qbit
Subnormal fachilla de pastel
- Registro
- 11 Sep 2006
- Mensajes
- 1.023
- Reacciones
- 0
He escrito una crítica de esa película en mi blog, y una tía ha aparecido tocándome las narices. La he respondido y me ha respondido de una manera más suave. Primero voy a poner la crítica de la película, y luego, sus respuestas y la mía, a ver qué os parece. Especialmente llamativa es la frase final.
Hace unos días emitieron por TV la famosa película “El diario de Bridget Jones”.
Las mujeres siempre han sido egocéntricas y se han pasado la historia de la humanidad mirándose el ombligo. El que dude o todavía no se haya enterado de qué va la realidad, que se pase por los blogs y foros de mujeres y verá que todo se resume en una palabra: YO. Sólo hablan de sí mismas, de sus intereses, emociones, objetivos, proyectos, etc. = Egocentrismo puro y duro. Yo, yo y nada más que yo. Por el contrario, los hombres ponen su atención en el exterior de sí mismos. Por eso, los foros de política, economía/bolsa, informática y cualquier asunto relacionado con la realidad objetiva alejada del YO está lleno de hombres y vacío de mujeres.
Por lo tanto, ya se veía desde antes de empezar que la peliculita iba a interesar más a las mujeres que a los hombres, teniendo de protagonista a una mamarracha llena de neuras.
En efecto, la peli trata de una tía que ya ha entrado en la treintena de edad, y se va dando cuenta que se “la está pasando el arroz”, y que se va a quedar solterona para toda la vida, gorda (ahí, ahí, la obsesión por el peso que no falte) y sola. Es decir, toda la nube en la que ha estado viviendo del “porque yo lo valgo” que los anuncios de TV la dicen para inflar su excesivo e insano egocentrismo femenino cada vez que la quieren vender algo, y toda su mentalidad consistente en creerse el centro del baile y la princesa tras la cual todos los tíos tienen que estar suspirando se va a pique. La entran los nervios, las prisas, el acojone. Bieeeen, bienvenida al mundo real. Ya va abriendo los ojos a la cruda realidad, jejeje.
Lo que no dice la peli es que probablemente antes de esa edad haya estado zorreando todo lo que ha podido y más, mientras buscaba al “hombre perfecto”, o eso se decía a sí misma, que lo buscaba, para intentar autoengañarse y seguir viéndose a sí misma éticamente legal mientras seguía zorreando a la vez que con sus amigas repetía lo malos que son los hombres. Y es que por muy fofa, insulsa y del montón que sea, el listón siempre lo tiene bien alto, exigiendo la Luna y un poco más. En el caso de la peli, la nena se ha encaprichado del jefe, que es joven y guapo, y se sobreentiende que con dinero y cierto poder, pues para eso es jefe. No hay que olvidar que la posición social y el dinero siempre han sido intereses prioritarios en las (interesadas) mujeres.
Todavía no está lo suficientemente desesperada para haber bajado el listón, y así vemos que sigue llamando a los tíos de su nivel como “moñas” y otros calificativos similares. Los productores de la peli, que no son idiotas, saben que están vendiendo un producto al público femenino, por lo que la peli sigue vendiendo más del tan manoseado “porque tú lo vales”, sólo que disfrazándolo para que parezca que es una peli más real, más auténtica, más sincera, que trata las vicisitudes de una tía con la que muchas mujeres se sientan identificadas. Pero es mentira, y como ya digo, la película no cuenta la auténtica realidad: No describe a la protagonista de la cruda manera que se merece, esquiva la situación más probable que la espera en su situación (casarse con alguien tan del montón como ella, no con un adinerado “profesional liberal” alto, de buen ver, con dinero y fiable), terminando con final feliz.
La película también incluye una pelea entre dos tíos a causa de la protagonista, para más regocijo de las mujeres a las que va dirigida la película.
La madre.
Pero especialmente llamativo y grave es lo que sucede con sus padres.
Su madre ha abandonado a su padre, para irse con otro tipo, y ya en la recta final de la película vuelve arrepentida a casa. El marido, en vez de mandarla a la mierda, la acoge sin pegas de ningún tipo. Más aún, ella encima tiene la caradura de decirle que “tiene que ser más atento con ella”. Toma eso. A ver si lo he entendido: La tipa se va con otro una temporada, y cuando se harta del ligue, vuelve con recriminaciones al marido y éste es tan idiota de acogerla sin rechistar. Si hubiera sido al revés, habríamos visto una escena en la que él se habría tenido que arrastrar. Acojonante, vemos cómo la película sigue echando más leña al fuego de la caldera del egocentrismo y chulería femenina del “porque tú lo vales”.
