Me apetece probar la HEROINA

¿"Probar"? Pero qué cojones crees que estás probando subnormal? Estás probando lo que otros han diseñado y ha matado silenciosamente más que una puta plaga en suelo occidental. Frente a tu jeto, te daba dos. O cuatro hostias. Surnormal. Deja de leer toda esa mierda de literatura rock sobre el trinomio: drogas-musica-placer.

Es una puta mentira.

Y tira la camiseta de las perlas. O te nomino a subnormal del año, superando al mono chavista.
La camiseta es una Hobra maestra de la ironia, Sex pistols en perlitas, y comprada en Bejca.

Oiga, parece una abuela, eso de "Empiezas por los porros y acabas con la hhering" o " una vez te metes una raya, no hay vuelta atras"
 
Hace algo más de un mes pude haber hecho un control antidrogas de la Benemérita, pero les dije que no había consumido nada y no me lo hicieron. Mejor, porque me han dicho que te tiras más de media hora con el chupachups en la boca si al picoleto se le antoja tocarte la moral. Y eso sin dar positivo, que cómo des positivo te tiras todo el día entre papeles, analíticas y su puta madre.

Yo he hecho, unos... 50 controles antidroga, 35 de ellos borracho, pero sé imitar voces y comportamientos o "haceres" (que me dijo un catedrático granaino) de individuos "normales".

En ninguno fui multado de los 35.
 
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La camiseta es una Hobra maestra de la ironia, Sex pistols en perlitas, y comprada en Bejca.

Oiga, parece una abuela, eso de "Empiezas por los porros y acabas con la hhering" o " una vez te metes una raya, no hay vuelta atras"

Tres amigos de mi infancia llevan años enterrados, uno ya hasta está en el osario municipal. No es ser abuela. He visto "esa muerte" muy cerca. No hagas el gilipollas, por mucho que bebas de las discografías de esos agraciados con lo musical. Es una gilipollez meterse caballo en el siglo XXI.
 
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Señor peseto de mierda, tienes muchas webs donde comprar Dsuvia.

Fácil, sin pinchacitos, sin sobredosis, sin camellos echando Colacao. Una pastillita bajo la lengua y a volar.
 
La heroína como mejor entra es en forma de supositorio. Eso está demostrado por Trainspotting.
 
Tras vivir una vida mas bien aburrida, monótona y solitaria, llegaremos a 60-70 años pensando en que diferencia habria tenido convertirse en yonkis a los 25 años de edad. Bueno, el problema es no tener ni cojones para ser un yonki y vivir una vida de mierda que es aun menos satisfactoria.
 
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Pero si tú eres lo más fantasma que hay en el foro. Un pobre diablo sin oficio ni beneficio que no sale de su casa y se te quiere hacer ver vivencias del lobo de Wall Street.

:lol:

cada vez menos si, pero por voluntad propia. no se que vivencias de lobo de wall street te refieres yo nunca me las he dado de millonetis porque no lo soy, y tampoco es que tenga vicios caros mas alla de la ludopatia y tampoco es que gaste tanto
 
Que hablen los expertos:

“Trabajé de detective privado, de fumigador de insectos, de camarero. Trabajé en fábricas y oficinas. Coqueteé con la delincuencia. Pero mis ciento cincuenta dólares mensuales siempre llegaban puntualmente. No tenía necesidad de dinero. Me parecía una extravagancia romántica poner en juego mi libertad mediante actos delictivos que eran meramente simbólicos. Fue entonces y en esas circunstancias cuando entré en contacto con la droga y me convertí en adicto; fue entonces cuando delinquí de modo consciente, al tener auténtica necesidad de dinero, algo que nunca me había ocurrido antes.
Ésta es la pregunta que se plantea con más frecuencia: ¿qué hace que alguien se convierta en drogadicto?

