Gracias por tus sugerencias. Los plantones ya tienen protectores que funcionan en general, pero muchas veces los roen, tienen unos dientes increibles los cabrones estos...
Luego, también tengo una parcela de calmo donde se comen las pipas, el trigo...
¡Quiero pegar tiros!


Mira, a ti te pasa una cosa y te voy a decir que cosa te pasa. A ti lo que te pasa es que eres un hijo de la grandísima puta (Trademark by
@Morzhilla).
Haber empezado por ahí. Por lo de los tiros.
Tú lo que quieres es una gran polla negra pavonada que eyacule plomo y haga sangrar al coño de la madre natura. Pues dilo sin ambages, hijo de perra, y no me hagas perder el tiempo con la escusita de que tengo una plaga y blao, blao. Dándote remedios mucho más eficaces y baratos que una escopeta para el problema que no tienes. Es que me divierte como os mentís a vosotros mismos y tratáis de colarle la misma bola a los demás para hacer parecer que tus necesidades reales son mucho menos psicopáticas de lo que son, cuando en realidad estás rodeado de otro montón de hijos de puta como tú a los que les importa una mierda que seas basura humana.
Bien, ahora que ya sabemos que tienes la necesidad de la mediana edad de sentarte en tu mecedora y recuperar tu potencia sexual perdida reventando conejos a tiros con una birra en la mano, pues ahora sí que te puedo ayudar.
Te puedo ayudar diciendo que te equivocas de medio, que la necesidad que tienes de cargarte un ser vivo la disfrutas mucho más cuando es algo más personal y sensorial, y lo haces con tus propias manos. Me explico; la escopeta que quieres es el medio de los zánganos y sobre todo de los cobardicas que no aceptan que tienen en su vida una sed de sangre no colmada. La mentira de respetabilidad tras la que esconderse como una puta maricona y que le permite dar un poco de rienda suelta a esa pulsión sádica de sangre y muerte, al igual que la puta mentira de que tienes una plaga.
Quieres matar bichos, estupendo. No hay problema. Que cuando dejes de mentirte a ti mismo por los motivos, lo vas a disfrutar mucho más, también.
Para los conejitos, ahora que ya sabemos de qué palo vas, te recomiendo trampas jaula. Lo divertido es que caen vivos, y que puedes cogerlos, llevártelos a tu mecedora y retorcerles tranquilamente poco a poco el pescuezo hasta que haga clac, disfrutando de cómo su insignificante existencia se escurre entre tus dedos. A la larga, y quitando la novedad del símbolo fálico de poder que anhelas en una Sarrasqueta y su adrenalina asociada, vas a disfrutar mucho más del tipo de mierda sosegada y madura de la que te estoy hablando. Hazme caso, que no es un vacile, y te puedes ahorrar una pasta.
De nada, hijo de puta.
