RoderickUsher
Veterano
- Registro
- 4 Sep 2005
- Mensajes
- 1.330
- Reacciones
- 165
Pues la verdad no hay mucho que contar. No tengo internet porque ya no tengo dinero. No tengo dinero porque no trabajo. No trabajo porque no tengo motivación. No tengo motivación por ser adicto al Valium y a un par de cosas más.
Aun así, sigo teniendo mucha fe en Putalocura. Estoy bastante seguro de que en vuestra vida han ocurrido han acontecido cosas en las que ya no os parais a pensar porque os habeis centrado en ser unos fracasados, en aceptar vuestro rol (a)social de freaks que, a lo mucho, tienen la mente de los autores de la masacre de Columbine, han perdido toda la noción del tiempo, padecen trastornos graves de sueño y seguramente morirán antes de los 40 años a causa de serios problemas cardíacos por una mala alimentación.
Tengo algunas cosas que decir que no os interesan. No debería existir un hilo así. No me juzgueis por ello, ya que es muy tarde (temprano) y si sigo masturbándome acabaré desgarrandome el prepucio o acumulando tanto sudor que tendré que tirar mis pantalones a la basura. Pues bien, os contaré algunas cosas y os invito a que añadais cualquier anécdota.
A principios de la semana pasada, estuve acordándome de una chica que, hace dos años, fue amiga mia. No fue una sensación agradable, ya que es una persona bastante detestable, falta de personalidad propia y autoestima, que acabó dandole lástima a muchas personas. Pues bien, iré al grano: he pensado en matarla. Hace unos días que estoy buscándola para hablar con ella un rato, tomar un café, que me cuente cómo le va, por donde va, donde vive... Gracias a algunas conferencias de Psicología Forense, aprendí que el asesino perfecto es el psicópata (que es metódico y tiene un plan previo) que aprende a parecer un psicótico (cuyo comportamiento es desorganizado e impulsivo).
Mi plan es muy simple. Se basa en sentarme cómodamente, un fin de semana, cerca de su casa con unos guantes de latex transparentes y un cuchillo panadero. Cuando volvierá de salir, me acercaría y le cortaría la yugular.
El cuchillo habría sido previamente comprado en una tienda pequeña no demasiado centralizada. Esto último es para no usar un objeto cercano a mí ni dejar ninguna huella propia. Lo que intento es ser rápido, simple y no dejar ningun nudo que me relacione con su muerte. Tras su asesinato, quemaría los guantes de latex y rompería el cuchillo, deshaciendome de los restos de ambos objetos en un contenedor de las afueras de la ciudad. En esto me tomaré mi tiempo, y los viajes para eliminar estas pruebas serán justificados.
Es altamente posible que no ocurra nada, ya que todo este delirio es fruto de un trastorno de personalidad. Lo divertido es que son los trastornos de personalidad, tales como el obsesivo-compulsivo, los que llevan a personas aburridas como yo a cometer crímenes tan atroces, estúpidos e irracionales como el que he planeado.
Vosotros me direis.
Aun así, sigo teniendo mucha fe en Putalocura. Estoy bastante seguro de que en vuestra vida han ocurrido han acontecido cosas en las que ya no os parais a pensar porque os habeis centrado en ser unos fracasados, en aceptar vuestro rol (a)social de freaks que, a lo mucho, tienen la mente de los autores de la masacre de Columbine, han perdido toda la noción del tiempo, padecen trastornos graves de sueño y seguramente morirán antes de los 40 años a causa de serios problemas cardíacos por una mala alimentación.
Tengo algunas cosas que decir que no os interesan. No debería existir un hilo así. No me juzgueis por ello, ya que es muy tarde (temprano) y si sigo masturbándome acabaré desgarrandome el prepucio o acumulando tanto sudor que tendré que tirar mis pantalones a la basura. Pues bien, os contaré algunas cosas y os invito a que añadais cualquier anécdota.
A principios de la semana pasada, estuve acordándome de una chica que, hace dos años, fue amiga mia. No fue una sensación agradable, ya que es una persona bastante detestable, falta de personalidad propia y autoestima, que acabó dandole lástima a muchas personas. Pues bien, iré al grano: he pensado en matarla. Hace unos días que estoy buscándola para hablar con ella un rato, tomar un café, que me cuente cómo le va, por donde va, donde vive... Gracias a algunas conferencias de Psicología Forense, aprendí que el asesino perfecto es el psicópata (que es metódico y tiene un plan previo) que aprende a parecer un psicótico (cuyo comportamiento es desorganizado e impulsivo).
Mi plan es muy simple. Se basa en sentarme cómodamente, un fin de semana, cerca de su casa con unos guantes de latex transparentes y un cuchillo panadero. Cuando volvierá de salir, me acercaría y le cortaría la yugular.
El cuchillo habría sido previamente comprado en una tienda pequeña no demasiado centralizada. Esto último es para no usar un objeto cercano a mí ni dejar ninguna huella propia. Lo que intento es ser rápido, simple y no dejar ningun nudo que me relacione con su muerte. Tras su asesinato, quemaría los guantes de latex y rompería el cuchillo, deshaciendome de los restos de ambos objetos en un contenedor de las afueras de la ciudad. En esto me tomaré mi tiempo, y los viajes para eliminar estas pruebas serán justificados.
Es altamente posible que no ocurra nada, ya que todo este delirio es fruto de un trastorno de personalidad. Lo divertido es que son los trastornos de personalidad, tales como el obsesivo-compulsivo, los que llevan a personas aburridas como yo a cometer crímenes tan atroces, estúpidos e irracionales como el que he planeado.
Vosotros me direis.