@Slk @curro jimenez os encontráis esto en el metro un día cualquiera. ¿Actuaríais de alguna forma?
Quizá te sirva esto:
Altura de Santa Eulalia. Chaval que no come mucho jamón.
Cincuentón que le dice no sé qué de que no te sientas bien y apoyas el pie no sé dónde.
Escucho los gritos.
El chaval se lo quería comer. Los tengo que separar. El chaval con que vamos fuera a la calle que te reviento (al cincuentón) a grito pelao.
Estaba fuera de sí, y ante mi le decía "si él (o sea, yo, Slk) me dice que no me siente así yo le hago caso, pero TÚ no eres nadie aquí! Bla bla bla".
Quiero decir, los seguratas en "la Barcelona de la Colau" a veces nos sentimos muy sin autoridad, gafas de madera, y todo eso, pero en realidad exageramos en cierta medida.
Nos hacen más caso de lo que a menudo reflexionamos. Las hostias que no hemos recibido solo por llevar ese uniforme a veces no las vemos, que son muchas si has estado tanto tiempo como es mi caso.
Porque en realidad uno ha pasado tensión, uno ha pasado discusiones, uno ha pasado tener que comerle la oreja a este tipo de gente, y nunca me han pegado por ello.
Unos han hecho caso sin más, a otros les ha costado poniéndote a prueba o tratando de llevar la situación a lo máximo, pero es eso, no vemos a veces desde nuestra situación que no te han metido porque es un marrón, está todo grabado, con un walkie te pueden aparecer (o no) dos o tres de los míos en un minuto dependiendo de donde estés y cuando, etc.
Lo que puedo deciros a lo largo de mi larga experiencia es eso, que ellos toleran MUCHO MÁS que un empleado o policia les diga a que les diga un ciudadano común.
Por ejemplo, entienden mucho más su derrota sin oponer resistencia cuando los pillas en un control con interventores que cuando los pillas tú solo por ahí "a pelo" colándose, y entienden mucho más esto último que el ciudadano común que les dice "oye no te cueles".
Eso no significa que nunca la líen en el primer caso, pero lo que he visto en el tercer caso no lo he visto en los anteriores. En el tercer caso he llegado yo a levantar a un tío que lo habían dejado dormido de un puñetazo porque les dijo "oye no os coleis pagad como todo el mundo bla bla".
Otra ley (lógica) es que su resistencia es proporcional a lo que hayan hecho. No es lo mismo encenderse un cigarro en el andén que robarle a una vieja con el cuchillo. Y a su vez es proporcional a la situación de sus oponentes. No es lo mismo un puto segurata solo a las diez de la noche en una estación muerta de hambre que un equipo de cuatro en una operativa de Plaza Cataluña a las nueve de la mañana con dos secretas apoyando.