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IRON MAIDEN - "No Prayer For The Dying" - 1990
Llegamos a un momento jodido, no solo para IRON MAIDEN, también para la música en general. En la década que entraba, los putos 90, las cosas iban a cambiar mucho, pero este hilo no se ha hecho para analizar tendencias, modas y mierdas. Aquí estamos para lo que estamos.
La gira del “Seventh Son…” y su concierto como cabezas en el Monster les habían puesto en el puto candelabro. Pero había un problema que jodia a Harris: el disco en EEUU no había tenido mucho impacto. Se les acusó en aquel momento de que el disco tenía un sonido demasiado europeo. Es difícil de comprender, pero así es. Es algo que no se puede explicar, si alguien puede que lo haga, pero el disco, sí, tenía un sonido europeo.
Después de la gira la banda se tomó un año sabático para poner la cabeza en orden y pensar en el siguiente paso. Dickinson se dedicó a sacar un disco en solitario “Tattoed Millionare”, con muchos temas e ideas que habían sido rechazadas para MAIDEN (con la excepción de “Bring Your Daughter To The Slaugther” que en cuanto Harris la escuchó la quiso en el próximo disco de IM). El disco de Bruce tenía un rollo más rockero, y la temática era más realista, alejada de la historia y de la fantasía. Como guitarra de apoyo estaba el talentoso Janick Gers, que había tocado en la banda de Gillan y había dado sus pasos en la NWOBHM con la fantástica banda WHITE SPIRIT y con los mediocres GOGMAGOG (con DiAnno a las voces, qué cosas no?). El disco recibió buenas críticas y se permitió el lujo de hacer una pequeña gira por Inglaterra con un par o tres temas de MAIDEN en los conciertos. Por otro lado, Adrian Smith sacaba adelante su proyecto ASAP (Adrian Smith And Project).
El resto de la banda replegaba ideas y se mantenían alejados para despejarse. Cuando Harris los llamó a filas, cada uno empezó a presentar ideas. Contrariamente a lo que era habitual, Smith no traía apenas nada, y entonces ocurrió una conversación entre este y Harris que ha pasado a la historia:
Smith:
lo siento, solo podré estar al 90% en IRON MAIDEN.
Harris:
en IRON MAIDEN se ha de estar al 110%
Así que Smith abandona el barco provocando un cisma en miles de fieles que tenían en un pedestal al hacha. Pero solo se tardó siete días en dar a conocer al nuevo miembro, y fue Janick, el guitarra que compuso, toco en estudio y en directo en el disco de Bruce. Todo esto provocó mucha incertidumbre en los seguidores, pero había más cosas que barruntar hijos de puta, eran tiempos complejos joder: la prensa seguía enterrando a MAIDEN, el sonido del disco en solitario de Bruce hacía crecer suspicacias de lo que podía pasar, el empecinamiento de Harris en atacar el mercado americano creando algo que se alejara de su zona de confort, y además que vuestra madre es puta, eso lo sabe Dios y los Apostoles. Y por supuesto, ¿qué aportaría Janick? ¿Cómo sería su estilo? ¿Se adaptaría al sonido clásico de la banda, se conjuntaría con Murray, cuánto le mediría el cipote?
No hay que olvidar, que uno de los principales compositores de los dos anteriores trabajos de la banda había sido Adrian Smith, así que ojo, el cambio no era cualquier cosa.
Todos estos factores, y las modas imperantes marcarían el fin de la era dorada de la banda. Sin olvidar la necesidad cada vez más grande de Bruce de volar solo. Pero había más factores: en EEUU se había iniciado una guerra contra las bandas de rock y la mierda del PMRC que eso da para hilo propio. Harris estuvo en el ojo del huracán de muchas críticas e incluso estuvo metido en juicios con algún meapilas folla-monaguillos.
Todo esto influyó en el disco. En aquel momento los seguidores no fuimos conscientes, pero en el disco se refleja todo lo que estaba pasando alrededor de la banda, pocas cosas positivas la verdad. Incluso para desafiar a la censura, Harris le pidió al dibuajnte Derek Riggs que hiciera una portada enfermiza para joder a la cristiandad. Se le presentaron varias propuestas a Harris y Smallwood, y todas fueron rechazadas. Al final se quedaron con una portada que no hacía justicia a su pasado ni su legado, a saber como eran las rechazadas.
