Joder, el sustituto montiñero al mazacote de Torbe
Yo tengo tres modelos de desayuno:
1) Desayuno express: un bol de avena con leche desnatada o soja y pitando pa la universidad. Antes hacía lo mismo, pero con Corn Flakes, así que el cambio es insignificante, pues los Corn Flakes son PIENSO.
2) Desayuno germanocatalán: tostar un par de rebanadas de pan de centeno integral alemán hasta que se queden más bien duras (no me gusta el sabor que tienen blandas) y hacer con ellos después una pantumaca con tomate, aceite y sal. También bebo té, leche o soja, y suelo acompañar una fruta.
3) Desayuno del Domingo: sólo merece la pena si te levantas temprano, porque si no, vas servido para todo el día. Levantas la persiana, observas con satisfacción la quietud de la mañana dominguera, pones la radio y pasas por la sartén grasas saturadas a go-gó. El del domingo pasado llevaba bacon, huevos, morcilla frita y cachuela extremeña. Después de eso, te espera un domingo de rock'n roll.
Por cierto, en este mismo momento me encuentro quebrantando vilmente la dieta, metiéndome pal cuerpo unos buenos vasos de licor café de Galicia (lleva azúcar a espuertas), pero entended, me puse como regla que Montignac no interferiría en mi amistad entre el alcohol y yo. Comprendedlo.