Ilovezorras rebuznó:
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¿Por qué no se puede seguir siendo un matrimonio? Decir padres parece que quiere decir que ahora dos personas no se van a dedicar la una a la otra, sino de lleno al hijo. No creo que sea así. Se puede seguir siendo un matrimonio con las mismas pretensiones y esperanzas con las que se formó, con la llegada de cualquier hijo. Si los motivos por los que se tiene un hijo, son los mismos por los que el matrimonio se formó, el hijo no tiene por qué introducir nuevos valores o consecuencias en la relación inicial.
Desgraciadamente no suele ser así. Tengo varios amigos que se han convertido en padres primerizos, alguno hace ya un par de años. Todos opinan lo mismo, que si lo llegan a saber, no tienen críos. En el momento que se tiene un hijo, como padre y esposo, tu puedes darlo todo tanto para la madre (esposo) como para el niño/a (padre). Pero la que era tu esposa, tu mujer, aquella con la que compartías tu vida, desaparece. No se convierte en madre y esposa, se convierte simplemente en madre. Tu ya no eres su prioridad, en la balanza padre-hijo gana el hijo por goleada y mucha diferencia. No puedes equipararte al hijo, aunque tu sí seas capaz de repartirte a partes iguales entra la madre y el hijo (cosa totalmente necesaria para el correcto desempeño de los roloes asocioados a la paternidad/maternidad), para ella siempre estará por delante la descencencia. Es ley natural, no hay nada que hacer.