Kokillo rebuznó:
El caso de las caras de Bélmez es bastante curioso. Para empezar, la señora esta pedia la voluntad para entrar a verlas, lo que por varios amigos de Jaen que fueron alli. Cuando la prensa especializada siempre ha mantenido que no cobraba y vivia casi en la miseria. Os puedo asegurar que la mujer hacia una buena caja al cabo del dia.
Hace cosa de un año o dos, salio otra vez el tema en TV y entrevistaron a uno de los primeros en acudir. Un cientifico del CSIC, que aseguro que aquello era causa del nitrato de plata, que recogieron en abundante cantidad y que reacciona a la luz natural.
Lo curioso del ultimo caso, que aparecieron en su otra casa despues de muerta, es que la misma semana realizaron conexiones en directo tanto Milenio3 como La rosa de los vientos, y ambos corresponsales dijeron vivir sucesos extraños. Sicofonias y movimientos de objetos, creo recordar.
Por lo menos, curioso.
Permíteme que aclare algunos puntos que comentas sobre el caso Bélmez. En primer lugar, puedo decirte que
María Gómez Cámara jamás se ha lucrado de las 'caras'. Y si lo hubiese hecho, estaba en su pleno derecho. Es su casa y puede hacer lo que quiera (siempre y cuando las 'caras' no fuesen fraudulentas, claro está, porque ya hablaríamos de una estafa). Únicamente, en una época, allá por 1992-93, María, influida por algunos conocidos, comenzó a pedir la voluntad, pero solo a quienes veía con cámaras y decían ser reporteros que trabajaban para periódicos o revistas. ¿Las razones?... Esos conocidos, le dieron la noticia de que un par de avispados reporteros gráficos habían cobrado una suculenta suma económica, lucrándose del tema. Y nos consta que no solo esos dos, sino muchos más. María dijo: "Se han aprovechado de mi buena fe". Por eso decidió pedir la voluntad a todo aquel reportero gráfico que quisiera hacer foto.
Ella ha vivido 33 años teniendo como epicentro de su vida las 'caras' que un 23 de agosto de 1971 aparecieron en el suelo de su casa. Y ha tenido que soportar la visita de miles de personas desde esa fecha hasta su muerte. Peregrinaciones que se agolpaban en la puerta de su casa y ella, siempre amablemente, accediendo a que entrara a su casa todo aquel que quisiera. Incluso a altas horas de la madrugada se han presentado "peregrinos" a su casa, llamando a su puerta, y ella atendiéndoles y haciéndoles pasar. En ocasiones, incluso estando enferma. Nunca cerró sus puertas a nadie. Ni ha puesto tarifa ni nada parecido. Sólo a quienes han entrado a su casa 'a saco' sin sentarse a hablar con ella, solo para hacer fotos, e identificándose como fotógrafos de prensa, es cuando ha dicho eso de la 'voluntad', pero fue durante un período breve de tiempo. Luego se olvidó del tema. Por allí hemos desfilado muchos investigadores, curiosos, gente interesada en los fenómenos paranormales, etc. etc. y jamás nos pidió nada. Incluso se molestaba en preparar café a más de uno. Confesaba que el tema de las 'caras' le había traido muchos quebraderos de cabeza, aunque terminó acostumbrándose a vivir con ellas. Yo, que siempre voy buscando en estas historias el posible fraude, el trasfondo lucrativo, la picaresca, etc. -puedo estar abierto a estos temas, pero luego soy una persona tremendamente crítica-, no he encontrado en el caso Bélmez el menor indicio de lucro, al menos por parte de María, la propia inquilina. Así que no es verdad eso que comentas de que "esta mujer hacía una buena caja al cabo del día". Siempre vivió muy humilde y así fue como murió. No se despegaba de la mesa camilla de su casa. No solo lo digo yo, sino muchos investigadores que han desfilado por la casa, desde el pionero
Germán de Argumosa hasta los más recientes, como por ejemplo, los miembros del SEIP, que han podido ejercer 'in situ' sus investigaciones sin que María les pidiera nada a cambio.
En cuanto a lo que dices del científico del CSIC, lo dudo mucho. Y es que los tres informes que en su día elaboraron el Instituto de Hidrología y Mineralogía de Valencia y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas -y que obran en mi poder-, son rotundos en las conclusiones: "No se han hallado restos de pigmentos". Solo hallaron un componente melanocrato, o sea, una serie de sustancias carbonosas y materia orgánica, algo normal ya que las muestras fueron tomadas en la cocina de la casa. Lo importante es que quedaron descartado el empleo de zinc o nitratos de plata, como sugirieron los detractores del caso. Esa fue la explicación que dio el diario 'Pueblo' en su día, pero con los años, los redactores de aquel diario -tengo también sus recientes declaraciones- confesaron que recibieron presiones -políticas y eclesiásticas- para acabar de una vez con el fenómeno de las 'caras', por el revuelo público que la historia estaba generando (recordemos que el diario 'Pueblo' inició el 31 de enero de 1972 una serie de reportajes defendiendo la veracidad del fenómeno, lo que hizo que el caso alcanzara una gran resonancia social). Sería muy largo de contar toda la trama que desde el gobierno se urdió para acabar con un molesto caso que, según decían, podía desestabilizar incluso la fe de los buenos católicos... En fin, que hasta el por entonces alcalde de Bélmez,
Manuel Rodríguez Rivas, fue amenazado por el Ministro de la Gobernación,
Tomás Garicano Goñi, que le requirió inmediatamente en su despacho de Madrid, diciéndole que si no terminaba con la historia sería encarcelado. Sin faltar las presiones que recibió del obispo de Jaén. Así que María no lo ha pasado bien. Y toda esta historia le ha desbordado...
Sobre las nuevas 'caras' que han aparecido, aún están en vías de estudio, y por el momento me reservo mis opiniones preliminares.
Saludos
Ummita