wetamir rebuznó:Dios, qué gracioso es el ALex de la Iglesia, me ha gustado mucho el video.
Bueno, aún ayer ví Death Proof bajada de la mula, la verdad es que es todo lo que decís y peor aún.
La peli tiene aciertos estéticos muy superficiales: los créditos del principio, los malos cortes, el grano chungo de la pelí... pero es lo que comentais, no se sostiene.
Parece que por un lado Tarantino haya tratado de rodar un "Reservoir Dogs" para tias y una carta de amor/homenaje para Zoe Bell, por otro lado ha hecho un thriller mediocre basándose en películas de culto chungas y, finalmente, una de las lecturas del film parece un discurso sobre la guerra de sexos y el cambio de roles que estamos viviendo.
Las chicas de la película son despampanantes, son tias muy duras, seguras de sí mismas, triunfadoras en pleno esplendor de su atractivo que no tienen problema en humillar y frustrar a los tios a su alrededor.
Van sobradas, son sexys, carismáticas, la nueva mujer sexualmente independiente y aún así, insatisfecha ya que el hombre no ha evolucionado aún para estar a su altura. Los tios que tratan de follarlas son unos babosos lloricas, pagafantas.
Por otro lado Kurt "Stuntman Mike" Russell, es un hombre de verdad, el hombre anticuado, duro, recio, seguro. Representa la testosterona y los cojones. Aún seduce con su carisma, pero está en declive, sus logros no son reconocidos y menos aún por superhembras jóvenes que no encuentran al "Nuevo hombre" que las satisfaga en su ciega búsqueda de un complemento.
Especialista Mike desahoga su frustración sexual arrollando a esas putas con su fálica máquina de matar que representa su virilidad, sus logros, su vida y su trabajo.
Su coche es su bandera y las mujeres que le desprecian su objetivo.
El final es plano, el cazador cazado, la nueva mujer es como un hombre, sodomiza el coche de Mike hasta volcarlo y luego le meten una somanta de ostias. El hombre rancio ha muerto y su lugar lo ocupan esta nueva raza de uber-hembras dueñas de su coño y su destino.
No me lo habia planteado desde ese punto, pero creo que ha dado usted en el clavo, sinceramente.