A mí no es que me quite el sueño, ni que quiera salvar a una dama (nada más lejos de la realidad), pero por nuestro pasado común y por las putadas que nos hicimos me veo en cierta obligación de hacerlo... bueno, no es obligación, es más bien un deber de puto subnormal. Me cuesta dejar en la estacada a la gente lo merezca o no. Ella espera que le diga lo que vale, que puede hacerlo, que una vez superado esto encontrará trabajo y tendrá una vida normal... pero todo son una sarta de disparates sin sentido. Está abocada a la puta ruina.