Efectivamente, no es por huir de una mujer, pero sí supone cerrar un círculo que empezó cuanto terminó mi relación anterior. Por haber apostado por ella, dejé de lado oportunidades laborales como ésta, lo que me había llevado a un cierto estancamiento. Con 38 años eres demasiado mayor para según qué empresas y demasiado joven para otras. Estás en un limbo incierto en una ciudad con pocas alternativas.
Después de un año intentando buscar algo por aquí, porque de mi anterior trabajo estoy cansado, empecé a mirar a otros lugares y, en cuestión de semanas, todo se resolvió. El trabajo es bueno, está bien pagado e implica muchos viajes. Lo negativo es que las obras suelen estar en medio de la nada, por lo que los círculos sociales son muy limitados. Quizá por eso el salario y las vacaciones son grandes.
Aun así, es un salto de fe. Es irse a algo que uno no controla cuando ya se tiene una edad. Pero es ahora o nunca, otro tren así es difícil que pase, aunque implique alejarse de amigos, familia, rutinas y una ciudad que me gusta mucho y en la que me siento muy a gusto. He intentado por todos los medios no irme, ha bajado mis expectativas salariales hasta lo mínimo y he estado pluriempleado, pero no es algo sostenible en el tiempo. Así que, aunque sólo sea por hacer cv, toca irse.
Lo de ponerlo aquí es sólo porque hace tres años algo así parecía imposible. Estaba muy en la mierda tras una ruptura que me dejó roto y sin vistas de que la cosa mejorase. Había perdido el coche, vivía en la casa a la que me fui con mi ex y mi trabajo era alienante. Ayer compré un coche nuevo (segunda mano y básico, lo justo para viajar), avisé al casero de que dejo la casa y a mi jefe de que me voy.
Eso sí, claro, estoy acojonado.