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Bueno, vamos por partes. Hacía tiempo que quería hablar del Loco por diferentes motivos, y han salido todos los temas y tópicos que envuelven a Loquillo en lo que llevamos de hilo.
Buen tipo, no lo sé, es un prepotente y un chulo, y eso me mola. Cantando lo que canta no le pegaría ser un misionero o un puto hippie. Me mola su actitud y su arrogancia, porque le pegan al personaje creado. Buen cantante, no, para nada. Pero a veces de nada sirve cantar bien sin actitud. A este de lo segundo le sobra.
Así es, pero no todo fue Sabino. Sabino se largó justo antes de grabar el mítico directo "A por ellos que son pocos y cobardes", y ese directo grabado en la sala Zeleste de Barcelona, a pesar de sonar como el puto culo, es de los más míticos de este país. Un repertorio perfecto con una banda detrás que acojonaba a cualquiera. Sin Sabino todo parecía perdido, pero quieto parado, se sacaron de la manga un siguiente trabajo a la altura de los clásicos, con un sonido fuerte, duro, rozando el Hard Rock, y una mala leche sin parangón. Estoy hablando de "Hombres", un trabajo excelente. Eso si, después de ahí, y tras la disgregación de los Trogloditas por músicos mercenarios, todo se fue al carajo, y Gabriel Sopeña y alguno más le metieron en la cabeza el rollo de los poetas y tal. Que por cierto, los dos discos de poesía que grabó, la lírica está metida en la música con calzador, vamos, que no, que no queda bien.
Es que en directo, no había banda de ningún estilo que hiciera sombra a los Trogloditas. Jordi Vila (ahí tus huevos), tenía una pegada brutal (lástima que fuera un yonqui), Sergio Fecé es uno de los mejores teclistas del país, Josep Simón un bajista solvente y que decir de la guitarra de Puigdomenech, que te podía sacar desde el metal más pesado, pasando por el Jazz o canción francesa. Yo los vi en su época y me dejaron acojonado, que actitud, que directo, que mala leche. ¿Recuerdas aquel anuncio que sacaron que salía la foto en el libreto interior del directo "A por ellos..."? criticaban al gremio musical con sus campañas contra las drogas, y salían ellos sentados alrededor de una mesa con botellas de whisky y farlopa, y el eslogan era: "no te drogues, o acabarás como nosotros". A cojones no les ganaba nadie.
Los clásicos todos eran de Sabino, un tío que componía solo y cuando estaba drogado, pero hay muchos temas que Loquillo compuso junto a Fecé y Puigdomenech. Y vuelvo a citar "Hombres", un disco donde ya no estaba Sabino, y que está a la altura y supera a los clásicos.
DEcir algo malo de Loquillo hace llorar al niño Jesús: buen tipo y buen cantante.
Decir que tenía talento Ramoncín también: malo en lo personal y en lo musical (de él solo salvaría su Felisín el vacilón, el resto todo es morralla oportunista)
Buen tipo, no lo sé, es un prepotente y un chulo, y eso me mola. Cantando lo que canta no le pegaría ser un misionero o un puto hippie. Me mola su actitud y su arrogancia, porque le pegan al personaje creado. Buen cantante, no, para nada. Pero a veces de nada sirve cantar bien sin actitud. A este de lo segundo le sobra.
Pues a este lo iba a poner hoy.
Toda la razón, otro payaso con talento que no ha sacado nada decente en 20 años y vive del personaje creado.
Así es, pero no todo fue Sabino. Sabino se largó justo antes de grabar el mítico directo "A por ellos que son pocos y cobardes", y ese directo grabado en la sala Zeleste de Barcelona, a pesar de sonar como el puto culo, es de los más míticos de este país. Un repertorio perfecto con una banda detrás que acojonaba a cualquiera. Sin Sabino todo parecía perdido, pero quieto parado, se sacaron de la manga un siguiente trabajo a la altura de los clásicos, con un sonido fuerte, duro, rozando el Hard Rock, y una mala leche sin parangón. Estoy hablando de "Hombres", un trabajo excelente. Eso si, después de ahí, y tras la disgregación de los Trogloditas por músicos mercenarios, todo se fue al carajo, y Gabriel Sopeña y alguno más le metieron en la cabeza el rollo de los poetas y tal. Que por cierto, los dos discos de poesía que grabó, la lírica está metida en la música con calzador, vamos, que no, que no queda bien.
A mí hoy en día es de esas personas que me gusta mucho escuchar.
De joven vivió la época de los 80 en pleno desenfreno, lo que le convirtió en un tío inestable nivel Dios por todo ese cúmulo de cosas, lo que no quita que musicalmente Loquillo y Trogloditas es de lo que más me gusta con diferencia de toda aquella vorágine musical.
Tuve oportunidad de verlos en directo un par de veces y eran cojonudos, el Loco bebiendo Jack Daniels en pleno directo de la botella con dos cojones, muy carismático y molón, el tío tenía ese toque que le hacía ganarse al público con la gorra, algo poco común en el panorama patrio, y más con una calidad vocal de lo más discreta, siendo generosos. Y el repertorio funcionaba en directo a las mil maravillas. "La mataré" es un temazo del copón, hoy en día esa letra sería impensable. Pero es que esa música tan enérgica y potente era producto precisamente de esas circunstancias. Si le quitas el desfase de la época, todos se amariconan.
Es que en directo, no había banda de ningún estilo que hiciera sombra a los Trogloditas. Jordi Vila (ahí tus huevos), tenía una pegada brutal (lástima que fuera un yonqui), Sergio Fecé es uno de los mejores teclistas del país, Josep Simón un bajista solvente y que decir de la guitarra de Puigdomenech, que te podía sacar desde el metal más pesado, pasando por el Jazz o canción francesa. Yo los vi en su época y me dejaron acojonado, que actitud, que directo, que mala leche. ¿Recuerdas aquel anuncio que sacaron que salía la foto en el libreto interior del directo "A por ellos..."? criticaban al gremio musical con sus campañas contra las drogas, y salían ellos sentados alrededor de una mesa con botellas de whisky y farlopa, y el eslogan era: "no te drogues, o acabarás como nosotros". A cojones no les ganaba nadie.
Desde que no tiene a Sabino para escribirle las canciones
Ahora me entero de que Loquillo ha compuesto algo. Su mejor época fue con los temazos que hacía Sabino, y de mayor se ha arrimado a poetas para que le hagan las letras, pero no sabía que él mismo compusiera letra o música.
Los clásicos todos eran de Sabino, un tío que componía solo y cuando estaba drogado, pero hay muchos temas que Loquillo compuso junto a Fecé y Puigdomenech. Y vuelvo a citar "Hombres", un disco donde ya no estaba Sabino, y que está a la altura y supera a los clásicos.