La respuesta es que, normalmente, nadie se propone convertirse en drogadicto. Nadie se despierta una mañana y decide serlo. Por lo menos es necesario pincharse dos veces al día durante tres meses para adquirir el hábito. Y no se experimenta realmente lo que es el síndrome de abstinencia hasta después de varios períodos de adicción separados por épocas de abstinencia. Tardé casi seis meses en adquiri mi primer hábito y, a pesar de ello, cuando lo dejé los síntomas del síndrome de abstinencia fueron leves. No creo exagerado afirmar que para convertirse en adicto se necesita cerca de un año y varios cientos de pinchazos.

Naturalmente, hay quien hace otras preguntas: ¿por qué empieza alguien a usar estupefacientes? ¿Por qué sigue usándolos hasta convertirse en adicto? Uno se hace adicto a los narcóticos porque carece de motivaciones fuertes que lo lleven en cualquier otra dirección. La droga llena un vacío. Yo empecé por pura curiosidad. Luego empecé a pincharme cada vez que me apetecía. Terminé colgado. La mayor parte de los adictos con los que he hablado tuvieron una experiencia semejante. No empezaron a consumir drogas por ninguna razón en concreto. Quien nunca haya sido adicto, no puede hacerse la idea de lo que significa necesitar droga con la tremenda intensidad de quien está enganchado. Nadie decide convertirse en yonqui. Una mañana se levanta sintiéndose muy mal y se da cuenta de que lo es.

Jamás he lamentado mi experiencia con las drogas. Creo que gracias a haberlas usado de modo intermitente en la actualidad mi salud es mejor de lo que sería si nunca las hubiera probado. Cuando uno deja de crecer, empieza a morir. Un adicto nunca deja de crecer. Muchos adictos se abstienen de las drogas periódicamente, lo que implica que el organismo expulsa las sustancias nocivas al contraerse, y las células que dependen de la droga son reemplazadas. Una persona que consume drogas está en estado continuo de contracción y crecimiento en su ciclo diario de necesitar pincharse para poder sentir la satisfacción de haberse pinchado.

Muchos adictos parecen más jóvenes de lo que son. Recientemente, se han realizado experimentos científicos con un gusano al que obligaban a contraerse suprimiéndole la alimentación. Al contraerse periódicamente, el gusano estaba en crecimiento continuo, de modo que se vida era prolongada indefinidamente. Si un yonqui pudiera mantenerse de modo permanente en el estado en que se siente cada vez que deja la droga, quizá podría vivir hasta una edad increíblemente longeva.

La droga es una ecuación celular que enseña a quien la usa hechos de validez general. Yo he aprendido muchísimo gracias a su uso: he visto medir la vida por las gotas de solución de morfina que hay en un cuentagotas. He experimentado la angustiosa privación que provoca el síndrome de abstinencia, y el placer del alivio cuando las células sedientas de droga beben de la aguja. Quizá todo el placer sea alivio. He aprendido el estoicismo celular que la droga enseña al que la usa. He visto una celda llena de yonquis enfermos, silenciosos e inmóviles, en aislada miseria. Sabían que era inútil quejarse o moverse. Sabían que, en el fondo, nadie puede ayudar a nadie. Nadie tiene una clave o un secreto que pueda comunicar a los demás.

He aprendido la ecuación de la droga. La droga no es, como el alcohol o la hierba, un medio para incrementar el disfrute de la vida. La droga no proporciona alegría ni bienestar. Es una manera de vivir."
 
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Después de leerme el hilo entero, viendo a @Cáncer de Colon casi parafrasear a La Fuga, y no pudiendo aportar casi nada al consumo de jaco, solo me queda invocar a @hitsfromthebong a ver si tiene a bien pasarse por el foro y comentarnos sus conocimientos sobre opiáceos y derivados.

Mmmmm, el caballo...

