aqui una cosa que me pasaron por mail...
Manual rápido de cómo perder un Mundial de F-1 con los coches más rápidos.
Un sinfín de errores y unas dosis de mala suerte -el gafe que acompaña a Kimi- explican el aciago año de Ferrari.
Los bólidos rojos se han teñido de negro tonalidad cafre este curso 2008, uno de los más desastrosos para la Scuderia. Con el título de Constructores en peligro (McLaren le saca un punto) y el de pilotos casi perdido (en 7 puntos aventaja Hamilton a Massa y en 27 a Raikkonen, con 30 en juego), los capos italianos se tiran de los pelos. ¿Cómo es posible perder un Mundial, o los dos, con los coches más rápidos de largo de la parrilla? No todo es cuestión de máquina. Un sinfín de errores y unas dosis de mala suerte - el gafe que acompaña a Kimi- explican el aciago año de Ferrari, y justifican que los tifosi clamen por unas manos delicadas como las de Alonso. En 15 carreras, al finlandés y al brasileño se les han esfumado al menos 55 puntos.
Problemas mecánicos (puntos perdidos: 18. KR: 8; FM: 10)
Los coches más rápidos no siempre son los más fiables: cuatro motores han roto los Ferrari, dos cada piloto, aunque Kimi se ha llevado la palma de la desgracia mecánica. Empezó con mal pie en Australia, con problemas en la bomba de gasolina que le impidieron participar en la Q2 e hipotecaron su carrera (tuvo que salir 15. º ) , y en la prueba, tras remontar 7 puestos en la primera vuelta, rompió el motor a falta de 5 vueltas, cuando era séptimo. En Francia se le rompió el escape cuando era líder y acabó segundo, cediendo la victoria a Massa. Y en Valencia volvió a rompérsele el propulsor cuando iba 5. º .
Pero el mayor infortunio, el colmo de la desdicha, lo conoció Massa en Budapest al romper el motor a falta de tres vueltas, cuando iba líder y tras una de sus mejores salidas (devoró a los dos McLaren en el arranque). En Australia, ya había roto un motor cuando era séptimo.
Despistes del equipo (puntos perdidos: 13. KR: 3; FM: 10)
La calamidad de Ferrari roza lo cómico, casi siempre con Raikkonen en el papel del Coyote. En Malasia, Kimi se quedó sin gasolina en el primer entreno por un despiste del equipo, que le cargó menos carburante. Lo de Mónaco fue de chiste: le penalizaron con un drive through (paso por la calle de garajes) por haber cambiado las gomas de lluvia fuera de tiempo. La broma le costó dos puestos, del 2. º al 4. º . Más problemas en agua: en Gran Bretaña, marchaba segundo, pegado a Hamilton (a 2s7), su equipo prefirió no calzarle las gomas de lluvia en el pit stop,pensando que no llovería. Al volver a pista cayó el diluvio, Hamilton se le fue para siempre (a 25s), y Kimi tuvo que regresar a ponerse las botas de agua 10 giros después. Perdió la opción de ganar; aun así acabó cuarto. En Silverstone, a Massa le arruinaron la carrera desde la qualy:un problema en el cambio de ruedas le dejó sin tiempo para hacer un segundo intento de pole.Tuvo que salir 9. º ; luego culminó el desastre con un recital de trompos.
Aunque lo más ridículo han sido sus pit stops precipitados, atropellos incluidos: Kimi arrolló a un mecánico en Valencia y Felipe le emuló en Singapur, arrancando con la manguera puesta. Tuvo que detenerse al final del pit lane para que se la extrajeran, con el triunfo a la basura, y un drive through posterior por salir de forma peligrosa. El error fue humano: para permitir arrancar al piloto en el pit stop,Ferrari es el único equipo que utiliza un semaforito de activación electrónica (cuando la gasolina deja de entrar en el depósito), pero que acciona un mecánico en el caso de repostajes en situación de coche de seguridad. Kimi se coló él solito; a Massa le indujeron al error.
Errores de pilotaje (puntos perdidos: 24. KR: 16; FM: 8)
Seis fiascos (un cero en el casillero) acumula Kimi; cinco Massa. Así es complicado ganar un Mundial. Lo peor es que la mayoría de puntos escapados se debe a fallos de pilotaje. Entre los más flagrantes de Kimi se recuerdan la embestida de Mónaco a Sutil, al salir del túnel, donde frustró al alemán los primeros puntos de su carrera y el finlandés cayó fuera de los puntos al tener que cambiar el morro (del 5. º al 9. º puesto). En Bélgica, además de romper el coche contra la valla en los libres, en carrera volvió a estamparlo contra el muro justo después de que le adelantase Hamilton y le apartase del primer puesto, a falta de dos vueltas. La desgracia regresó en Singapur: estrelló el F2008 al perder el control tras saltar una chicane, a falta de 4 vueltas, cuando era 5. º . Massa naufragó en mojado. Desastrosa fue su conducción en Silverstone, donde el entonces líder del Mundial dio cinco trompos, y acabó 13. º . Aunque su peor actuación fue en Malasia, donde un trompo le clavó en la gravilla y finiquitó su carrera cuando iba cómodamente segundo.
Por culpa ajena.
Lo más fácil es tirar la culpa a otro, a la mala suerte o a la lluvia. Pero en Ferrari, el factor externo ha influido poco en sus desgracias. En la cuenta de culpables ajenos figura Hamilton, que embistió a Kimi en Canadá con el semáforo detenido para salir del pit lane,y le forzó a abandonar. Y en Alemania, al finlandés le perjudicó la salida del safety car y las órdenes de equipo, pues iba 5. º y tuvo que esperarse en el repostaje a que lo hiciese Massa (iba 2. º ) , por lo que cayó al 12. º y se disiparon sus opciones. Y, sumando aquí y allá, se han esfumado todas las de revalidar su título.
FUENTE:
Manual rápido de cómo perder un Mundial de F-1 con los coches más rápidos

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