Cheshire´s Katua
Prima Donna del Cocoguá
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- 4 Mar 2007
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Abro este hilo para hacer una recopilación de todos aquellos monumentos, obras de arte y edificios que te dejan cara de GÑÉ cuando lo ves. Para que todos sepamos de lo que estamos hablando, vamos a centrarnos en estas dos situaciones:
1.- Pues no era para tanto: ¿Quién no se ha dejado unos cuantos lerus en un museo, o se ha tragado una fila de doscientas personas, para ver ese cuadro tan famoso, y al verlo has pensado que mejor haberlos invertido en una botella de whisky? Tras perder el tiempo y el dinero, piensas "¿y tanto para esto?", y te cuesta hasta reconocer en voz alta que te la han metido doblada. Es el turismo para borregos.
Que recuerde ahora, he vivido esta situación sobre todo en tres ocasiones. Han sido más, por ejemplo cuando me recorrí todas las salas del Pompidou para ver un 95% de mierda que no colgaría ni en el trastero, pero lo más frustrante me pasó con:
- El David de Miguel Ángel. Del resto de la galería de la Academia no me esperaba gran cosa, y en efecto es una soberana mierda, pero el David esperaba que, como mínimo, me impresionara un poco. Nada.
La réplica en la piazza dela Signoria está chula, y ahí tendría que estar el original, pero se empeñaron en ponerlo en la galería de la Academia, que es un edificio de mierda con un interior peor todavía. Hora y media de fila y ¿10 euros? para esto.
Y para colmo, cuando fui yo estaban promocionando una exposición de fotografía y al lado del David había dos cartelones custodiándolo como de ocho metros de altura y unas fotos así como modernas que le hacían perder todavía más encanto a la cosa. Fuego purificador para el sucnor que puso los cartelones ahí y para el que sacó el David de su sitio.
- La capilla Sixtina. Me esperaba yo qué sé, y tras dos horas pululando por el Museo Vaticano arrastrada por una marea de Petisos Carambanales, llego ahí y casi me cago en todo lo que se menea.
Que sí, que la pintura es una preciosidad, pero desmerece mucho en esa sala. Es la iluminación o algo, pero si lo llego a saber para rato me paso toda la mañana en el Vaticano para verla. Y hasta el culo de gente ahí parada mirando al techo y con la misma cara de pardilla que yo, pero el turismo para borregos es así.
- La Mona Lisa.
Hombre, el Louvre merece la pena verlo, pero el que vaya sólo para ver este cuadro, que se ahorre el viaje. Desde luego si es tan famosa es por toda la paranoia que envuelve la vida de Leonardo, pero como cuadro no vale un cagarro. Es pequeño y tiene siempre cien cabezas de japoneses delante. En cuanto se va uno, hay otro que se escurre con su cuerpecillo entre la gente para sustituirlo.
Y ahora pensaréis que si antes he visto fotos y sé las medidas de la obra, ya podría hacerme a la idea de lo que es. Pues no, la cosa es que todo esto pierde al natural para mi gusto. Sin embargo cuando vi el Apolo y Dafne de Bernini, que no me esperaba gran cosa, casi se me caen las bragas al suelo. IMPRESIONANTE.
Ahora vamos con el otro tipo de PERO ¿ESTO QUÉ ES? que son monumentos, no decepcionantes, sino horribles directamente.
2.- ¿Esto quién coño lo ha pagado y por qué? Me refiero a cosas feas. Pero feas de verdad. Feas o fuera de contexto. Cosas que las ves y piensas que ningún humano sería capaz de hacerlo y menos de pagarlo para ponerlo en nuestras calles/museos, o de colocarlo ahí y no en otro sitio. Cosas feas o que afean.
Por ejemplo, la herradura de Tuuri en Finlandia.
La hostia. O el mamotreto de Montparnasse, que en otro barrio no estaría mal, pero que jode las vistas de medio Paris...
A nivel nacional tenemos las esculturas de la comunidad murciana, como por ejemplo este virus del sidra empalado.
Y, qué coño en Zaragoza también hay cosas horribles.
Parece la gráfica del Euribor pero no, es la puesta de sol en el Moncayo.
Y hablando de Zaragoza, la Virgen del Pilar siempre decepciona porque es muy chiquitica, y lo mismo pasa con el Torico de Teruel (que por algo se llama Torico).