Y bien, llegá “No Prayer For The Dying”. Temas a destacar: la banda quería un disco muy directo, sin teclados, sin historias raras, a la yugular, con un sonido muy crudo. La lírica era muy realista, contra la iglesia, liricas más sociales, más ancladas en la realidad, algo que hasta ahora no habían tocado. Creo que a Martin Birch por primera vez (Martin a estas alturas ya trabajaba en exclusiva para MAIDEN) se dejó embaucar, porque me juego mi login de forero que el sonido que quería la banda a él le parecía una puta mierda.
Los temas son livianos, muy simples, sin estructuras enrevesadas ni grandes pasajes instrumentales. Yo creo, y esto es algo muy personal, que intentaron captar el espíritu y estilo del “Killers”, pero no lo consiguieron. Y no lo consiguieron porque no tenían el hambre, ni la rabia, ni la necesidad de aquellos primeros años, es imposible.
Y otro punto que encuentro determinante sobre el estilo del nuevo trabajo, es que Harris quería éxito en EEUU. El tema de la censura, del PMRC, de los juicios y de toda la mierda que se dijo sobre la banda afectó mucho a Harris y quería arrasar el país, por eso el disco está muy enfocado hacía aquel mercado, sin entrar en la comercialidad, pero si con temas muy directos y simples que eran más apropiados para el público useño.
Hasta ahora he estado ladrilleando sobre el concepto y estilo del disco, pero sin entrar en las canciones… pero es que es muy importante el entorno que envolvía a la banda. Una banda es muy frágil, cualquier cosa puede desestabilizarla por completo, y en MAIDEN estaban rodeándose de terremotos. Pero esto no era todo, y lo que voy a contar ahora poca gente lo sabe, o al menos eso creo: La gira de “No Prayer on the Road” finalizó antes de tiempo por la guerra del Golfo, y al finalizar la gira, Bruce le comunicó a Harris que quería dejar la banda para emprender su carrera en solitario. Harris le pidió a Dickinson aguantar un disco más y luego largarse, ya que había muy buenas ideas para el nuevo trabajo. Imagino que Harris intentaría ganar tiempo y convencerle, pero eso vendrá en el próximo capítulo. De todos modos esa tensión y mal rollo en el escenario durante las dos siguientes giras y la gira de despedida era más que evidente.
El disco salió en LP, en Cd, en Cassette, y en una edición especial para USA en picture disc con otro aportada (abajo a la derecha la tenéis), una pieza codiciada.
Sobre los temas del disco… bueno, sinceramente es un disco agradable, se deja escuhar, es otra historia. Pero siendo honestos, si no fuera un disco de IM estas canciones en cualquier otra banda habrían pasado sin pena ni gloria. La mayoría son un quiero y no puedo, una declaración de intenciones pero que no acaba de cuajar del todo. El pobre Gers poco o nada tenía que ver, tocó lo que le dijeron y en directo la verdad es que cumplió con creces dando un nuevo aire a la banda sobre el escenario aportando frescura e intensidad. Esta fue la primera gira donde los vi, en el Palacio de los Deportes de Barcelona, con ANTHRAX de teloneros, y la verdad es que acostumbrado a soñar con ellos y saberme de memoría el “Live After Death” y el “Maiden England”, aquello fue una decepción total. Ropas de calle, escenario solo con amplis, sin efectos, sin parafernalia… querían llenarse de esencia, pero habían olividado la suya propia. Decir también que ANTHRAX les robaron el concierto con una actuación brutal.
Pero aquí no hemos venido a hacer clases de historia, hemos venido a hablar de música, vamos a los temas, pero antes un comentario más. Para la comunicada metálica, este disco marcó un antes y un después. Se acabó la era clásica, y empezaba un declive que duraría unos pocos años, por eso este disco tiene tan mala prensa. Además, no había producciones titánicas en los conciertos como las pollas foreras medias (tocaron en recintos muy reducidos), el cambio de temática en las letras, la falta de ideas de Harris, el cambio en el estilo de cantar de Bruce, el cambio en la producción y el sonido…
Sobre la forma de cantar de Bruce y la producción, comentar que hay dos versiones o al menos eso pienso yo dentro de mi retraso que también es el vuestro: querían dar un toque más barriobajero (recuperar como ya he comentado no sé dónde el rollo de “Killers”), o que Bruce estaba muy jodido de la voz. En el tramo final de la gira del “Seventh Tour” estaba afónico como una puta de León recibiendo ensaimada en el boquino.
También comentar que Smith estuvo en la pre-producción del disco, y su marcha fue debido a que no estaba a gusto, aparte de querer emprender su carrera en solitario no estaba cómodo con los nuevos temas. Aún así hay un tema a medias con Dickinson con su firma. Ahora sí, vamos a los temas. Vaya ladrillo joder.
