Yo sigo preguntándome qué es lo que persiguen grabando una detención. ¡Oh, mira, la policía deteniendo a alguien! ¡Que alguien los detenga!
Deberían ir de tres en tres los policías: uno para reducir al sospechoso y detenerlo y dos repartiendo gomazos a los que sacan el móvil no sé para qué.
Persiguen inhibir o documentar un posible abuso policial.
¿Hay alguna ley en España que prohiba grabar una detencion?
Yo grabé una en Canadá, en un momento dado un policía me dijo “retrocede, puedes grabar, pero no pases de aquí”.
Por lo demás no me pronuncio sin conocer los antecedentes. No se quienes son, si van con el detenido, si gritaban o insultaban etc.
Lo que me molesta es que parecen españoles. Cuando, como suele suceder, los rijosos son gitanos, moros o negros, se les respeta mucho más, siendo que ellos respetan mucho menos. Creo que la policía española discrimina a los ciudadanos españoles y favorece a los gitanos y demás extranjeros.
Yo una vez vi a unos policias quebrantando el estado de derecho, me cogí mi videocámara y los fui a grabar, estaban uniformados en un coche de paisano, yo me puse a grabar alrededor del coche, salió uno a discutir, que si estaban averiados...”averiados tienes los cojones”...que si no veo el uniforme, que si me pienso que es un traje de payaso...si esta de servicio adelante, quien se lo impide, yo solo ejerzo mi derecho a filmar...me da un manotazo violento en la mano intentando tirar y/o romper la cámara, me amenaza de muerte, dice que me va a pegar un tiro, se mete al coche...
Huyen (yo tambien huí andando, pero cuando vi que se iban volví ladrando como el hijo del gallo claudio)
Total que la pantalla de la cámara, de esas que se separaba, quedó algo floja, pero siguió sirviendo, y se me hinchó un poco el lateral del dedo junto a la uña.
No es la primera vez que hago huir a unos policías maleantes. En una ocasión me pararon circulando en coche, me registraron el maletero, yo se lo abrí y les permití, pero fingí hablar por telefono, me preguntaron algo que denotaba dudas acerca de mi profesión, yo contesté que hicieran su trabajo, que yo estaba haciendo el mío...huyeron.
En otra ocasion fue algo dantesco, acusé a unos de delincuentes y vino su jefe que era más grande que yo y nos pusimos a gritarnos a la cara, yo no sé qué le decía pero el me decía que me iba a meter dos tiros que blao blao.
Creo que ganó él la discusión. Luego se retiró unos metros entre ofendido y ofuscado y sus secuaces intentaron quitarle hierro al asunto. Luego me fui. Luego me quedé algo mosca y volví, según llegaba...huyeron.