarrollados, y va a más. La única esperanza que nos queda es el coronavirus, que parece que ataca con más virulencia (y nunca mejor dicho) a estos animales de bellota. Yo impondría la instauración de asignaturas obligatorias como nutrición (igual que hicieron en Japón), y promover más el deporte, sin olvidar, desde luego, aumentar las tasas a los productos hiperazucarados.
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