“Tailgunner” promete más de lo que da. El inicio es brutal. Ese riff sencillo, el bajo de Harris martilleando y una guitarra creando tensión, caja y Bruce al ataque. El binomio compositivo Dickinson/Harris como máximo exponente de este disco. Me mola la estrofa, los dibujos de guitarra que hay debajo de la voz de Bruce, Nicko dando caña al charles lo cual no es muy habitual. Pero es que el estribillo se me queda pequeño, le falta una vuelta. La parte instrumental es de las más cañeras del trabajo, pequeña armonía, solo con cambio de tempo y estructura, y vuelta con un segundo. Aquí ya se deja entrever el aire fresco de Gers. Desde luego su forma de tocar es más sucia y rockera, no tan bluesy como la de Smith, pero aún así con Murray se entiende cualquier buen guitarrista.
Nuevamente Dickinson y Harris para el primer single del trabajo:
“Holy Smoke”, metiéndose a saco con predicadores e iglesia. Nunca la banda había sido tan directa en sus letras. Como ya he comentado, Harris acabó muy jodido con la persecución a la que fue victima por parte de los follaniños de la iglesia useña. Un tema muy pesado, muy Heavy, muy cañero, muy rápido, su inicio es casi un medio tiempo pero con la entrada de Bruce se acelera. Fijáos en la batería, es super básica. Acostumbrados a las virguerías de Nicko aquí se aprecian unas líneas más simples para intentar conseguir ese espíeritu añejo. Si lo consiguen o no a mi no me sale de los cojones decirlo, os lo dejo a vuestra mierda de opnión que ya sabéis que no vale ni para tomar por culo. Un tiro de tema, siempre me ha dado muy buen rollo y me ha parecido un tema recuperable para los directos actuales. El solo es estratosférico y cargado de efectos de la mano de Gers, donde ya se puede apreciar el rollo que lleva.
“No Prayer For The Dying” es tema de Harris, un medio tiempo cargado de nostalgia y de un rollo que siempre me ha gustado mucho. Eso yes, hay que abstraerse de sus dos anteriores obras para poder apreciar no solo este tema, todo el disco en general. Armonía inicial sobrecogedora, y unos pequeños teclados de fondo antes de la entrada de un Bruce melancólico, casi dramático haciéndose preguntas sobre la existencia y el sentido de las cosas. Fin de estrofa, vuelve la armonía, no hay estribillo; segunda vuelta, y ojo a los arpegios casi imperceptibles que hay escondidos debajo de la voz de Bruce. La parte instrumental mantiene el tempo y la tensión hasta la llegada de los solos donde se acelera de forma drástica. Un buen cambio, como en los viejos tiempos aunque con un rollo más riffero, más rítmico. Después del duelo entre Gers y Murray vuelve a entrar Bruce en un final de traca exigiendo respuestas a Dios y retorno a la armonía inicial. En poco más de cuatro minutos consiguen un climax y que les chupemos la polla. Temazo.
Y en esta parte del disco empieza el bajón después de un inicio harto prometedor.
“Public Enema Number One”, ya el título me da por culo, y es que IM nunca ha sido una banda con sentido del humor, esto iba en serio. Murray y Dickinson componen un tema que empieza con una armonía marca de la casa, muy buena, pero la estrofa es algo así como extraña, recuerda a algunos pasajes de “Piece of Mind” en rítmicas y el rollo que le da Bruce, bajada de revoluciones en un estribillo poco inspirado. Eso sí, buenos solos, una labor encomiable por parte de los dos hachas. En este tema y en otros tantos, lo mejor es la parte instrumental. Donde Harris no estaba al nivel, creo que Murray, Gers y en ocasiones Dickinson lo dieron todo.
“Fates Warning” de Murray y Harris cierra la cara A, escuchad el inicio, y decidme que no os recuerda a “Somewhere in Time”, estoy convencido de que muchos retazos de esta copla son descartes de esa época. Aquí mola mucho el bajo de Harris y la base, subid el bass y apreciadlo que vale la pena. Vuelve a fallar la melodía vocal, instrumentalmente el disco es un tiro, pero las melodías vocales ensombrecen algunos temas, y este es un claro ejemplo. Si tenéis la oportunidad escuchad este tema sin la voz de Bruce, y veréis que es sensacional, pero con la parte vocal pierde. Antentos a lo que hay debajo de esta canción que es muy bestia. Tras el segundo estribillo hay un puente que sigue sin encajar del todo. No sé, no entiendo como a cortes como este (y en el disco hay al menos 3 con este problema), no se les dio otra vuelta más.
