Worlds Collide - Apocalyptica
Aún recuerdo lo que me sorprendió descubrir hace años aquel Plays Metallica by Four Cellos con el que el por entonces cuarteto finlandés Apocalyptica consiguió ganarse un enorme éxito y prestigio internacional versionando clásicos de los reyes del trash americano. Con el paso de los años, la agrupación se ha encontrado en constante cambio, tanto en su enfoque musical como en el número de sus integrantes, hasta llegar once años después de su álbum debut a este Worlds Collide.
Evolución para unos, desacierto para otros; el caso es que el sonido actual de la banda dista mucho del que podía escucharse en sus primeros trabajos, sin batería y por supuesto sin ningún tipo de vocalista colaborador. Sin embargo, en este disco encontramos hasta cuatro temas cantados, y una batería que en ocasiones oculta demasiado lo que realmente debería ser el centro, los violoncelos. Es cierto que así el disco suena rockero y accesible, pero también hace perder fuerza al gran elemento distintivo de esta formación.
Anunciadas a bombo y platillo, las colaboraciones son, en mi opinión, el punto más flojo de un disco de numerosos altibajos. I’m Not Jesus, el tema cantado por Corey Taylor de Slipknot es de lo más pobre que ha hecho la banda, muy poco ambicioso y buscando sonar a single facilón con el que llamar la atención de la gente hacia el disco. Esa misma sensación de falta de ganas por profundizar en la música y simplemente vender canciones de rock digeribles sin más es la que desprenden los otros tres temas cantados, incluyendo la floja versión que hacen del clásico tema Heroes de David Bowie con Till Lindemann de Rammstein al micro.
Sin embargo, dejando a un lado estas cuatro pistas, el resto del disco ya no suena tan mal, y la única pega que le encuentro es la que he comentado antes de la percusión que enmascara en muchas ocasiones a las cuerdas. Habrá quien lo prefiera así, no me cabe duda, pero en mi opinión esta banda sonaba mucho mejor antes de que las baquetas pasaran a formar parte de su instrumentación.
Fuera como fuese, la selección de temas de este álbum no sorprenderá a quien ya conozca su discografía, alternando temas muy potentes en los que los cellos rugen como verdaderos truenos, frente a otros mucho más melódicos y que nos permiten apreciar más a las claras el tipo de instrumento que estamos oyendo. Canciones de mucha fuerza como Grace, chirriantes como Ion o progresivas como Peace, que conforman un disco que deja un poso agridulce debido a unos cuantos temas que directamente eliminaría del mismo.
Vaya portada más cutre y más moña.
Liquid Tension Experiment vuelven a los escenarios el año que viene
Si hace unas semanas hablábamos de la publicación de nuevo material de este supergrupo con un disco de jam sessions inéditas titulado Spontaneous Combustion, las buenas noticias sobre este “dream team” de virtuosos del rock progresivo siguen llegándonos ahora que se ha confirmado su regreso a los escenarios, para deleite de todos los que disfrutamos de su perfeccionista forma de hacer música.
Por el momento, sólo hay una cita anunciada para el próximo mes de Junio en el festival norteamericano NEARfest, donde serán cabezas de cartel de la décima edición de dicho evento. No hay nada más anunciado por ahora, pero una gira mundial de estos cuatro monstruos sería una grandísima noticia. Y puestos a pedir, un Liquid Tension Experiment 3 tampoco estaría nada mal…
Por el momento, recordemos que tres de los cuatro miembros de este supergrupo se encuentran actualmente de gira con su banda a tiempo completo, Dream Theater, lo que les traerá a nuestro país el próximo mes de Noviembre, descargando en Barcelona, Madrid y Bergara durante los días 2, 3 y 4, respectivamente. Si aún no os habéis hecho con vuestra entrada, todavía estáis a tiempo, porque os aseguro que el despliegue de técnica que esta gente realiza sobre el escenario merece la pena verlo.