Vaserqueno rebuznó:
En su día empecé con una chica, la primera noche nos liamos con mucho entusiasmo, nos fuimos solos por ahí, etc...
A la tercera o la cuarta cita me recibió con dos besitos en la mejilla.
Creo que no la volví a llamar.
La imprevisibilidad de las mujeres en este tema del sexo es absolutamente asombrosa e inexplicable para la mente rectilínea, lógica y racional de un hombre. Antecedentes: conozco una mañana a una señora casada, joven y de muy buen ver, y esa misma tarde-noche nos acostamos apasionadamente. Lo mismo se repitió en innumerables ocasiones distintas durante dos años en las que quedamos para marcharnos de viaje unos días, sin agobios de ninguna clase. En total, bien pudimos estar juntos más de 15 días seguidos, compartiendo las 24 horas del día y mucho sexo. Las relaciones eran tan básicas para ambos como comer y disfrutábamos sin freno ni trabas.
La última vez que me la encuentro para tal menester, me saluda sólo con un "piquito" y un roce de labios en la cara.
Pasamos juntos desde las 11 de la mañana a las 9 de la noche, y nada... Nada de nada.
No, no tiene otro macho alfa, si es lo que estáis pensando. Sola, cuidando a sus hijos y trabajando. ¿A qué viene entonces esta nueva actitud? Con sinceridad, no lo sé, pero teniendo en cuenta que para esta última vez ya vive sola y separada, o sea, más libre que nunca, puedo intuir:
a) Quiere hacerse la interesante y adopta la típica actitud lorealista, con vista a ver si pilla a un nuevo tonto a quién sangrar y de quién depender.
b) Tiene un cacao mental que no sabe qué camino coger y está desorientada y sin rumbo.
c) Se le ha cerrado el coño por el estrés postraumático de la separación o vete tú a saber...
En definitiva, tras el largo encuentro absurdo de casi 12 horas inútiles, excepto gastar más dinero en copas, almuerzo, merienda, gasolina y cafés que si me hubiera ido de cabeza a un puticlub, me encuentro cargadito de leche y sin respuestas coherentes. Mis preguntas para clarificar y esclarecer el enigma de sus balbuceos, frases incoherentes y respuestas de tartamudeo ante mis requerimientos quedan sin responder.
Hace un mes y medio que no la he vuelto a llamar ni me he puesto en contacto con la susodicha de ninguna de las maneras. Sms que me manda, a la papelera; llamada que me hace, se queda sin responder. Que se la tire su padre. Ésta no me vuelve a ver el pelo mientras no anticipe fehacientemente que mojamos como condición
sine qua non. Si se quiere hacer la lista y la guapa
porqueyolovalgo, va apañada.