La cara B empieza de forma un poco gñé con
“The Assassin” de Harris. Ni fu ni fa. Un bajo muy prominente sobre un ritmo repetitivo que va dando entrada a las guitarras y entra Bruce de forma casi susurrante. Que en el disco querían tener un rollo “Killers” es evidente, y no lo digo por el título de esta canción. Pretende crear tensión, misterio, algo maligno, pero no, no llega. Nuevamente instrumentalmente ni un pero, pero Dickinson y sus melodías vocales… no me enganchan. El estribillo es para olvidar.
“Run Silent Run Deep” de Dikinson y Harris siempre me fascinó. Recuerdo cuando era un chaval este tema me volvía loco, me encantaba. Aquí si que hay un encaje perfecto entre música/melodías vocales y arreglos. Machacona, con un Bruce excelso, en otro tema muy crudo, muy potente, con una estrofa rabiosa y un estribillo con un rollo muy alegre y con un Bruce subiendo el tono como antaño en uno de los momentos más inspirados del trabajo. Los solos correctos, y al final de los mismos armonía con un rollo muy HELLOWEEN, muy Power. Temazo.
“Hooks In You” es la única aportación de Smith antes de irse, compuesta a pachas con Dickinson. Un rollo muy bluesy, recuerda mucho a “Holy Smoke” de este mismo trabajo. Trepidante, vacilona, rápida… lo que en otros discos hubiera sido una cara b de un single, aquí es un tema con todos los derechos. Me molan los dibujos de guitarras, los detallitos que a veces pasan desapercibidos, y el puente antes de los solos que le da un aire más dinámico a un tema algo repetitivo, ya que tanto la estrofa como el estribillo tienen un tempo y una base muy similar, como si hubiera prisa por acabar.
“Bring Your Daughter… To The Slaughter” de Dickinson formo parte de la BSO de la mierda de película “Pesadilla en Elm Street 5” por el culo te la hinco. También estuvo en el disco en solitario de Bruce, y Harris la quiso para este trabajo por el potencial que tenía como sencillo, no en vano fue el segundo single escogido. Nunca entendí el bombo que se le dio a este tema, incluso formó parte de su repertorio en directo bastantes años. Si que tiene una ambientación muy buena. Es un tema donde todo encaja. Mola mucho el bajo, y sus líneas son un ABC para cualquiera que quiera iniciarse. El estribillo tiene su rollo humorístico, algo hasta ahora impensable pero mola, el tema mola, quizás está demasiado trillado y no ha tenido el recorrido que otros que tienen 40 años y siguen sonando frescos. Eso yes, el solo es sensacional, y tras éste, el retorno con esos coros de fondos en un tempo más pausado y el retorno al estribillo es casi mágico, marca de la casa.
Y cerramos el trabajo con el tema de Harris así rollo épico,
“Mother Russia”, la cual es un puto despropósito y en parte una vergüenza si las comparamos con otras epopeyas históricas pasadas. Recuerdo en una entrevista a Harris comentar que le dio un poco de vergüenza presentar este tema al resto del grupo, pero que todos le felicitaron. Puta droga tete. Rollo marcha militar rusa, con un ritmo marcial y pausado y un Bruce cantando de forma un tanto cretina con un tono que me parece algo ridículo a estas alturas.
Vamos a los singles, que salieron tanto en Cd-single, como en 7”, como en 12”, algunos en edición normal, otros en picture, con portadas diferentes...otra comedura de cabeza para los coleccionistas.
El primero fue
“Holy Smoke”, una vez más unas semanas antes de la salida del trabajo. El 7" en su cara B tiene la versión "All in your Mind" del grupo inglés STRAY, del que Harris se declaró ferviente seguidor. Un tema que sigue la tónica del trabajo, con mucho bombo, mucho bajo y un rollo muy setentero. En el 12" además teníamos el tema "Kill Me Ce Soir", versión de la formación holandesa GOLDEN EARRING de mediados de los 70. Un tema curioso que siempre ha tenido un rollo muy chulo. Un medio tiempo con unos teclados que marcan la pauta.
El segundo single fue
"Bring your daughter...", en la cara B versión de FREE con "I'm a Mover", y en el 12" versión de LED ZEPPELIN con la cañera "Comunication Breakdown". Versiones poco habituales y arriesgadas.
Además sacaron el video VHS recopilatorio "The First Ten Years - the Videos" con todos los videos editados hasta la fecha, la mayoría de ellos olvidables.
Fin de una era, inicio de una década que trajo nuevos vientos y nuevos retos. La gira fue un desastre, el disco una medianía comparado con su legado, pero Harris no se iba a quedar quieto ni mucho menos darse por vencido.