Yo en las últimas dos giras viví demasiados momentos subrealistas como para querer volver a vivirlas en primera fila rodeado de friki grupis.
- Gira 2008, A Coruña (Extremoduro y Memoria de Pez de teloneros):
Como suele ser clásico en este tipo de eventos, quedé con un colega unas 4 horas antes de la hora de entrada del concierto para meternos en un bar cerca de los aledaños del Colisseum y ponernos a tono a base de Matusalem con Coca Cola. Cuando íbamos por el cuarto brebaje, escuche atónito la siguiente conversación de una pareja que estaba a nuestro lado.
Zorrurpia - "Tio se te nota muy nervioso ¿que te pasa?".
Gayer - "Es que ya sabes que significa Extremoduro para mí, no he comido y no me entra nada ahora".
Zorrurpia - "Pero tómate aunque sea una cerveza".
Gayer - "No, Extremoduro es una experiencia que hay que vivir sereno para poder disfrutar en pleno" ...
¿¿¿¿Ein???? ¿¿¿¿¿¿Que Extremoduro se disfruta sereno???????!!!! 
53:53.
Fuimos a otro bar y ya cuando dio la hora nos metimos en el concierto. Memoria de Pez ya estaba tocando y se veía ya desde el principio como iba el percal: niñas de 16 años sentadas delante de las vayas sin hacer puto caso al telonero y ocupando el mayor sitio posible para que quede claro que "eso está reservado", frikazos con camisetas de Extremoduro recien compradas, gente que se veía claramente que no tenían ni idea a lo que iban a asistir pero en el momento que entraron por la puerta se convirtieron automáticamente en el mayor fan".
Se fueron Memoria de Pez (buen directo por cierto) y salió Extremoduro. Yo acudí raudo y veloz a primera fila a ver si encontraba gente que viviera el concierto en condiciones, con sus saltos, sus empujones, sus gritos... y me encontré con que cuando intente abrirme paso una niñata me dice "¿a donde vas? ¿no ves que delante no hay sitio que hay gente?". Ni puto caso le hice y me puse en primera fila a hacer el loco. Al poco tiempo se acerco a mi un pajillero (y encima NEGRO para más delito) a decirme que si podía dejar de saltar que sino no podían ver bien el concierto, le dije que tenía tres opciones, volver a la selva, salir de allí y buscar un concierto mas acorde a sus gusto tipo Andy y Lucas o dejarme de molestar con gilipolleces si no quería recoger sus dientes del suelo (entre el alto estado de intoxicación etilica que llevaba y la euforia, me daba igual que fuera un niñato o un orangutan de discoteca). Creo que al final eligió la opción A por que no lo volví a ver en lo que quedó de concierto.
Después de 5 temas, ver que delante no había ABSOLUTAMENTE NADIE que se supiera dos canciones seguidas, que no votaban y que la máxima preocupación de alguno / alguna era estar bien sujetos a la vaya para que no les quitaran el sitio y poder lucir en la foto, tomé la opción de ir donde estaban mis colegas, fondo a la izquierda, que por sueste estaba plagada de "vieja guardia" de asiduos a conciertos de este pelaje, donde mejor se vivía el concierto a pesar de no estar tan cerca del escenario.
- Robando Perchas en el Hotel (A Coruña, 2012):
Aquí ya comenté que tomé la decisión de ir a las últimas filas pero, otra vez en el camino hacia el bar asistimos a otra conversación de corte subrealista
Ese día daba la casualidad que coincidía con el Celta - Deportivo. El colega con el que iba al concierto y yo tomamos la decisión más sensata y la que tomó la mayor parte de gente que vimos que iba hacia allí, o sea, ir a un bar cerca a ver el partido, pillarse un buen ciego e ir después al concierto.
Cogimos el bus, petado de gente, y volvimos a sufrir el fenómeno "gruppy"
Choni 1 - "Jo tia, tengo ganas de llegar, el bus va petado de gente"
Choni 2 - "Ya, pero fíjate, estos no irán ni al concierto, seguro que serán de esos que EN LUGAR DE ESTAR ESPERANDO EN LA PUERTA DOS HORAS ANTES PARA PILLAR SITIO, IRÁN AL BAR A BEBER Y VER EL PARTIDO,".
Choni 1 - "Tienes razón, está gente no sabe lo que es Extremoduro".
Visto estas cosas, no solo es que hayamos cambiado nosotros y Extremoduro, sino que se a acoplado un público gruppy la mar de gilipollas que se piensan que van a ver a Dani Martín.