En Tokio, definitivamente. Las japonesas son las pivas más golfas que he visto, da igual que tengan cara de orangutanas humanizadas, quieren imitar a las occidentales (por las películas porno americanas, o bien por emular lo que ven en el hentai), quieren estar al día en cuanto al arte de lamer penes se refiere, casi te piden por favor que les dejes hacerte una paja o mamarla, yo que soy un españolito medio de 1,82 que no me como un rosco en ninguna disco de España, jamás, allí en Japón triunfo entre tantos enanitos, el paraíso para los que no nos comemos un rosco, palabra. Torbe puede corroborar lo golfas que son las japoneses, seguramente.
Y en Madrid, pagando o echándote novia. Cada vez se folla menos, la gente que sale los fines de semana va a emborracharse y vuelven a casa colocaos y sin haber follao -ante tal panorama, lo mejor es llenar la sangre de alcohol, como mínimo-. Las chicas cada vez se cierran más y, a no ser que saques la visa oro -aun siendo calvos y barrigudos- y te vean sobradamente solvente, te verán como otro gusano más que intenta acceder a su entrepierna. O con las chicas del Messenger, las de los artículos de torbe... claro que tan jovencitas sólo se fijan en lo bueno que está uno. Que yo no lo estoy, por supuesto.
Friskies, so guarra, un día quedamos y te enculo. Sé que te atraigo.