NOCHEBUENA: Mujer e hijas, padre y madre, hermana y nuevo novio, tío y tía zumbada (mucho más que
@dakilla y medicada hasta las trancas) primo y mujer e hijo. Con tronca de Nadal y todo, bro.
Pros: Lo que esta gente aguanta bebiendo no está escrito. Descalificaciones personales y discusiones a insulto pelao sin ningún rubor y al mismo tiempo fraternales brindis con los mejores vodkas (del Bila) de Ucrania y otras bebidas de mierda. De hecho en el esmorsaet ya ha caído cava y vodka como para tumbar tres cenobitas y dos ferris.
Contras: Están jodidamente locos y a veces no sabes por donde te van a salir. Me han dicho que el crío de mi primo es un llorón y hay una hoguera peligrosamente cerca a la que puede caer si se pone tonto.
NAVIDAD: Casa de suegros con suegros, mujer e hijas, cuñado y novia.
Pros: Ninguno.
Contras: Hay que esperar a que vengan no sé qué tíos a tomar café (espero que el miedo covidiano de La Sexta nos libre este año) y son casi de la misma opción política que yo, así que tengo que esforzarme mucho para llevarles la contraria, como es costumbre en estos actos.
NOCHEVIEJA: Seguramente en casa comiendo olivas en lugar de uvas y a ver si da las campanadas Bob Esponja. Posibilidad de ir como Massiel a la hora de cenar: 97%.