En definitiva, otro cuento de hadas tratando de parecer moderno y actual, pero igual que todos, al servicio del egocentrismo femenino. Qué pena, que para venderle una película al público femenino tenga que seguir el mismo grotesco esquema de siempre…
Hace unos días emitieron por TV la famosa película “El diario de Bridget Jones”.
Las mujeres siempre han sido egocéntricas y se han pasado la historia de la humanidad mirándose el ombligo. El que dude o todavía no se haya enterado de qué va la realidad, que se pase por los blogs y foros de mujeres y verá que todo se resume en una palabra: YO. Sólo hablan de sí mismas, de sus intereses, emociones, objetivos, proyectos, etc. = Egocentrismo puro y duro. Yo, yo y nada más que yo. Por el contrario, los hombres ponen su atención en el exterior de sí mismos. Por eso, los foros de política, economía/bolsa, informática y cualquier asunto relacionado con la realidad objetiva alejada del YO está lleno de hombres y vacío de mujeres.
Por lo tanto, ya se veía desde antes de empezar que la peliculita iba a interesar más a las mujeres que a los hombres, teniendo de protagonista a una mamarracha llena de neuras.
En efecto, la peli trata de una tía que ya ha entrado en la treintena de edad, y se va dando cuenta que se “la está pasando el arroz”, y que se va a quedar solterona para toda la vida, gorda (ahí, ahí, la obsesión por el peso que no falte) y sola. Es decir, toda la nube en la que ha estado viviendo del “porque yo lo valgo” que los anuncios de TV la dicen para inflar su excesivo e insano egocentrismo femenino cada vez que la quieren vender algo, y toda su mentalidad consistente en creerse el centro del baile y la princesa tras la cual todos los tíos tienen que estar suspirando se va a pique. La entran los nervios, las prisas, el acojone. Bieeeen, bienvenida al mundo real. Ya va abriendo los ojos a la cruda realidad, jejeje.
Lo que no dice la peli es que probablemente antes de esa edad haya estado zorreando todo lo que ha podido y más, mientras buscaba al “hombre perfecto”, o eso se decía a sí misma, que lo buscaba, para intentar autoengañarse y seguir viéndose a sí misma éticamente legal mientras seguía zorreando a la vez que con sus amigas repetía lo malos que son los hombres. Y es que por muy fofa, insulsa y del montón que sea, el listón siempre lo tiene bien alto, exigiendo la Luna y un poco más. En el caso de la peli, la nena se ha encaprichado del jefe, que es joven y guapo, y se sobreentiende que con dinero y cierto poder, pues para eso es jefe. No hay que olvidar que la posición social y el dinero siempre han sido intereses prioritarios en las (interesadas) mujeres.
Todavía no está lo suficientemente desesperada para haber bajado el listón, y así vemos que sigue llamando a los tíos de su nivel como “moñas” y otros calificativos similares. Los productores de la peli, que no son idiotas, saben que están vendiendo un producto al público femenino, por lo que la peli sigue vendiendo más del tan manoseado “porque tú lo vales”, sólo que disfrazándolo para que parezca que es una peli más real, más auténtica, más sincera, que trata las vicisitudes de una tía con la que muchas mujeres se sientan identificadas. Pero es mentira, y como ya digo, la película no cuenta la auténtica realidad: No describe a la protagonista de la cruda manera que se merece, esquiva la situación más probable que la espera en su situación (casarse con alguien tan del montón como ella, no con un adinerado “profesional liberal” alto, de buen ver, con dinero y fiable), terminando con final feliz.
La película también incluye una pelea entre dos tíos a causa de la protagonista, para más regocijo de las mujeres a las que va dirigida la película.
La madre.
Pero especialmente llamativo y grave es lo que sucede con sus padres.
Su madre ha abandonado a su padre, para irse con otro tipo, y ya en la recta final de la película vuelve arrepentida a casa. El marido, en vez de mandarla a la mierda, la acoge sin pegas de ningún tipo. Más aún, ella encima tiene la caradura de decirle que “tiene que ser más atento con ella”. Toma eso. A ver si lo he entendido: La tipa se va con otro una temporada, y cuando se harta del ligue, vuelve con recriminaciones al marido y éste es tan idiota de acogerla sin rechistar. Si hubiera sido al revés, habríamos visto una escena en la que él se habría tenido que arrastrar. Acojonante, vemos cómo la película sigue echando más leña al fuego de la caldera del egocentrismo y chulería femenina del “porque tú lo vales”.
En definitiva, otro cuento de hadas tratando de parecer moderno y actual, pero igual que todos, al servicio del egocentrismo femenino. Qué pena, que para venderle una película al público femenino tenga que seguir el mismo grotesco esquema de siempre…