Yo, desde muy pequeñito ya veía los efectos de la adormidera en los diferentes esperpentos del Parque Amate y aledaños. Mi viejo tenía relación directa con los yonkos de la zona y les veía muy a menudo, les veía moraos después de consumir, les veía de mono, les veía de todas las maneras, y ya con diez añitos o así sabía perfectamente lo que era. Tanto mi viejo como sus compinches eran muy fans de la música, flamenco primero que todo, pero también descubrieron al Iggy Pop, al Ian Dury, a los Rolling, etc. Y como toda esta gente tomaba heroína y la vendían como la panacea, pues toda una generación pensó que realmente lo era y se dedicaron a cabalgar como si no hubiese un tomorrow. Lo que no les dijeron fue que para desengancharse hacían falta sobre todo tres o cuatro pares de cojones, o eso, o mucha guita; porque claro, si Keith Richards dice que se quiere quitar pues nada, coge un millón de dólares, se cambia la sangre (o como coño lo hagan eso), se paga pichicólogos cojonudos, dietistas, entrenadores personales y blao, y asín cualquiera, pero el que está tirao en la calle con un batido de vainilla de un litro y un chándal de las monjas a ver cómo carajos lo hace.

Alrededor de los veinticinco años yo ya había probado de todo: Farlopia, speed, porros, extasis, anfetaminas... De todo, pero me faltaba el caballo. Como había visto lo que traía desde ya muy chinorri, le tenía un respeto muy grande, pero al mismo tiempo yo ya me conocía en ese sentido, y al contrario de lo que empiezan diciendo la mayoría de los enganchaos yo sabía que no me iba a enganchar. Me empezaba a despertar mogollón de curiosidad y decidí probar. Eso sí, como no tenía prisa, me impuse dos normas: La primera es que por la vena ni de coña, la segunda es que debía ser un caballo de calidac, nada de la puta mierda que se suele vender.

Un day conocí a dos turcos que andaban en negociaciones de jachís con un colega del buarrio. Un día, enzarpaos de coca comiendo techo en su mansión (la de mi colega) se me ocurrió decir que a ver si se me pasaba ya la atacaera, que quería dormir, y que lo suyo sería un buen chino para bajar aquel enzarpe indecente.

- ?Tú nunca has probado, Hits?

- Qué va, tío, la he visto siempre pero nunca la he probado.

- Si quieres, la próxima vez que vengamos te traigo un poco.

Como vi que eran turcos y que uno de los mejores cabalinos es el turco, le dije que sí, que me gustaría. De modo que varios meses después, como dos o tres, volvieron a caer por aquí, volvimos a salir a tomar copas y a increpar a las guarras que pasaban por la calle (lonchas de por medio, porsupu). Cuando hubimos vuelto esta vez a mi mansión (mi viejo estaba en Huelva haciendo de las suyas imagino, no me acuerdo), puse un vinilo de los Cream y nos sentamos en el sofá roñoso a liarnos uno petardos.

- Illo qué, ¿te has traío eso o no?

- Ah, sí, sí, se me había olvidado. Aquí lo tienes. ¿Tienes jeringuilla?

- Que va, colega, yo no me pico la vena ni de coña.

El turco me puso cara de asombro y me comentó que era un auténtico desperdicio tomarla por cualquier otra vía que no fuese la intravenosa. Yo no me dejé convencer y le rebatí diciendo que fumada sí, en ese mismo momento, pero que nada de chutas.

- Pffff, de verdad, lo que te vas a perder, pero bueno, tú sabrás. ¿Tienes papel de plata?

- Sí, eso sí, voy a por él.

Fui a la cocina y traje cortado un rectángulo de unos quince centímetros de largo por nueve o diez de ancho. El puto turco volcó una heroína blanca que jamás había visto, en el barrio toda la que había era marrón, nunca la vi ni siquiera gris como sale en la penícula El Pico. La volcó y la calentó por debajo con el mechero, se hizo una gota entre negra y dorada, como un negro metalizado, no sé, nunca había visto nada igual. Entonces, cambié el vinilo de los Cream por el The Soft Parade de los Doors y me puse a menear la gota parriba y pabajo en lo alto de la plata. Sentí como un cosquilleo por tol cuerpo y de inmediato me acomodé en el otro sofá roñoso que tengo en el salón rodeado de cojines. Mientras Morrison cantaba sus delirios de borracho yo me elevaba como un globo hasta dar con el techo.