Amigos, os animo a que compartáis vuestros momentos GÑÉ con nosotros. No os limitéis a ponerme a caldo porque no me guste la capilla sixtina ;)
1.- Pues no era para tanto: ¿Quién no se ha dejado unos cuantos lerus en un museo, o se ha tragado una fila de doscientas personas, para ver ese cuadro tan famoso, y al verlo has pensado que mejor haberlos invertido en una botella de whisky? Tras perder el tiempo y el dinero, piensas "¿y tanto para esto?", y te cuesta hasta reconocer en voz alta que te la han metido doblada. Es el turismo para borregos.
Que recuerde ahora, he vivido esta situación sobre todo en tres ocasiones. Han sido más, por ejemplo cuando me recorrí todas las salas del Pompidou para ver un 95% de mierda que no colgaría ni en el trastero, pero lo más frustrante me pasó con:
- El David de Miguel Ángel. Del resto de la galería de la Academia no me esperaba gran cosa, y en efecto es una soberana mierda, pero el David esperaba que, como mínimo, me impresionara un poco. Nada.
La réplica en la piazza dela Signoria está chula, y ahí tendría que estar el original, pero se empeñaron en ponerlo en la galería de la Academia, que es un edificio de mierda con un interior peor todavía. Hora y media de fila y ¿10 euros? para esto.
Y para colmo, cuando fui yo estaban promocionando una exposición de fotografía y al lado del David había dos cartelones custodiándolo como de ocho metros de altura y unas fotos así como modernas que le hacían perder todavía más encanto a la cosa. Fuego purificador para el sucnor que puso los cartelones ahí y para el que sacó el David de su sitio.
- La capilla Sixtina. Me esperaba yo qué sé, y tras dos horas pululando por el Museo Vaticano arrastrada por una marea de Petisos Carambanales, llego ahí y casi me cago en todo lo que se menea.
Que sí, que la pintura es una preciosidad, pero desmerece mucho en esa sala. Es la iluminación o algo, pero si lo llego a saber para rato me paso toda la mañana en el Vaticano para verla. Y hasta el culo de gente ahí parada mirando al techo y con la misma cara de pardilla que yo, pero el turismo para borregos es así.
- La Mona Lisa.
Hombre, el Louvre merece la pena verlo, pero el que vaya sólo para ver este cuadro, que se ahorre el viaje. Desde luego si es tan famosa es por toda la paranoia que envuelve la vida de Leonardo, pero como cuadro no vale un cagarro. Es pequeño y tiene siempre cien cabezas de japoneses delante. En cuanto se va uno, hay otro que se escurre con su cuerpecillo entre la gente para sustituirlo.
Y ahora pensaréis que si antes he visto fotos y sé las medidas de la obra, ya podría hacerme a la idea de lo que es. Pues no, la cosa es que todo esto pierde al natural para mi gusto. Sin embargo cuando vi el Apolo y Dafne de Bernini, que no me esperaba gran cosa, casi se me caen las bragas al suelo. IMPRESIONANTE.
Ahora vamos con el otro tipo de PERO ¿ESTO QUÉ ES? que son monumentos, no decepcionantes, sino horribles directamente.
2.- ¿Esto quién coño lo ha pagado y por qué? Me refiero a cosas feas. Pero feas de verdad. Feas o fuera de contexto. Cosas que las ves y piensas que ningún humano sería capaz de hacerlo y menos de pagarlo para ponerlo en nuestras calles/museos, o de colocarlo ahí y no en otro sitio. Cosas feas o que afean.
Por ejemplo, la herradura de Tuuri en Finlandia.
La hostia. O el mamotreto de Montparnasse, que en otro barrio no estaría mal, pero que jode las vistas de medio Paris...
A nivel nacional tenemos las esculturas de la comunidad murciana, como por ejemplo este virus del sidra empalado.
Y, qué coño en Zaragoza también hay cosas horribles.
Parece la gráfica del Euribor pero no, es la puesta de sol en el Moncayo.
Y hablando de Zaragoza, la Virgen del Pilar siempre decepciona porque es muy chiquitica, y lo mismo pasa con el Torico de Teruel (que por algo se llama Torico).
Amigos, os animo a que compartáis vuestros momentos GÑÉ con nosotros. No os limitéis a ponerme a caldo porque no me guste la capilla sixtina ;)