Earth Wind and Fire
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Yo ya partía de esa diferencia que estas contando. Pero lo llevo más allá. Da igual como comiences, si en Tinder o en la vida real.Como que qué diferencia hay, ¿es que no se ve una diferencia grande entre una relación que ha comenzado en persona frente a una que no? En la primera ya sabes cómo es, la realidad física sin filtros, la realidad de la atracción sin filtros tampoco, cómo se mueve, cómo habla, cómo camina, cómo huele incluso; en la primera incluso puede que haya ya habido contacto físico real, un morreo, un beso, la atracción es real y se basa en la realidad.
En Tinder partes muchísimo, pero muchísimo, más atrás. Nada de todo lo anterior se ha dado, nada de todo eso existe, y encima es posible que no se vaya a producir, puesto que esa conversación antes de la cita no es ni más ni menos que las mil pruebas de Astérix para tener el primer encuentro personal. En cambio en la primera todo eso ya te lo has ahorrado, has empezado directamente en lo personal, sin las tediosas fases previas, sin que te hayan eliminado -lo más probable-, y habiéndote ido a casa en el primer partido con el marcador a favor.
Vamos, es que me parece una diferencia como de la noche al día. Como si me dices que qué diferencia hay entre estar clasificado de oficio para el Mundial y tener que jugar las eliminatorias previas en el grupo donde han caído Alemania y Francia.
Al final el camino o el protocolo es el mismo. Intercambias el whatsapp y tienes que estar ahí dando y soportando la matraca, hacerles casito y luego un día, con suerte, igual ya quedas y follas o igual no. Pero ahí que has estado picando piedra.
Preguntas si ya solo se liga por Tinder, y si, cada vez más gente empieza a ligar por ahí, pero en realidad, hoy en día donde todo el mundo liga es en el whatsapp. Independientemente de cómo te hayas conocido, en un bar, en el trabajo o en una app.
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