Recuerdo la sensación de que todo iba bien, todo era chachi piruli y el mundo funcionaba a la perfección, los problemas no existían. Ahí vi lo realmente peligrosa que era esa drogaína. Si en ese momento me hubiesen dicho que estaban violeteando a mi madre entre tres degenerados en un parque, yo hubiese reaccionado con un simple: "fssssss, luego hablo con ella para que me cuente", y me hubiese acurrucado contra uno de los cojines.
Entiendo perfectamente que la gente se refugie en el caballo para sobrellevar sus problemas insoportables, porque es que te la sopla todo y además a lo bestia. Después pasa lo que pasa, que los problemas siguen ahí, y tú se la chuparías a un vagabundo que lleva meses sin lavarse por 5 euros que te permitan pillar lo justo para dar unas caladas que no llegan ni para quitarte el monkey.

Fue la polla, increíble, impresionante, bestial. Hoy en día me sigo preguntando cómo sería por la vena, como dicen en Traispotin, tiene que ser eso de los orgasmos y tal y cual. Luego, movido por mi curiosidad también, probé la marrón y efectivamente... Aunque hacía su efecto, pero ni se le acercaba de lejos a aquel jaco turco blanco. En el talego fumé un par de veces también, días de estos que eres una bomba con patas fruto del agobiazo que supone estar allí metido, y lo hice por motivos estratégicos. Si no me anulaba inmediatamente, alguien me terminaría pinchando o me buscaría un problema cuando menos; No hablaba con nadie, no quería que nadie me hablase y mucho menos que me hicieran un broma. Así que me dije de fumarme un chino y a dormir en un rincón. Lo mejor que hice.

Juraría que esos han sido mis contactos con el fruto de la amapola. Hoy ya sé lo que es de primera mano y encima he tenido la suerte de, al menos una vez, probar HEROÍNA, cosa que no todos los yonkis pueden decir. Se acabó la historia, una experiencia más en el currísculum de mi vida.

Yo creo que para tomar caballo hay que hacerlo desde un marco de seguridad, hay que conocerse muy bien a uno mismo y saber que realmente no te vas a enganchar (al menos tener muchas probabilidades de no hacerlo, que seguro no hay nada), se debe tener un mínimo de cultura y bagaje en la vida, solo asín se pueden reducir las posibilidades de caer. Es peligrosa, sí, pero se puede llegar a disfrutar de ella sin que ella te domine, es una cuestión de convicción diría yo.

En cualquier caso, aquí mi amigo Manolo también lo explica muy bien:

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Caballo sí, pero de calidac y controlao.
 
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No lo hagas. No la he probado, pero sólo porque estoy seguro que es mierda de la buena. Y en ese caso te desvinculas demasiado de la realidad como para mantener un círculo mínimamente in-satisfactorio como para llamarte humano funcional.
 
No he leido nada de la conversación del foro, pero la respuesta es NO. Yo controlo fué lo que dijo un amigo mío antes de tragarse medio bote de arranca cementos y estar tres días agonizando en el hospital... Por no estar robándole a sus amigos, familiares y vecinos por droga... se la menea ustec, se la casca con dos ladrillos. pero la respuesta es NO.
 
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Qué bonitas las historias de auge y caída, si es que alguna vez hubo auge para esta especie de cuervo con pintas.
 
Y en la primera, en la de niño, parece un mafioso de la costa del sol
 
Y en la primera, en la de niño, parece un mafioso de la costa del sol
Pues viéndole, cambiando el peinado a medio tazón, y más moreno, me ha recordado bastante a mi, de una foto que tiene mi madre de mi comunión, que podía ponerla en una casa de Arequipa en Perú, y dar el pego
 
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