Amor de ganglios inflamados.
El amor como inocencia y capacidad de ilusión,
como aptitud para resumir el conjunto del otro sexo en un solo
ser amado, rara vez resiste un año de vagabundeo sexual, y
nunca dos.
Os voy a contar una historia que viene como anillo al dedo a esta frase, una historia de noches extrañas y situaciones decadentes. Esperno no destaparme mucho, me gusta reservarme algun as bajo la manga y tampoco quiero ser el nuevo rusas (
)...
Hace algunos años cuando yo aún no era yo, cuando gozaba de un nutrido grupo de amigos, un excelente físico fruto de mi juventud y de muchas horas dandole a la mancuerna y corriendo sobre la cinta como un galgo detras de un conejo; era un tipo rematadamente simple, primario, me movia por impulsos sexuales relegando cualquier otra función al sexo y sus innumerables formas de conseguirlo.
Disfrutaba seduciendo a cualquier mujer que se cruzase en mi camino, no me importaba nada, ni fisico, ni edad, ni si eran amigas, primas, novias de amigos. NADA, solo pensaba en
puntuar, en no irme de vacío ninguna noche, en satisfacer mi maltrecho e insaciable ego con toda vagina susceptible de ser follada, en mentir sí. Disfrutaba mintiendolas, contandoles historias de lo mas inverosimil para despues reirme a su costa con mis amigos por ser tan estupidas de tragarse mi basura. Y era bueno, muy bueno en lo que hacía.
Fueron dos años intensisimos, nos juntamos un grupo de 5 iguales, cachitas de gimnasio, hombres producto sin mas tema de conversación que
las tias, saliamos de jueves a sábado todas las semanas, lloviera o nevara, en nochebuena y fiestas de guardar. Solo con el único objetivo de pillar. Y se nos daba tremendamente bien pues no había dos noches seguidas que la cosa no acabara en tema.
Se puede decir que durante ese periodo me hice con todos los pokémon de la charca de la inmundicia: tias con novio que te follan en el coche antes de ir a su casa, mujeres casadas, las que te dicen "yo no follo la primera noche" y te la chupan en un portal, tias que traidoras que te atacaban a la primera de cambio aun sabiendo que eras el capricho de su mejor amiga, las que viven en un pueblo y follan contigo si tienes sitio para quedarse a dormir en la ciudad, las bordes que necesitan hacerse borrachas para justificar que su apertura de piernas, las que te dicen
tequiero la primera noche, las que te insultan porque sí, las que te quieren para una polvo pero para nada mas porque no te ven formal, las que van de sobradas porque les han entardo todos los del bar y salen a rechazar, las que te dicen solo busco sexo y te llaman el domingo para invtarte al cine, las que te cuentan las miserias de su ex y luego pasan de sexo, las del "me llamaras?" a las que porsupuesto nunca jamas llamé y un largo etcetera de taradas mentales, egoistas, y ceros a la izquierda que con el tiempo me resultaron tan predecibles que perdí el interés por seducirlas.
Simplemente jugaba mis cartas como un autómata, dos sonrisas por aquí, un susurro por allá un par de amagos de irme, y mucho alcohol, siempre alcohol. Y otra muesca en mi revolver, otra cama de la que escapar, otra anecdota que contar entre risas y otra cara que ya no recordaría el martes de la semana siguiente.
Recuerdo el día que mas se nos fue la o
LLa y que acabó por dinamitar las vias de aquel decadente tren de vida en el que me movía a todo trapo; aquí pido un poco de comprensión, el que no crea la historia que cuento que al menos trate de apreciarla como un relato fantástico propio de la mente de un enfermo y con eso me daré por satisfecho.
Teniamos una antigua discoteca alquilada por cuatro perras bastante grande al lado de una de las zonas de marcha de la cuidad, la cual utilizabamos como base de operaciones, ese día habiamos invitado a tres grupos de chicas direfentes a beber con nosotros: uno de chicas de 16 sacado de una página tipo votamicuerpo, otro de compis de la facultad de uno de mis amigos, y un tercero que nos surgió en un bar de fiesta entrandoles a unas desconocidas.
Las habiamos repartido para que no coincidieran casi por edades, primero vinieron las 16 añeras, nosotros rondando los 21 años de edad pero no daba mucho el cante. Tras los tipicos juegos estupidos de beber que teníamos mas que ensayados para ponerlas cachondas comenzo el magreo, aquello era un todos con todas a ritmo frenetico de musica tecno. Boca va y boca viene, es acojonante como las mujeres se deshacen de sus prejuicios cuando ven que sus amigas hacen lo propio, asi que solo había que convencer a una de hacer algo para que el resto le siguiera cual ovejas; consigo con poco esfuerzo llevarme a una a los baños, se pone una raya de coca, me ofrece pero la rechazo, me empiezo a odiar por ver a alguien tan joven en esa situación pero la idea se desvanece pronto como el flash de una cámara de fotos al calor de mis hormonas, esa noche soy yo el lobo, que le jodan a sus problemas!!pienso. Me la empieza a comer, solo quiero sexo, si no soy yo sera otro, si no es aqui sera en el bar de la esquina da igual lo habra hecho cientos de veces, es una puta, como todas...
Acaba, volvemos con todos, entre risas y aplausos. Cara de poker. (esto no esta molando nada y no se porqué) La miro, joder si es una puta cria!, me maldigo para mis adentros...
Sigo bebiendo mmmm alcohol. Dan las doce y se tienen que ir a casa porque tienen que estar a la una... las acompañamos y llaman a la puerta, son las amigas de la facultad, se cruzan, se miran en silencio por unos segundos que se me hacen eternos creando una de las situaciones mas extrañas que he vivido en mi vida, un grupo de chicas saliendo y otro entrando, TODOS sabemos lo que ha pasado, TODOS sabemos lo que va a pasar y a NADIE le importa, no significamos nada, somos seres vacios, primarios utilizables y utilizados. Todo es falso. No hay victoria en esto. Nada de lo que sentirse orgulloso...
Algo en mí esta apagandose para no volver jamás y la noche solo acaba de empezar...
(si os mola os doy moar)
Muerto por dentro+
Asiduo
Clásico
Muerto por dentro
Leyenda
Forero del todo a cien
Freak
